“Buenas nuevas de Salvación”.

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- Podemos y debemos enseñar a otros a orar. Jesús enseño a sus discípulos a orar. Les dio su primera enseñanza pública en el Sermón del Monte. Allí les expuso el reino de Dios, sus leyes y su vida. En este reino, Dios no solo es Rey, sino también es Padre.

- Debemos orar en Secreto, la primera cosa que el señor enseña a sus discípulos es que tienen un lugar secreto para la oración; cada uno tiene que tener un lugar solitario donde pueda estar a sola con su Dios. La completa separación de todo lo que nos rodea nos ayudara a que nuestro espíritu llegue a ponerse en contacto con el Invisible.

En Mateo 6:6 Dice:

6 Pero tú, cuando ores, entra en tu habitación, cierra la puerta y ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en secreto te recompensará[a].

- Debemos orar en humildad, de Rodilla.

Lucas 18:9-14 La parábola del fariseo y el cobrador de impuestos

9 Jesús contó esta otra parábola para algunos que, seguros de sí mismos por considerarse justos, despreciaban a los demás: 10 «Dos hombres fueron al templo a orar: el uno era fariseo, y el otro era uno de esos que cobran impuestos para Roma. 11 El fariseo, de pie, oraba así: “Oh Dios, te doy gracias porque no soy como los demás, que son ladrones, malvados y adúlteros, ni como ese cobrador de impuestos.12 Yo ayuno dos veces a la semana y te doy la décima parte de todo lo que gano.” 13 Pero el cobrador de impuestos se quedó a cierta distancia, y ni siquiera se atrevía a levantar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho y decía: “¡Oh Dios, ten compasión de mí, que soy pecador!” 14 Les digo que este cobrador de impuestos volvió a su casa ya justo, pero el fariseo no. Porque el que a sí mismo se engrandece, será humillado; y el que se humilla, será engrandecido.»

- La oración debe ser en el poder del Espiritu Santo.

Romanos 8:26 DICE:

26 De igual manera, el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad. Porque no sabemos orar como es debido, pero el Espíritu mismo ruega a Dios por nosotros, con gemidos que no pueden expresarse con palabras.

- Debemos Perdonar. En Marcos 11:25 el mismo Jesús enseño: “ Y cuando estuviereis orando, perdonad, si tenéis algo contra alguno, para que vuestro Padre que estas en los cielos os perdone a vosotros vuestras ofensas”.

- La oración debe ser con Fe, no dudando nada.

Marcos 11:24 Dice:

24 Por eso les digo que todo lo que ustedes pidan en oración, crean que ya lo han conseguido, y lo recibirán.

- Debo apropiarme de la verdad que “Dios es mío”. Él es mi Padre.

2 Corintios 6:18 DICE:

18 y seré un Padre para ustedes, y ustedes serán mis hijos y mis hijas,

dice el Señor todopoderoso.»

- Debo tener claro que él es omnipresente (esta en todo lugar). Siempre lo puedo encontrar y siempre está dispuesto para mí.

Isaías 66:1

El Señor dice:

«El cielo es mi trono y la tierra es el estrado de mis pies. ¿Dónde podrán construirme una casa? ¿Dónde podrán hacerme un lugar de descanso?

- Nuestra oración debe ser dirigida al padre en el nombre de Jesús. El Hijo siempre se dirigía a su Padre. Lucas 22:42, 46; Juan 5:43

Juan 5:43 Dice:

43 Yo he venido en nombre de mi Padre, y no me reciben. Si otro viniera en su propio nombre, a aquel recibirían.

Lucas 22:42-46 DICE:

42 diciendo:

—Padre, si quieres, aparta de mí esta copa; pero no se haga mi voluntad sino la tuya.

43 [Entonces le apareció un ángel del cielo para fortalecerle.44 Y angustiado, oraba con mayor intensidad, de modo que su sudor era como grandes gotas de sangre que caían hasta la tierra][a].

45 Cuando se levantó de orar y volvió a sus discípulos, los halló dormidos por causa de la tristeza. 46 Y les dijo:

—¿Por qué duermen? Levántense y oren para que no entren en tentación.

- La oración debe ser diaria, por eso debemos tener una disciplina de oración y darle siempre el primer lugar a Dios cada día.

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