ETNOGRAFIA DE LOS LUGARES

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El espacio arquitectónico, posee su propio lenguaje, pues articula función y significado, no solo el objeto como tal si no lo que representa dentro de una comunidad, por ejemplo las iglesias que representan majestuosidad arquitectónica y sobre todo simbólica. Mediante imágenes, colores cuidado o deterioro, los lugares también comunican otro tipo de lenguaje arquitectónico.

Del lenguaje de los lugares inconscientemente se aprende constantemente, pero depende de los lugareños estar atentos a la interpretación que obedece a los sentidos para poder identificar el lenguaje ya sea verbal, corporal, de objetos o arquitectónico y de esta manera sacar provecho.

Para finalizar, la constitución del lugar es el resultado de las practicas permanentes y cotidianas, que constituyen también un lenguaje, sin embargo requieren ser abordadas desde los rituales y rutinas de la cotidianidad que enfrentan los lugares y sus habitantes.

Las prácticas rutinarias al llevarse a cabo facilitan la vida social, destacando y exaltando aquello que la como comunidad ve un valor simbólico dentro del lugar.

Los rituales pueden ser rutinarios, es decir, dentro de los lugares siempre existirán algunas actividades o eventos que se repiten de manera cotidiana o eventualmente, sin generar algún tipo de alteración, aun así estos aspectos son los que se complementan en la constitución del lugar, debido a que son los rituales los que reafirman la identidad de un lugar o una comunidad, a través de fechas conmemorativas, acontecimientos históricos o culturales de un grupo social determinado.

Existen algunas diferencias entre estos dos tipos de prácticas, aunque esto no quiere decir que la una no tenga que ver con la otra, puesto que la organización social de una eucaristía (rito religioso) requiere de rutinas para ser realizada, o bien, para que algunas actividades se lleven a cabo constantemente para que con el tiempo sean consideradas rituales.

Las prácticas sociales demuestran que en cada lugar se evidencian diferentes maneras de construcción de comunidad, con características, tradiciones, historia, lenguajes y dinámicas diferentes, es por esto que con un estudio etnográfico se busca además de investigar y analizar no solo las características de un lugar sino también el comportamiento de sus miembros dentro una sociedad.

La finalidad de un estudio etnográfico es aportar modelos para comprender las dinámicas de la comunidad y explorar diferentes perspectivas y estrategias, esto con el fin de conocer y construir un trabajo de campo que contiene como objeto de estudio a una comunidad específica, no obstante para desarrollar un estudio etnográfico no es suficiente conformarse con la descripción del lugar o de la comunidad, sino que se debe aportar otros modelos y alternativas tanto teóricas como prácticas para que las intervenciones en los lugares sean acertadas.