El carisma.

...

Otra de las características esbozabas para la definición del carisma como una herramienta mas allá de la personalidad, es la presencia, es decir la capacidad de irradiar confianza antes de eludir con la palabra y el pensamiento. Un ser carismático debe ser imponente, pero ante todo ser si mismo, no fingir ser alguien mas, eso acabaría con la imagen de presencia e imponencia que se cree.

Dentro de las habilidades que comprende ser carismático podemos encontrar la pasión por lo que se hace, la confianza que se demuestre en el logro de los objetivos de vida y la coherencia entre la acción y la intención.

En primera instancia, la pasión permite a un carismático, lograr que los otros hagan lo que El quiere que hagan con ahínco, al demostrar pasión por lo que hace y transferir esa pasión a todos los demás. La pasión es una pieza fundamental del entramado que construye el carisma, e incluye entusiasmo y que se demuestra a favor de una causa; la pasión se irradia y cautiva a otros de forma natural sin necesidad de ser forzada.

Por otro lado, la confianza en si mismo y en hacer lo que se hace, es desarrollar una convicción contagiosa que se transmite al conglomerado que queremos eludir. La confianza es esa característica que incrementa la habilidad de ser carismático y de que otros se sientan atraídos por crear en ellos autoconfianza y seguridad en si mismos, y cuanto mas confianza demuestre, mayor carisma irradia, siendo este un estado mental que en muchas ocasiones puede ser destruida al sentirnos incompetentes e inferiores, generando temor de no alcanzar los objetivos, engendrando duda que conlleva a la desconfianza y a irradiar inseguridad.

Por ultimo, la coherencia entre los que se quiere o pretende hacer y lo que se hace, necesaria para infundir confianza y generar carisma, al haber una consistencia entre las acciones y las intenciones, radicando en este aspecto, valores de honestidad y sinceridad genuina, para que los otros tengan la convicción de creer en si mismos y en nuestra posición de elocuencia, es decir, que cuando se practica lo que se predica, la gente empezara a practicar lo que hemos predicado y es aquí donde prevalecen actitudes que son claves para el éxito.

En resumidas cuentas, el carisma, es una habilidad, que transciende de una cualidad, una característica o una condición inherente a la personalidad, es algo que puede ser innato o que se puede aprender y consiste en persuadir para que los otros hagan lo que queremos que hagan, basándose en principios de la condición humana como la confianza, la honestidad, la coherencia y la pasión, que convierte esta habilidad en una de las denominadas claves para el éxito.