Los de abajo.

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Los revolucionarios vuelven al campo, en la brigada de Macías que ya cuenta con estado mayor, pues Montañés es coronel, pancracio teniente coronel, y Cervantes y Margarito mayores, se dirigen a la tierra de Demetrio y del cacique, el pueblo lo recibe sin miedo y Macías abre a balazos la puerta de la casa del cacique, este al principio se esconde, pero es localizado donde trataba de ocultarse, el cacique pide piedad, pero Demetrio recordándole su casa en llamas que había mandado prohíbe el saqueo de la casa de que sus soldados se disponían hacer junto con las gentes del pueblo. Macías mata a uno de los suyos que no le obedece y después ordena a incendiar la casa, nadie comprendió el proceder del general. A Demetrio no le importa el dinero, él dice “con que no me falte el trago y contraer unas chamaquitas que me cuadre soy el hombre más feliz del mundo” con esto también dice que extraña a Camila, y Cervantes va a su casa a traerla con engaños diciéndole que es su amor, cuando la pintada se da cuenta de esto, trata de ayudar a Camila a regresar a su casa, pero esta le responde: “pues es que ya le voy cobrando voluntad” refiriéndose a Demetrio, la partida de Demetrio vuelve a abatir a unos cristeros, Demetrio estaba desilusionado, ya que esperaba combatir a unos morisquitas, y no hubo ni siquiera combate formal, otros muy contentos pues lograron grandes avances en la casa del cura al que mataron, y en la iglesia del pueblo que saquean sin escrúpulos.

El güero Margarito regresa con la pintada revela una vez más su crueldad al traer atado a un prisionero federal al que atormenta.

En una escena que transcurre en el pueblo del valle, el autor da a reflejar la tristeza que comienza a apoderarse de Demetrio y de los suyos, lo atribuyen a que están lejos de la sierra y Macías piensa por un momento en su esposa y no logra representarse en la imagen de su hijo, lo ha olvidado, y el pesimismo se apodera de Demetrio. Luis se dedica a comparar a los soldados, todo el producto de sus avances y aprovecha cualquier coyuntura para adquirir nuevos atuendos a precios miserables, y lo hace además con el dinero de la abrigada que admiraba a su favor engañando a Demetrio, este ha perdido totalmente cualquier recibo de ayuda a los necesitados y no solo tolerara que sus soldados entren al pueblo a saquear si no que al recibir las quejas de uno de los robados su única reacción es contestar con indolencia “pos pa que se dejan”, solo la intervención de Camila logra de vez en cuando reponer algunas d las grandes injusticias que cometen los revolucionarios, en cambio Demetrio se entera de nuevas crueldades de el güero Margarito que hace la revolución con el único objeto de hacer sufrir a los demás, divirtiéndose con cualquier sufrimiento ajeno. Camila manifiesta su antipatía por Margarito, y la pintada la tira del caballo, rompiéndose la frente.

Demetrio recibe órdenes superiores de volver a Tepatitlán, dejar a su brigada y dirigirse a Aguascalientes a tomar parte de la convención de generales. Camila que siente la constante animadversión de la pintada, pide permiso a Demetrio para irse a su tierra pero este la retiene, asegurando que echara a la pintada, en efecto, Demetrio indica a la pintada que ya no siga con ellos, a lo que esta responde violentamente insultando a todo mundo y tratando de acogerse a su amante el güero Margarito pero este también la desprecia y la abandona, creyendo que todo esto era obra de Camila, la pintada saca un cuchillo y lanzándose hacia Camila la mata a puñaladas, Demetrio ordena que la maten, pero la pintada se defiende con su cuchillo y lo entrega a Demetrio, retándolo a que sea él quien la mate, demtrio no se atreve y la echa del regimiento.

Al llegar a lagos el güero Margarito que iba con Demetrio a Aguascalientes trata de sacar a este de la Murguía que tiene por la muerte de Camila, para esto, entra a un bar en el que el güero hace todo tipo de barbaridades, su crueldad llega al máximo al herir sin motivo alguno a los parroquianos, volar de un balazo una oreja del museo del lugar y hacer bailar a los transeúntes que encuentra, tirándoles a los pies. Demetrio lo abandona a medias barbaridades que el güero había cometido en el vagón del tren que le llevan a Aguascalientes. El autor pinta con realismo el ambiente de los revolucionarios, para el güero Margarito es peor robar que matar y sobre todo cuando el que roba es un curro, cuando reconoce que él también ha robado, con ese motivo todos los del vagón comienzan a relatar sus robos y delitos.

Demetrio toma consejo del general Natera, y este le indica que la bola va a seguir, ahora Villa contra Carranza, Demetrio admite seguir peleando y cuando Natera le pide que defina su bando, más ideas se llevó las manos a la cabeza y dijo “mire, a mí no me haga preguntas que no soy yo el elocuente, la aguilita que traigo en el sombrero usted me la dio, bueno, nomas sabe que me dice Demetrio has esto y esto y se acabó el cuento”.

Luis Cervantes que ha abandonado la partida escribe desde el prado invitando a Venancio a dejar también la revolución, mientras tanto, por pleito de jugadores pancracio y el mantecas se han apuñalado mutuamente y el güero Margarito se suicidó. Venancio, admira la astucia de Cervantes pero sigue en la brigada, cada día entiende menos por qué continúa en la lucha, pero la mayoría ni siquiera se plantea en dejarla porque si uno trae un fusil en las manos y las cartucheras llenas de balas, seguramente es para pelear, contra quién, en favor de quienes, eso nunca le ha importado a nadie, ya en la sierra, por cuatro fugitivos se entrenan de la derrota de Villa en Celaya, y a todos se les contagia la sensación de derrota y fracaso.

Villa derrotado era un dios caído y los dioses caídos ni son dioses ni son nada.

Al volver al pueblo Demetrio ve como la gente ha sido saqueada y abusada, el pueblo ve a los soldados como si todo fuese su culpa, no hay victoria no hay nada, Demetrio llega a su casa y su esposa lo abraza, le pide que se quede pero Demetrio dice que debe seguir, a lo que su mujer le pregunta el porqué, Demetrio no tiene una explicación sólida y solo le dice que no hay vuelta atrás.

Demetrio se situaba donde fue su primera batalla contra los federales donde sale victorioso, ahí, de la misma forma en que derroto a los federales, les tendieron una emboscada los carrancistas donde aniquilan a Demetrio y Anastasio, ambos mueren.

PERSONAJES PRINCIPALES:

Demetrio Macías: Un campesino pobre que es el líder de un grupo de hombres que están peleando contra Victoriano Huerta.

Luis