CAUSAS DE LA REVOLUCION MEXICANA El porfiriato

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Dentro de las más memorables se encuentran la de cananea donde un grupo de trabajadores exigían mejor condiciones para seguir laborando, los dueños americanos inconformes arremeten contra ellos, disolviendo la huelga donde resultaron muertos los dueños y un número indeterminado de obrero. Otra huelga fue la de rio blanco en Veracruz, donde se colocaron en las vías ferroviarias, esta fue diferente ya que se encontraban mujeres y niños, por instrucciones del presidente un grupo militar abrió fuego en contra de la multitud dejando un saldo negativo de 250 personas muertas, no obstantes aquellos que lograron huir fueron cazados y decapitados por alterar el orden público.

Limantour siendo el más joven del gabinete supo ganarse el favor de Díaz con sus amplios conocimientos, siendo el jefe de gabinete, creó el partido científico que proporcionaría grandes beneficios al país pero Díaz dio un voto negativo y el partido se deshizo provocando que sus integrantes salieron del telón político y entraran al mundo de los negocios que es donde acrecentarían su capital. [2]

Nada ha producido a la Revolución tanta simpatía como el derroche de tierras en México y como no se las otorgan al pueblo si no que la reparten a un puño de hombres, los ricos eran lo que gozaban, los que tenían las granjas, dueños de enormes haciendas, los personajes con puestos públicos, militares e incluso la iglesia, en sus manos se amontonaba el poder nacional, esto agregándole aquellos extranjeros que tenían una gran riqueza a costa de explotar a los mexicanos, el general Porfirio mantenía un estatus mejor a estos últimos con el afán de reforzar los lazos internacionales.[3]

La clase media se conformaba de profesionista, empleados, pequeños comerciantes y que conformaba una buena parte de la población, y que sin embargo su capital aun no les daba para mucho. La parte de los pobres que en términos era la más acechada por la situación, que vivía en situaciones pésimas y que al año a lo más que podían aspirar era a $132.20.

La población total en ese tiempo rondaba los 15, 000,000 de habitantes, de los cuales 10, 000, 000 pertenecían al estatus más bajo, se podría decir en pocas palabras que México era un país de pobres. [4]

Otro aspecto en la revolución es sobre la conspiración que pudo haber entre los dos sobrino de Díaz, el señor Félix y don Muñoz, que a pesar de que no existe evidencia tangible queda la incógnita, en contraparte a esta oposición estos dos personajes se mantuvieron fieles a su tío e incluso el joven Félix fue considerado enemigo de Madero llegando a levantarse en armas. [5]

A continuación les mostrare una tabla sobre aquellas personas que resultaron beneficiadas con el derroche de baldíos en la zona de chihuahua. [6]

Tierras deslindadas (Hectáre)

Antonio Asúnsulo, millonario chihuahuense

1,094,561

José María Becerra

14,706

Hermanos Gómez del Campo, Patricio e Ignacio

5,393,396

Hermanos José y Jesús Valenzuela

6,954,666

Emeterio de la Garza

4,922,729

Lic. Pablo Macedo

3,620,522

Policarpo Valenzuela

748,331

General Brigadier, Francisco Olivares

341,915

B. Flores

1,496,455

Antonio Espinosa

211,746

Manuel Peniche

2,188,974

Plutarco Ornelas

155,707

Manuel Bulnes

776,911

Rafael García

787,581

Ignacio Sandoval

1,860,436

Los datos que ahí se obtienen eran monopolizados por unos cuantos para ser rentados a extranjeros, dejando pocas oportunidades para los campesinos en explotar la tierra y esto sin contar la enajenación que existían en esas grandes haciendas por parte de los trabajadores que perpetuaban sus labores. [7]

Las haciendas y los grandes ranchos se extendían ampliamente repartidos en tan solo 834 hacendados, los pequeños agricultores se aproximaba en una cantidad de 410 566 y los vasallos superaban los 3, 000, 000, esto da una clara imagen del absolutismo que existía en la época, donde existía un control de la población en tan solo 834 individuos. Aparte de la explotación laboral que se ejercía y la mala paga que se les daba, se les adhería unos de los males poblaciones, el hambre, y esto no era mucho de pensarse tomando en cuenta que los que controlaban los alimentos básicos eran esos mismos hacendados.[8]

Para optimizar los datos tenemos que “los grandes terratenientes dueños del 44% del país, solo cultivaban el 11/2% del territorio y del cultivo total que se efectúa en México, ellos representan menos del 40%”[9] la escasez de la comida era inminente por el poco desarrollo en la agricultura.

Limantour al ocupar el puesto de secretario de hacienda impulso a lo que sería la economía a tal grado de considerar buena las finanzas, esto sin embargo tenía un tono amargo, por que el florecimiento económico de México era cierto. Como secretario se consolidó la propiedad de los ferrocarriles por el gobierno, se establecía una red de bancos que se conectaban en toda la republica, las construcciones fueron a la alza y todo el desarrollo se vio materializado.

Actualmente se podría pensar que la dictadura de Díaz a lo largo de 30 años fue gracias a su esplendorosa inteligencia, pero al igual hay una cosa que esclarecer y es que Limantour fungía como sostén para que Díaz desde un principio se dedicara solo a proteger a los terratenientes, aliarse con los ricos, a pesar de que estos hacendados tenían la productividad[10], nunca quisieron aspirar

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