EL CRIMEN FERPECTO

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Y Lourdes hace muy bien todo, se presenta su oportunidad de sentirse deseada aunque sea a las malas, obligando obviamente a Rafael a involucrarse con ella por medio de amenazas y chantajes, que sin escapatoria debe aceptar su condición y no le queda más remedio que abandonar sus sueños quizás, y convertirse en el nuevo padre de Lourdes, sí, ese tipo inexistente e inexpresivo. Ya va uno entendiendo porqué Lourdes se involucra con el cretino, no gozo de una presencia masculina que la influyera en su gusto por los hombres, y cuando consigue al cretino es feliz, viéndolo sufrir tal vez.

Pero las cosas toman un giro inesperado, que ya se reflejaba cuando Lourdes cortaba el cadáver; Rafael la quiere ver muerta o desaparecida, no la puede matar obviamente, es incapaz de hacerlo, iría en contra de su filosofía de tomar algo que le gusta, si lo quiere, y no puede tomar la vida de Lourdes, por eso mismo porque ni le gusta ni la quiere.

Y aparece nuevamente Don Antonio, esta vez como una vocecita en su cabeza que tal cual como el vendedor del inicio es fastidioso y desentraña todos tus deseos hasta llevarte a la locura porque no puedes satisfacerlos. Y en medio se situaciones cómicas y fracasos consecutivos para deshacerse de ella le llega la idea perfecta a su cabeza y es entonces cuando finge al máximo su estado de felicidad, lo que es obvio para Lourdes, es extraño y no genera confianza, y esto no le gusta en absoluto, así fuera cierto, ¿No es muy común que perdamos interés por lo que tenemos en nuestras manos? ¿Así sin esfuerzo y sacrificio? Obviamente en ella se pierde el deseo y al fin y al cabo como su madre termina aceptándolo porque aparentemente ese era su plan, tenerlo en sus manos.

Cuanto Rafael tiene toda la situación a su favor, decide concretar su plan que en medio de errores sale ferpecto, la situaciones se volcán a su favor y todo sale a pedir de boca. La entropía de esta situación es perfecta, ese desorden y alteración de los sucesos, ese rompimiento de paradigmas hace dudar al detective, quien cae en la mentira tal cual como le pasó en algún momento de su vida, aunque con dudas sabe que es lo correcto y debe aceptarlo, y evocando la famosa frase del personaje de Lex Luthor Jr. en una película reciente donde dice que lo que parece ser té de durazno puede ser tranquilamente orina de la abuela, y en este caso lo que parece ser un intento de asesinato de Rafael (Y la prueba reina del crimen de Don Antonio) no es más que un suceso trágico en favor de nuestro protagonista, quien logra engañar a todos y se libra por fin de su condena a ser una persona normal, un idiota más.

Al final en una situación bastante confusa, nuevamente la situación no es lo que parece, y nuevamente lo que parece ser el triunfo de Rafael no es más que la descripción de su desgracia, se convierte en alguien normal y el ascenso al triunfo es de su enemiga Lourdes. En medio de su aparente frustración y desgracia nos muestran una frase de Lourdes: “Nuestro amor es para siempre”. En este caso no es el amor entre ellos dos, sino el amor de cada uno, como en la relación sexual, es el deseo de cada uno, individual y sin el otro; lo que sobrevive y no puede morir.