LA CIBERCONDRIA
Enviado por Rimma • 26 de Diciembre de 2018 • 2.594 Palabras (11 Páginas) • 276 Visitas
...
Los resultados obtenidos en la red la llevaron a relacionar este malestar con la posibilidad de presentar un embarazo ectópico, es decir, fuera de lugar. Alarmada, las búsquedas siguientes se orientaron directamente hacia el embarazo ectópico, sus características y problemáticas, con lo cual la preocupación y su angustia crecieron desmesuradamente. En ese estado llego a la consulta obstétrica donde el medico disipo su angustia dialogando con ella sobre lo común que resultan estas molestias y los dolores de espalda en los embarazos bien implantados.
Así pues vemos como se extiende la cibercondria, cada vez más hipocondriacos usan Internet para fantasear con enfermedades, imaginación apocalíptica, consultas compulsivas a sitios de salud y diagnósticos de teclado.
¿Qué implica la cibercondría
Los afectados por la cibercondría suelen autodiagnosticarse, a causa de la fe ciega en Internet, y suelen recurrir también a la automedicación basándose en aquello que han leído en sus pantallas. Este hecho puede tener graves consecuencias y efectos adversos, ya que todo diagnóstico debe ser hecho por un médico, así como la supervisión de cualquier tratamiento.
La credibilidad de las fuentes y las competencias de los usuarios
El hecho de tener una computadora en red no garantiza que el usuario posea las competencias necesarias para saber manejar la búsqueda y, una vez realizada la misma, para poder discernir entre aquellos sitios que le brindan información de valor y los que no lo hacen.
Desde el punto de vista de los médicos profesionales se ha señalado que la información que los pacientes obtienen desde la red muchas veces genera confusión, resulta superficial y obliga al médico a dedicar un tiempo extra en la consulta para demostrar malos entendidos.
Problemas del autodiagnóstico
El autodiagnóstico es uno de los errores más cometidos en la sociedad que pueden desencadenar problemas realmente graves para los enfermos.
- Las enfermedades no se manifiestan de igual forma en todas las personas. Cada cuerpo posee sus propias características y, por ello, debe consultarse con un profesional de la salud.
- Los síntomas padecidos pueden dar lugar a confusiones debido al desconocimiento.
- Ante la urgencia y la incertidumbre por tener un diagnóstico rápido, internet nos priva de dar a cada problema su debida importancia.
- Las respuestas arrojadas por los blogs o foros pueden desencadenar en crisis de ansiedad.
- El autodiagnóstico es una acción peligrosa que suele derivar en errores que dan paso a la automedicación. Esto puede desencadenar complicaciones en otras afecciones desconocidas.
- La despreocupación por diagnósticos que no revisten de gravedad pueden llevar al usuario a un estado de relajación y conducirle en su decisión de no visitar su centro médico.
¿Cómo se puede prevenir
Aunque Internet sea una buena fuente de información muy útil para otras cuestiones y existan páginas webs con información fiable acerca de salud, es muy importante no usarlo como la solución a todo. Es necesario tomar consciencia de que la salud es algo con lo que no se juega y son los especialistas médicos quienes deben examinarnos y diagnosticar las enfermedades.
De esta forma, debe educarse a los más pequeños al respecto y concienciar a todos los de nuestro alrededor acerca del tema, no creer plenamente todo lo que leemos en la red y acudir a nuestro médico.
No está terminantemente prohibido consultar estas fuentes online ante cualquier duda. Sin embargo, sí debe saberse dónde y cómo buscar. Los internautas deben consultar siempre aquellas páginas que sean fiables y verificadas por profesionales de la salud.
Los profesionales recomiendan que, si se va a usar Internet para consultar enfermedades, se haga con responsabilidad. Hay que tener muy claro que los síntomas no se pueden interpretar igual en todas las personas ya que, los que significan una cosa en un paciente, pueden significar otra bien diferente aplicadas a otro enfermo.
Esta cuestión vinculada a las competencias lectoras de los usuarios de la red, implica un desafío educativo para todos los actores involucrados en el empleo de nuevas tecnologías. Particularmente y en relación al uso de la red desde el sector sanitario, parece ser insoslayable el compromiso del médico como educador de sus pacientes, lo que exigirá de los mismos un rol activo en la ampliación de están competencias que permitan al usuario transformarse en usuarios críticos.
Un estudio reciente sobre la cibercondría, elaborado por médicos del Hospital San Francisco de Asís en Grecia establecióque: “Consultar en Internet no es tan recomendable si no se tiene una guía, ya que usted no es médico para interpretar muchas de las cosas que salen ahí. Estamos totalmente de acuerdo en que la gente esté enterada, tiene que saber qué patologías podemos padecer, para cuando se tenga que ir al médico tener la idea y manifestarlo”.
La cibercondría es objeto de todo tipo de investigaciones por parte de expertos en cibernética y de especialistas sanitarios en distintos países. Un estudio de la Escuela Médica de Harvard de los Estados Unidos, indica que “La enfermedad suele convertirse en una parte central de la identidad de un hipocondríaco. A lo que los hipocondríacos se les dificulta aceptar es que las personas normales y sanas también tienen síntomas”.
Las cifras hablan y, en este caso, aunque las chicas buscan muchos contenidos sobre salud y dietas, son los hombres los que ganan.
La pereza de ellos por acudir al médico desemboca en la búsqueda de la enfermedad en la Web y su posterior automedicación.
Como fuente de información Internet está muy bien pero siempre debes confirmar tus diagnósticos con un profesional. No te obsesiones con buscar cada una de tus mínimas dolencias ya que al final acabarás padeciendo enfermedades que ni si quiera sabías que existían, ¡seguramente sea un simple golpe! No seas hipocondriaco, es decir, cibercondriaco.
Estamos pues ante un doble cambio en la relación médico-enfermo. De un lado, los médicos se ven obligados a discutir con sus pacientes el diagnóstico y tratamiento de la enfermedad, y de otro, los médicos necesitan acudir a los foros virtuales, seminarios, etc., para mantenerse actualizados
...