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Hylemorfismo aristotelico

Enviado por   •  12 de Abril de 2018  •  1.981 Palabras (8 Páginas)  •  295 Visitas

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Pero Aristóteles comprende que no se puede negar la mutabilidad de los seres, y que hay que hacerla compatible con la entidad en el cambio; y esto es posible porque las cosas constan de acto y potencia. Hay potencia porque se da un sujeto (materia) capaz de múltiples mutaciones, permaneciendo siempre el mismo; hay acto, porque la capacidad de determinación está realizada por algo distinto (forma) de la potencia, por lo actualizante de la potencia. Así quedan superadas las aporías anteriores, pues se le da su realidad correspondiente a la pluralidad y a la unidad. Aplicando estos principios a la realidad física, Aristóteles llega a explicar cómo los cuerpos constan de materia prima y forma sustancial. La materia prima es una sustancia incompleta que, como parte determinable, constituye el compuesto sustancial material. No es un principio que sea ente completo, sino parte constitutiva de la sustancia; no es una sustancia completa, porque de suyo es siempre parte de una sustancia, determinable, indiferente a cualquier forma, ya que no da la determinación y la especificación del cuerpo; no es cuerpo, sino constitutivo del cuerpo, como su parte potencial y determinable. La forma sustancial es, entonces, la realidad que determina la indiferencia y potencialidad de la materia, actuando intrínsecamente sobre ella; es lo que actualiza o realiza la posibilidad de la materia en el orden sustancial; por tanto, es una sustancia simple e incompleta que, como acto de la materia, constituye con ella a la sustancia completa. La materia segunda es un cuerpo que está ya constituido en su propia especie y que está todavía en potencia de recibir otras determinaciones accidentales.

El hombre se comunica a sí mismo como espíritu en cuanto se expresa en la acción exterior y perceptible, para volver hacia sí mismo a través de esta autoalienación (y sólo a través de ella). La materialidad, en cuanto “el estar fuera de sí” del hombre, y el espíritu o la “forma”, en cuanto su estar en sí, constituyen una unidad polar; un polo no puede reducirse al otro, es decir, ambos polos son igualmente originarios, pues siempre nos encontramos a nosotros mismos como cuerpo-espíritu. A pesar del carácter igualmente originario se puede establecer una prioridad de rango: el espíritu en cuanto determinante sella la materialidad en cuanto determinable; la sensibilidad en cuanto autocomunicación del espíritu está penetrada de alguna manera por la forma de la conciencia. Sin embargo no se puede pasar por alto que precisamente el carácter receptivo de la sensibilidad exige una mediación del espíritu humano a través de la materialidad, que así, en cuanto principio constitutivo del hombre, hace que la conciencia sea precisamente humana, finita, es decir, no puramente espontánea y creadora, como puro estar en sí, sino espontaneidad receptiva, como un estar en sí mediante lo otro.

Si aplicamos a las demás cosas estas reflexiones que resultan de la experiencia inmediata de la acción humana, encontramos cierto paralelismo en el ámbito de los seres vivos. De todos modos, el principio determinante, la forma, disminuye según vamos descendiendo, hasta que en las cosas anorgánicas se pierde totalmente en lo otro; allí el estar en sí se limita a la diferencia de lo otro, diferencia que ya no se interioriza en una mismidad. Como objetos de la acción humana, también las cosas distintas del hombre tienen que tener una estructura hilemórfica.

Conclusión

Como resultado de la investigación presentada, puedo opinar que el ser humano debe ser constituido por dos partes las que son “materia (cuerpo) y forma (alma)” ya que sin las cuales una de la otra no podría preexistir por la simple razón que el alma no puede ser inmortal ya que si no tiene un cuerpo donde habitar no hay como funcione y esta de la misma manera no se encuentra centralizada en una sola área de nuestro cuerpo, mas bien, esta en todo lo que somos por que esa es su razón de ser. Si lo presentamos en un ejemplo mas grafico, el alma seria el motor y el cuerpo la maquina y nuestro “pensamiento puro” seria el chip con que desarrollamos nuestras habilidades para las cuales fuimos creados.

si lo miramos desde la perspectiva de Aristóteles todo tiene una causa y efecto que se ve reflejado en nuestra naturaleza y es por eso que podemos reaccionar a todo lo que pasa a nuestro alrededor, aquí involucramos en todo al conocimiento ya que sin el no podríamos tener una reflexión de la realidad y de lo que podemos percibir.

Para finalizar puedo concluir que todo ser humano tiene el derecho de ser y comunicarse de la forma en que quiera, pero que dejando de lado ese cierto paralelismo, todos estamos constituidos de la misma manera y que todo ser humano, animal o cosa para poder existir y tener una razón de ser necesita de materia (cuerpo) y forma (alma), y que será lo que siempre nos mantendrá como uno solo durante la existencia.

Bibliografía

http://guindo.pntic.mec.es/ssag0007/filosofica/aristoteles-duererias.pdf

https://es.wikipedia.org/wiki/Hilemorfismo

http://www.leynatural.es/2012/11/05/origen-y-sentido-del-hilemorfismo/

https://honorina.wordpress.com/2010/09/26/tema-4-aristoteles/

http://www.buenastareas.com/ensayos/Hilemorfismo-De-Aristoteles/7471505.html

http://www.mercaba.org/Mundi/3/hilemorfismo.htm

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