Ecoturismo de la comunidad indígena de nuevo san juan parangaricutiro

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Ecosistema: Este proyecto está localizado en una región volcánica, cercana a los volcanes Paricutín y Zapichi.

Atractivos turísticos: Entre los principales está el volcán Paricutín con su cráter y caldera volcánica, donde están gravadas pinturas rupestres de cazadores, danzantes y líderes espirituales o guerreros. Tradicionalmente este sitio era utilizado para rituales relacionados con el fuego. Visite las ruinas de la antigua iglesia de San Juan de Las Colchas Parangaricutiro, donde observará las ruinas de la torre, campanario y portal que no alcanzaron a ser sepultadas por la lava del volcán Paricutín.

Actividades turísticas: Podrá practicar ciclismo de montaña y cabalgata por diversos senderos y actividades de aventura como la tirolesa. Conviva con la comunidad purépecha y aprenda sobre su historia, leyendas, cultura y visión del trabajo conjunto. Dicha comunidad ha obtenido reconocimientos nacionales e internacionales por su manejo sustentable de los recursos naturales y labores de reforestación.

Servicios turísticos: Se ofrecen servicios de guiado, alimentación a base de platillos locales y alojamiento en 5 cabañas con capacidad para hospedar a un total de 70 personas. Existen cabañas para parejas, familias y grupos. Todas están equipadas con camas, baños, regaderas, cocineta, sala y comedor. También existe un área acondicionada para acampar.

Antecedentes: Este proyecto nació de la unión de 23 empresas comunales, con el objetivo de rescatar su cultura y aprovechar sustentablemente los recursos naturales de la zona.

El “Centro Ecoturístico Pantzingo” es una de las empresas constituidas por la comunidad indígena de Nuevo San Juan Parangaricutiro, Michoacán y que sin lugar a dudas, representa una de las comunidades rurales más importantes y mejor organizadas del país.

Nuevo San Juan Parangaricutiro cuenta una historia muy particular, ya que en el año de 1943, el nacimiento del Volcán Paricutín (uno de los más jóvenes del mundo), destruyó la población que ocupaban los integrantes de esta Comunidad y los obligó a migrar y formar un nuevo centro de población, por supuesto que esto no ocurrió de un día para otro, como bien lo relatan los habitantes más grandes (de edad) de la comunidad. Los efectos de la erupción volcánica en sus terrenos de cultivo y la creciente importancia de la riqueza forestal de sus bosques, motivaron un cambio drástico en la actividad económica, que hasta entonces se había basado en la agricultura y el comercio local.

La Comunidad es propietaria de una extensión de aproximadamente 18,500 hectáreas, de las cuales casi 11,000 están cubiertas por vegetación de bosques de coníferas característicos del clima templado frío.

Es en 1984 que, gracias al interés, organización y esfuerzos para aprovechar de mejor manera los recursos naturales y erradicar la tala inmoderada, que se les otorga el Premio al Merito Nacional Forestal.

Fue en años posteriores, cuando se concretó la creación del “Centro Ecoturístico Pantzingo”, el cual ofrece una gran gama de servicios como el hospedaje en cabañas y zona de camping. Actividades como gotcha, rappel y una tirolesa de casi medio kilómetro de largo. Paseos guiados en las ruinas del antiguo pueblo de San Juan Parangaricutiro y hasta un venadario.

Es entonces innegable que la comunidad indígena, de origen purépecha de Nuevo San Juan Parangaricutiro, es un ejemplo a seguir por todas aquellas comunidades que quieren salir adelante, mediante la implementación del turismo, utilizando responsablemente sus recursos naturales y culturales.