El sillón

...

Había llegado el día, el día en que la maquina estaría lista para encenderse y en el que Guillermo Marconi cumpliría su sueño.

—Regresión del cosmos prueba uno. —dijo Marconi mientras colocaba su mano en una gran palanca que tenía a su lado. En el momento jalo de la palanca hacia abajo activando la máquina, resultado que una enorme luz purpura se provenía de grandes antenas de la maquina lo cual su reacción fue un pulso que empujo a Marconi hacia la pared que se encontraba a 4 metros de la máquina, y esta salvaba fragmentos de un material nunca antes vistos, como rocas con puntos brillantes, estas se esparcieron por muchos lugares en a una gran distancia lo suficiente como para que millones de personas encontraran este material. La máquina exploto en miles de fragmentos de madera, metal y cuarzos. La invención de Marconi fue destruida. Marconi no podía creerlo, todo su trabajo y esfuerzo de años fue destruido en segundos después de ser terminado. En ese instante el científico se pone a llorar, pero al tomar uno de los muchos fragmentos que expulso la máquina lo observo por unos segundos con los ojos hinchados por su melancolía y entonces.

—Eso es, eso es, esto es una estrella. Yo Guillermo Marconi he traído estrellas a la tierra. —exclamo celebrando por su hallazgo, concluyo que el gran parecido de las rocas grises y con puntos brillantes eran estrellas, tomo varias y las coloco en un cajón para llevárselas lo más pronto posible a su querida madre. Para eso tenía que dormir temprano para partir lo más pronto con las suficientes energías. Una vez en la cama Guillermo con el sueño consolidado fue despertado por un ruido, un ruido muy extraño que provenía de la lejanía de su alcoba. Era un ruido burbujeante, que no podía soportar oír, así que encendió la vela que estaba alado de su cama para poder observar lo que sucedía. Guillermo detecto de donde provenía el ruido, de la esquina superior izquierda de su alcoba, inmediatamente con su vela a la mano la acerco para iluminar lo que estaba pasando. Él hombre no podía creerlo, sus ojos no lo engañaban, lo que estaba sucediendo en frente de sus narices era real, era verídico, una criatura está emergiendo de la esquina de su alcoba, como si traspasara de la pared. Era una forma burbujeante de color negro, olía a cadáver descompuesto, aunque no tenía rosto ni mucho menos ojos esa criatura se había percatado de la presencia de Guillermo.

—¿¡¿¡Que demonios es eso!?!? —Fue lo último que dijo el hombre dijo antes de que su cara fuera atrapada por esa criatura burbujeante, la criatura comenzó a meterse en los orificios del científico como si fuera un tipo de líquido espeso, la nariz, la boca, los oídos he incluso las pequeñas aberturas sus ojos fueron inundados de la criatura. La vela que tenía Marconi en la mano cayo junto con su pálido y ahora frio cuerpo. Guillermo Marconi estaba muerto.

Dos años después Guillermo Marconi patento la radio, un artefacto que recibía señales de ondas electromagnéticas convirtiendo esas mismas en ondas de sonido, su invento funciona gracias al material que alguna vez se esparció por toda la tierra. Marconi se hizo famoso por su gran invento y esto atrajo a personas llenas de envida. Una noche mientras Marconi se encontraba en su estudio, un hombre de sombrero y capa oscura entro a la fuerza por la ventana, armado con una daga apuñalo a Marconi en el corazón, este al no sentirse satisfecho lo apuñalo con todas sus fuerzas en el cráneo del científico italiano. Una masa gelatinosa de color negra y olor putrefacto emergía de los orificios del hombre que alguna vez fue Marconi. El hombre de sombrero y capa sorprendido se alejó lo más que puedo del cuerpo, la masa gelatinosa seguía emergiendo hasta tomar forma de una criatura burbujeante, El hombre no puede creer lo que estaba viendo con sus ojos. De repente la criatura muy veloz de adhiere a la pared dirigiéndose a la esquina superior del estudio, una vez ahí la criatura se desvaneció desmaterializándose en la esquina. El hombre del sombrero y capa no estaba congelado sin saber que es lo que había pasado delante de él. Rápidamente él fue al escritorio del científico y miro muchos planos en un idioma que el desconocía, al observar plano tras plano su mente lo comprendía cada vez más. La radio no era un artefacto de comunicación, es una máquina de control mental que podía ser usada para que las ondas electromagnéticas que afectara a las personas a su alrededor se sincronizaran con una sola mente dominante. El hombre del sombrero no puedo soportar esa idea, el mundo dominado por una sola mente dominante, él sabía que sea lo que sea esa criatura iba a volver, a completar su plan, no lo soporto más, desclavo la daga que estaba en el cuerpo de Marconi y se suicidó cortándose la yugular dando fin a su vida en pocos segundos dejando una gran cantidad de sangre.

Hoy en día la radio un método de comunicación que fue perfeccionado por los humanos, es usado para dar noticas, comunicarse entre personas, para rescates náuticos etc.

Pero algún día esa criatura de aspecto burbujeante volverá, volverá para retomar sus planes y reclamar lo que le pertenece… nuestro mundo.