La ideología de Heráclito

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Heráclito escribió un libro con el título “Sobre la naturaleza”, la cual estaba dividido en tres secciones: el universo, la política y la teología. En las cuales todos tenían en común el punto de vista que otorgaba Heráclito al conocimiento humano.

Cabe mencionar que existe un contraste entre Heráclito y el filósofo Parménides de Elea, debido a que la doctrina del primero suele ser llamada “del todo fluye” mientras que en el caso de Parménides su doctrina es presentada como una esfera inmóvil y estática.

Hacia el final de su vida, el filósofo Heráclito se retiró de la ciudad yéndose a un lugar más apartado y con mayor naturaleza en donde su alimentación se basó en todo tipo de hierbas lo que conllevó a que desarrollara hidropesía. Esta enfermedad consiste en la acumulación anormal de un líquido en algún tejido del organismo; por lo que tuvo que volver a la ciudad. Consultó a los médicos de una forma enigmática sí podrían hacer de una lluvia una sequía, pero desafortunadamente estos no lo comprendieron. Dicho esto, Heráclito se enterró así mismo en un estercolero, esperando que el calor del estiércol absorbiera la humedad, esto le causó la muerte hacia el año 484 a.C.

Más allá de los posibles descubrimientos de Heráclito, su doctrina cumplió un importante rol dentro del período cosmológico de la filosofía que surgió entre el Siglo Vll-lV A.C. Este filósofo elaboró importantes teorías cosmológicas en donde como tema principal es el universo. En este período se estudió la naturaleza como tal en donde se dieron cuenta que existía un orden innato y natural, en este momento surgió el concepto del Cosmos, tomando un significado como un orden universal; en el caso de lo contrario de un universo en orden, se le atribuye el concepto de Caos, donde lo irracional, la desorganización predomina constantemente. Si nos encontramos en la situación de que el universo es un cosmos, el ser humano tiene la posibilidad de ir mucho más allá del conocimiento actual y seguir descubriendo las leyes en las que se rige el universo. Heráclito, con su filosofía intentó descubrir el origen del cosmos bajo sus pensamientos enigmáticos mencionados ya anteriormente.

2. TEORÍAS DE HERÁCLITO:

- TEORÍA DEL DEVENIR

Directamente relacionado con la mutación o cambio; por esto, se entiende por devenir, el hecho de que, en la realidad, nada es estático, sino un flujo o una corriente dinámica.

Heráclito en su filosofía mantiene que todo se mueve y nada permanece, comparando las cosas del universo con la corriente de un río donde afirmaba que “una persona no podía bañarse dos veces en el mismo río”, es decir, que éste fluye o corre (Panta – Rei).

Heráclito de Éfeso capta la realidad en su devenir dialéctico y lo traduce en sus sentencias contradictorias, no de negación sino de enriquecimiento, profundización y ampliación. La razón dialéctica descubre la estructura legal natural que rige a cada uno de los entes, éstos se gobiernan por sí mismo y cumplen su propia finalidad, su devenir.

Según Heráclito toda la realidad está en perpetuo devenir. El proceso del cosmos como de la existencia humana es lineal, como las aguas del río siempre van adelante y es imposible el retorno. Todo cambia permanentemente, nada permanece y si hay algo permanente es el cambio.

Heráclito afirma que el SER de las cosas es mudable y que ninguna cosa la podemos sorprender en su ser porque ya pasa de ser una cosa a otra, incluso aquello que aparece como estático a la percepción sensorial, está en verdad en situación dinámica y en continuo cambio.

El arjé de las cosas no sería entonces un elemento (agua, aire, etc.) sino el devenir (el fluir); esto es el carácter cambiante de las cosas.

No nos podemos bañar dos veces en el mismo río porque la segunda vez el río ya es otro, las aguas han cambiado y nosotros también. La esencia del mundo de la realidad es su cambiabilidad. El ser de la realidad es un ser "siendo".

Un claro ejemplo sería el tiempo, en este caso solo existe el presente, es decir, algo es ahora, donde lo pasado ya no importa, y lo futuro no existe; solo que desde el presente de cierta forma se presiente el futuro.

- TEORÍA DEL FUEGO COMO PRINCIPIO CÓSMICO.

"Todas las cosas provienen del fuego, y en él se resuelve. Todas las cosas se hacen según el HADO (voluntad de los dioses) y por la conversión de los contrarios se ordenan y adaptan los entes, todo está lleno de entes y demonios, que todo el fuego (PIRO) es elemento y que todas sus vicisitudes o mutaciones se hacen por raridad (Calentamiento)”, es lo que afirma Heráclito.

"Que el fuego adensado se transforma en licor, y adquiriendo más consistencia pura en agua. Que el agua condensada se vuelve tierra y este es el camino hacia abajo. De aquí nace de nuevo la tierra y de ella se hace el agua, de la cual proviene todas las demás cosas", es decir, el fuego lo es todo.

Este concepto de fuego corresponde al fundamento o el principal impulsor del mundo, que genera tanto las cosas como el determinado cambio de éstas. También se le puede conocer como fuerza directora, como una causa originaria de la formación del mundo. No obstante esta teoría no es clara en el pensamiento de Heráclito, por lo tanto se le ha interpretado de dos maneras, las que corresponden:

A) El fuego cósmico (principio que da origen al cosmos).

Según esto el fuego es vida y es muerte, principio de tensión entre los contrarios, es lo que hace ser y no ser, y de donde nace y hacia todo vuelve.

B) El fuego como símbolo del logos.

Para la mentalidad griega el fuego era en general dos cosas:

1) Technè (Técnica): Era la destreza, habilidad o dominio de la naturaleza, como por ejemplo: el ahuyentar a las fieras, la cocción, la conquista de la cerámica, la metalurgia y la formación de la aldea (Polis).

2) El Logos (Razón): La luz del fuego, su luz, calor y su alumbrar sobre el consumo de su combustible simbolizaba la razón. Para el mundo exterior el fuego era técnico, en tanto que para el alma (psiquis) el fuego correspondía a la razón, la luz de la voluntad y las determinaciones. En lugar de la palabra Dios emplea a menudo la palabra griega logos, que significa razón.

Según esto el fuego del cosmos sería una inteligencia superior que todo lo dirige. Este fuego