Ensayo: Historia de México contemporáneo

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Dicho conflicto termino en el año de 1929 y entre sus consecuencias se encuentra la muerte del presidente electo para un nuevo periodo Álvaro Obregón, por parte de un católico que creía que Obregón no permitiría la superación de este conflicto. Al final de este conflicto.

México se encuentra en una situación paradójica en su economía. Mientras que la región petrolera se mantiene activa, el sector agrario e industrial, se encuentra detenido por el problema de las vías de comunicación, es decir los caminos y el ferrocarril. Y gran parte del sector minero empezaba a ser de menor importancia en comparación con otros puntos mineros del mundo Venezuela por ejemplo. Si bien se pudo lograr un avance económico en el periodo callista no se puede medir exactamente en términos físicos, pues para 1929 la depresión mundial iniciada con el vecino del norte, promoverá un déficit económico para el país.

En el aspecto económico, debido a la falta de una clase burguesa eficiente el gobierno mexicano no puede neutralizar a la clase militar, que sumaban mas de cien mil efectivos.

Podemos decir que el mayor logro de Obregón y calles en el campo de la economía fue el orden interno.

Es por esta carencia de la clase burguesa eficiente que el gobierno mexicano creara empresas paraestatales, para impulsar la economía interna y externa, así aparecerán nuevas instituciones gubernamentales, como lo son El Banco de México, la comisión de irrigación y caminos, El Banco Nacional del Crédito Agrícola y Ganadero, y algunos bancos locales y estatales. Pero mas adelante se aparecerán nuevas empresas paraestatales como Teléfonos de México, La comisión Federal de Electricidad, Luz y Fuerza del centro, Petróleos Mexicanos etc. hasta llegar a superar las mil empresas para estatales.

Ligado al tema económico se encuentran las masas campesinas, si bien parte del discurso revolucionario verso en el reparto agrario, no se llevo con éxito a la practica, tenemos que desde el tiempo de Carranza hasta el periodo de Calles, la repartición de tierras a los campesinos fue prácticamente escasa para el volumen de población agrícola y ganadera que tiene el país, gran parte de los territorios están en dominio de extranjeros que se mostraron hostiles a las leyes sobre la tierra y mas aun el gobierno no supo como enfrentar a estos pequeños grupos que acaparaban la tierra.

Como mencione anteriormente la revolución mexicana fue una revolución agraria pero con los nuevos gobiernos disto mucho de cumplir estas reformas que el campo necesitaba es por eso que encontramos en 1921, únicamente el 30.8% de la población económicamente activa se encontraba empleada en ocupaciones no clasificadas como agropecuarias; de ella la mitad se encontraba empleada en la industria. La de transformación daba empleo al 10.4% del total, mientras que la actividad extractiva, la industria eléctrica, la construcción y el transporte ocupaban a otro 4.2% que, sumados, significaban un 14.6%. Veinte años después la situación no se había alterado notablemente: en 1940 las actividades no agropecuarias ocupaban al 36.7% de la población económicamente activa y la industria de transformación al 10.6%, mientras que las actividades extractivas, la industria eléctrica, la construcción y el transporte, al 7.1%, es decir, 17.7% del total es decir que para entre 1920 a 1940 el campo no figuro en la economía mexicana, si el 70.2 % representaba a los campesinos sabemos que el reparto agrario no había cubierto en ninguna mínima parte la mayoría de los campesinos y es importante resaltar que gran parte de las tierras se encontraban en manos de extranjeros o políticos favorecidos por los gobiernos militares para calmar los ánimos de rebelión. Entonces, en el campo muchos campesinos trabajaran las tierras ajenas, sin el respaldo de un organismo que los proteja y regule su trabajo. Y los campesinos que contaban con tierras se dedicaban a una economía de autoconsumo.

Es hasta el gobierno de Cárdenas que podemos hablar de una mejor repartición de la tierra y una mejora en la economía.

Otro campo fundamental de este periodo es el de los obreros.

Durante los años veinte el movimiento obrero estuvo controlado en gran medida por la CROM; de ahí que mucha de la historia del movimiento obrero mexicano en esta década sea la historia de la CROM. La CROM se organizó en 1918 con el apoyo de ciertos colaboradores de Carranza. Su propósito original era constituir una organización nacional que simultáneamente apoyara al gobierno y le exigiera el cumplimiento cabal del artículo 123. Desde un principio buena parte de la energía de la CROM se dedicó a combatir a las organizaciones rivales, en su mayoría más radicales aunque también aparecieron algunas a su derecha, en particular las católicas. Los gobiernos de Obregón y Calles intervinieron en estas disputas intergremiales en apoyo de la CROM, que constituyó una de sus bases de poder no militar, este organismo si bien buscaba proteger a al grupo obrero, no cumplió del todo con su objetivo primordial y se fue desviando en intereses políticos y partidistas, así La CROM será el poder obrero representativo ante el presidente de la republica al igual que los otros gremios, pero tanto existía irregularidades en su interior, el gobierno no atendía sus necesidades del todo, mas bien se dedico a darle un poco de lo que pedían, para mantenerlos en paz, pero siempre quedaban hoyos que cubrir.

Hacia 1935 Cárdenas no solamente había logrado la formación de este sindicato, también había logrado mejoras en el campo, los años duros de la depresión mundial ya iban pasando.

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El cardenismo es el periodo en donde se mira un avance económico hacia afuera y hacia adentro, un mejor manejo en cuanto a las necesidades de las masas campesinos y obreras, y el establecimiento de las bases de la nueva elite política, su periodo es muy importante para la comprensión de algunas instituciones del país y de algunas empresas gubernamentales que continúan hasta hoy en el país.

A pesar de la difícil posición en que se encontraba, el nuevo presidente desde el inicio empezó a tomar ciertas medidas políticas que contravenían las directrices callistas. La más importante consistió en alentar a los grupos obreros que se encontraban en proceso de reorganización a hacer uso extensivo del derecho de huelga para mejorar su posición y, sobre todo, expandir su presencia en la sociedad. También alentó a los grupos de campesinos organizados a continuar el proceso