CASO ÉTICO

CASO ÉTICO: Juan trabaja como Ingeniero en Logística en una empresa de artículos deportivos, ubicada en el sector norte de la capital. Básicamente, se encarga de monitorear todo el proceso de almacenaje y traslado de artículos deportivos hacia los diferentes puntos de venta, ubicados mayoritariamente en el sector centro de Santiago. Y también está encargado de realizar los informes finales de todo el proceso. Entre los trabajadores de su equipo se encuentra Manuel, quien es el jefe de una empresa de transportes, y hasta ese momento, su mano derecha y hombre de confianza.

En una oportunidad, Juan descubre a Manuel hablando junto a su equipo de choferes, respecto a lo fácil que es burlar todos los protocolos de seguridad, ya que confesaron que cada uno –al menos– se ha llevado a su casa algún implemento deportivo (zapatillas, buzos, etc.), sin que su jefatura se diera cuenta de la situación, y que esto ya era una práctica habitual en el equipo de trabajadores, por más de un año.

Al día siguiente, Juan llama a Manuel a su oficina y le exige la renuncia inmediata de él y todo su equipo de trabajo por aquella conversación. Manuel, sorprendido, le suplica que no lo deje sin su fuente laboral, ya que justamente va a ser papá dentro de poco, y sería muy grave si queda en este preciso momento sin trabajo. Pero, además, Manuel le ofrece el 50% de estos “negocios” realizados entre él y su grupo de choferes, y le dice que está todo tan bien articulado entre él y su equipo, que no los descubrirán. Agrega, además, que ellos comenzaron con estas actividades “ilícitas” hace más de un año, y que tienen la habilidad de adulterar todos los controles para que no detecten la falta de los productos, y que con la incorporación de Juan al “equipo”, todo sería muchísimo más fácil para ellos, así es que lo invita a sumarse a este equipo “de trabajo”. Después de pensarlo un par de días, Juan se incorpora a este “equipo”, quedándose con el 50% de las ganancias por las mercancías robadas, y ayudando a los choferes a que esta situación no fuese descubierta, a través de la adulteración de los informes finales y del encubrimiento de esta situación (a través de mentiras) ante su jefatura directa.

Sin embargo, a los seis meses, la empresa decide contratar un servicio de auditoría externo, por lo cual todo este montaje entre Juan y Manuel es finalmente descubierto, por lo que todos los involucrados son despedidos de la empresa. A partir de ese entonces, la empresa decide colocar estándares mucho más rígidos para evitar en el futuro situaciones de robo como esta.

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