Taxco

Taxco: “Un tesoro histórico en las montañas de Guerrero”

Taxco: “Descubriendo la magia de la ciudad de la plata”

Taxco: “Una ciudad llena de color y tradiciones”

Antes de la llegada de los conquistadores españoles, el pueblo de Tlachco, hoy conocido como Taxco el Viejo, fue habitado por nahoas. Su nombre se traduce como "Lugar donde se juega pelota", en referencia al juego ritual en honor al sol que se practicaba en canchas que se construían para ese fin. El juego era muy singular, ya que los participantes pasaban una bola de caucho o pelota por un aro de piedra empotrado en la pared, usando partes específicas de su cuerpo, a excepción de las manos. Este deporte era muy popular en la región y atraía a multitudes que se sentaban en las gradas, como se hace actualmente.

Con la llegada de los españoles, la región de Taxco se convirtió en un importante centro minero, explotando las ricas vetas de plata de la zona. A partir de 1742, la ciudad de Taxco comenzó a experimentar un crecimiento económico y social sin precedentes, y en la actualidad, la minería sigue siendo una de las principales actividades económicas de la ciudad.

Además de su importancia económica, Taxco ha sido escenario de importantes eventos históricos y políticos. Durante la Guerra de Independencia, se redactó en Taxco el Plan de Iguala, uno de los documentos más importantes en la lucha por la independencia de México. La ciudad también jugó un papel importante en la Revolución Mexicana, ya que las fuerzas de Carranza utilizaron Taxco como base en 1916.

Taxco también ha sido cuna de importantes figuras culturales e intelectuales. El escritor Juan Ruiz de Alarcón, considerado uno de los grandes dramaturgos del Siglo de Oro español, nació en Taxco en 1580. Además, reconocidos naturalistas e historiadores, como el Barón de Humboldt, han visitado la ciudad y dejado su huella en ella.

La ciudad de Taxco es hoy en día un importante destino turístico, gracias a su rica historia, sus tradiciones y su belleza arquitectónica. Con sus angostas calles empedradas, sus casas coloniales con techos rojos y su impresionante iglesia de Santa Prisca, Taxco es un verdadero tesoro colonial que atrae a visitantes de todo el mundo. En definitiva, Taxco es un lugar lleno de historia y tradición, en el que se respira el espíritu del antiguo juego de pelota y se siente la emoción de los momentos históricos que han moldeado su destino.

Taxco es una hermosa ciudad en la Región Norte del Estado de Guerrero, México, donde el comercio de artesanías y la actividad turística son parte integral de su vida cotidiana. A pesar de las dificultades que enfrenta la industria turística en todo el país, Taxco mantiene su encanto y sigue siendo un destino atractivo para los visitantes que buscan una experiencia única.

La ciudad se caracteriza por su ambiente tranquilo y su falta de contaminación industrial, lo que hace que la vida sea más saludable para sus habitantes y visitantes. Al caminar por sus calles, se puede apreciar la dedicación y pasión de los artesanos locales, quienes trabajan arduamente para crear hermosas piezas de joyería de plata, madera y otros materiales.

Aunque la ocupación hotelera ha disminuido en los últimos años debido a la inseguridad y la violencia que se vive en algunos lugares del país, Taxco sigue siendo un destino turístico seguro y atractivo para los viajeros que buscan una experiencia auténtica y cultural. Los vendedores y artesanos de la ciudad reciben a los visitantes con los brazos abiertos y ofrecen una amplia variedad de productos a precios accesibles.

Además, la vida en Taxco tiene su propio ritmo, con los vendedores de plata abriendo sus tiendas en la mañana y los negocios de productos de madera, flores de papel y joyería comenzando su jornada un poco más temprano. A lo largo del día, la ciudad se llena de actividad y movimiento, con invitaciones a los turistas para que descubran las maravillas de la ciudad.

A pesar de que muchos de los habitantes de Taxco ganan salarios bajos en empleos relacionados con el turismo, hay una gran camaradería entre ellos y una fuerte conexión con la rica cultura e historia de la ciudad. Además, aunque el precio de las artesanías puede variar, la calidad y el trabajo artesanal son excepcionales y las piezas son verdaderamente únicas.

En resumen, Taxco es una ciudad llena de encanto, tradición y cultura, con una industria turística vibrante y dedicada. A pesar de las dificultades, los habitantes de la ciudad continúan trabajando con dedicación y pasión, creando piezas excepcionales y compartiendo su hermosa ciudad con los visitantes de todo el mundo.

Taxco es un lugar que invita a los turistas a caminar por sus calles empedradas, recorrer la avenida principal, perderse en sus intrincados callejones y recorrer las platerías donde se ofertan diseños únicos y exclusivos de plata.

La ciudad cuenta con numerosos lugares de interés, entre los que se destacan las plazas e iglesias. La Plaza de la Veracruz, de Bernal, de los Gallos, Plaza Hidalgo, son algunas de las plazas que se pueden encontrar en Taxco. En cuanto a los templos, destaca la imponente iglesia de Santa Prisca, que fue construida en solo 10 años por don José de la Borda. Los altares de la iglesia están cubiertos por hojas de oro de 22 kilates y su estilo es barroco churrigueresco del siglo XIII.

Además, se pueden visitar otros templos como el de San Nicolás, la Santísima, del Señor de Ojeda, de San Miguel, la Capilla de Guadalupe, Santa Prisca, el convento de San Bernardino de Sena, y el templo de Chavarrieta. El Museo de William Spratling también es una parada obligada para conocer la historia de la minería de Taxco y las piezas arqueológicas que Spratling coleccionó.

La ciudad se caracteriza por sus calles empedradas, techos construidos en madera y tejas, y líneas elaboradas con piedras de diferente color en el centro de la avenida. Las paredes y fachadas de las viviendas son de color blanco por normatividad de la Junta de Conservación del Ayuntamiento, logrando una cierta homogeneidad en el paisaje arquitectónico.