La construcción del otro

Pontificia Universidad Javeriana

Mariantonia Quintero

Sofia Almeida

Tema: La construcción del otro.

Pregunta: ¿De qué forma la construcción del “otro” genera una barrera en las relaciones interpersonales?

Justificación

El siguiente trabajo tiene como fin abordar el concepto de la construcción del otro desde una perspectiva amplia y crítica, donde diferentes elementos tanto históricos como contextuales serán abordados para entender cómo este concepto a lo largo de los años ha sido definido. Al referirnos al concepto de la construcción del otro es importante tener en cuenta posturas y perspectivas diferentes, ya que aquel concepto al tener tanta varianza interdisciplinares puede ser entendido y analizado de diferentes formas, por lo cual en el siguiente texto se abordaron posturas y pensamientos desde conocimientos filosóficos, psicológicos, antropológicos y sociales. No obstante debido a que la formulación de aquel concepto varía notablemente entre una disciplina y la otra, los humanos al implementar conocimientos y pensamientos sobre este concepto, elementos como las posturas críticas, racionales y analiticas de cada individuo se ven involucradas.  Por lo cual será importante entender cómo esta construcción en cada ser humano influencia su comportamiento y personalidad, haciendo que cada individuo vea a los demás de forma diferente. Decidimos abordar y conocer más acerca de este concepto para llegar a entender y conocer un poco mejor como la construcción que cada individuo genera sobre el otro, afecta tanto su propio desarrollo como la vida en sociedad, ya que a partir de esta construcción elementos como la creación de los grupos sociales, y la normalización de lo diferente y lo “normal” son abordados.

Al hablar sobre el concepto de la construcción del otro, es evidente encontrar una relación en la formación social que cada individuo tiene y como este se va desarrollando a lo largo de su vida, construyendo puentes y creando lazos para así poder relacionarse y construir su propio camino. Debido a que hoy en dia este tema aún al estar poco indagado y analizado, este a tenido un gran impactado en la sociedad donde elementos y factores tanto positivos como negativos han moldeado y cambiado el rumbo de cómo se observa y se relaciona con el otro; con aquel diferente a lo propio y lo ajeno, donde la creación de estereotipos y de los diferentes grupos sociales son abordados.  

En la siguiente indagación donde se desarrollara el concepto sobre la construcción del otro desde una postura tanto crítica como explicativa, diferentes posturas serán expuestas para poder llegar a generar un conocimiento global sobre este concepto y la forma en la cual a lo largo de los años este ha sido moldeada hasta el dia de hoy, generando pues un cambio en la sociedad.

Inicialmente para poder entender este concepto desde su esencia, es importante hacer referencia y dirigirnos hacia los valores morales; es decir aquellos conceptos básicos que como sociedad tenemos para una convivencia sana. En gran cantidad, estos valores son universales en el sentido de que todos los poseen y como su nombre lo indica son compartidos y aplicados por los seres humanos, ya que estos son generados para una sana convivencia. Alguno de estos valores son: el respeto, la honestidad, la justicia, la solidaridad, etc. Centrándonos en materia con cada uno de ellos, por ejemplo el respeto, es de gran importancia ya que si uno tiene respeto con el otro se genera un ambiente ameno en el sentido de que se genera más confianza en las personas por el simple hecho de que estamos viviendo en un espacio de respeto, donde la sociedad se puede ver totalmente afectada por esta. Desde una perspectiva positiva, el respeto genera en los individuos un ambiente de tranquilidad y paz, donde se puede construir sanamente una relación con el otro donde los límites y las barreras aún al estar presente, permiten en los individuos una libre expresión de aquellos gusto y disgustos que se pueden generar. Así pues, al lograr tener estos valores universales verdaderamente implementados en la sociedad, llegan a poner en cuestión aspectos diferentes como la postura del “yo”, del “otro” y del “nosotros”. (CITA)

Desde la perspectiva de la filosofía hegeliana, el concepto de “otro” es presentado como un aspecto completamente opuesto a la identidad y a lo personal. Esto se debe, al planteamiento que hace Hegel que radica en que el ser humano mira al “otro” como algo diferente y externo, a causa del autoconocimiento de uno mismo, es decir, que el sujeto se debe de conocer, para así poder saber quién es el otro y así mismo poder generar algún tipo de vínculo, conexión  o indiferencia (un claro ejemplo es la dialéctica del amo y el esclavo). Un individuo que no se conozca a sí mismo, no podrá diferenciarse de los demás, debido a que no tendrá autoconocimiento y esta es la clave de la diferenciación entre dos individuos. Adicionalmente, Hegel expone dando argumentos válidos y concisos el por que las similitudes entre diversos individuos generan un vinculo con mayor rapidez y seguridad, mientras que las diferencias entre ellos, los aleja de este vínculo mediante fuerzas de repulsión generando el efecto contrario.

La filosofía nos habla del sujeto en singularidad y del colectivo, y a su vez, profundiza en el sujeto colectivo refiriéndose a este como aquel conocido como “nosotros”. La necesidad de este sujeto radica en el instinto de cooperación incentivado al ser humano desde temprana edad, el cual nos lleva a preocuparnos por el otro sin priorizar el “yo”, o el egoísmo. Sin embargo, la sociedad, las circunstancias y el paso de los años, nos llevan a olvidar este último sujeto por darle prioridad a las necesidades propias, en lugar de las necesidades de los demás. Los expuesto anteriormente trae sus ventajas y sus desventajas,  pues en diversas ocasiones aunque se vea la pérdida de la singularidad del sujeto y esto se caracterice como algo malo, también permite la sana convivencia entre los diferentes sujetos que se rodean, por ende, también es necesario reforzarlo y se puede considerar un aspecto bueno. En aquel momento es cuando los límites morales y sociales empiezan a jugar y tomar forma creando el concepto del “otro” y posteriormente del “nosotros”, las posturas egocéntricas se empezaron a dejar a un lado para que posturas autónomas tomen más poder, estas posturas, se refieran a aquellas que piensan tanto en el “otro” como en el “yo” creando un equilibrio entre ambas. Finalmente, así se hace  posible la convivencia con los demás llegando a un balance que beneficia a la sociedad en colectivo.