Maltrato y abuso Infantil.

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La mayoría de los adultos dicen haber sido maltratado alguna vez por parte de sus padres, por lo que las cifras de maltratos hacia los niños son alarmantes. Existen muchas causas para llegar a cometer maltrato infantil, la de mayor peso es la situación económica, cuando las familias tienen bajos recursos, la violencia intrafamiliar y el maltrato a los hijos de sus padres es mucho mayor, entre las cuales están, el niño puede tener un problema de memoria o aprendizaje por lo que el padre entra en desesperación y cree que la única manera de que el niño va a aprender es maltratándolo, cuando el niño tiene una discapacidad, provoca en el agresor desesperación e impotencia de no saber cómo cuidar de un niño que no es normal, que no puede valerse de sí mismo y el único camino que encuentra es desquitarse con el niño porque siente que su vida ha sido arruinada por él.

El uso del alcohol y de sustancias estupefacientes, tienen un vínculo más fuerte con el maltrato infantil, “Varios estudios han confirmado que el alcohol contribuye en grado significativo a este tipo de violencia, y muchos de ellos demuestran que ser maltratado en la infancia se asocia a un considerable incremento del riesgo de consumo peligroso o nocivo de alcohol en etapas ulteriores de la vida” (Organización Mundial de la Salud, 2014)

El alcohol y las drogas coloca a sus consumidores en un estado de nube reduciéndoles las funciones cognitivas y trae de regreso recuerdos pasados, normalmente los más traumáticos, lo cual conlleva a la persona a ser mucho más agresiva con el niño al momento del maltrato, reproduciendo los recuerdos que lo perturban con el inocente, y también pierden el control sobre sí mismo. También el uso del alcohol y drogas disminuye totalmente el sentido de responsabilidad de los padres a sus hijos, por lo que a más del maltrato los niños no tienen una figura paterna o materna en la cual apoyarse.

En algunos países se ha llegado a tomar conciencia acerca de este tema y se han tomado medidas para que el consumo de alcohol sea mucho más controlado, por lo que se han dado la importancia a ciertas características que la sociedad puede ver como algo de bajo provecho para ayudar, pero a la larga han dado resultados. Estos países se han dedicado a mejorar las conexiones entre los servicios de bienestar infantil y los de tratamiento de alcoholismo, ya que mejorando la comunicación entre estas entidades públicas que ayudan a este tipo de gente, se puede dar un mejor porcentaje de personas que han acudido y se han recapacitado para poder lograr un vida normal en el futuro, libre del alcohol.

También se han dedicado a crear campañas de educación y concientización pública, lo que estimula las ganas de ayudar a estas familias que han sido quebrantadas por el abuso del alcohol y el maltrato infantil.

Al analizar este problema, las cifras arrojadas son alarmantes ya que “La estadísticas sobre muerte infantil por maltrato indican que aproximadamente el 54% se produce por maltrato físico y las edades en las que se produce mayor maltrato son, el 83% de la población infantil maltratada son menores de 5 años y el 42% son menores de un año” (Reeduca, 2009).

Los niños que han sido sometidos a maltrato infantil y no están incluidos en las cifras mencionadas anteriormente, son niños que han quedado con secuelas muy graves, con discapacidades físicas, lo que dice que el futuro de estos niños no va a ser normal, más bien serán una carga más para los desesperados padres. Muchos de ellos han quedado postrados en una silla o en una cama o siendo el golpe muy grave puede dañar el cerebro del niño dejándolo con una discapacidad cerebral. Los niños maltratados físicamente, menores de 10 años sufren también de traumatismos craneoencefálicos, ausencia de reactividad pupilar y amnesia postraumática que más o menos tiene una duración de una semana.

El síndrome de maltrato o abuso infantil, también denominado en la literatura anglosajona como "Battered" o"Shaken Baby Syndrome", se puede definir como todo daño producido en un niño a consecuencia de una agresión directa o negligencia en su cuidado. (Giménez, Pérez, Dujovny, Díaz, 2007)

Este tipo de síndrome se produce cuando a un menor de 5 años se le sacude bruscamente en un lapso de 5 o más segundos, de tal manera, que el cerebro del niño rebota contra el cráneo, lo que provoca magulladura cerebral, presión, inflamación y sangrado dentro del cerebro. “Las venas grandes que se encuentran a lo largo de la parte exterior del cerebro pueden romperse, ocasionando más sangrado, hinchazón y aumento de presión. Esto fácilmente puede causar daño cerebral permanente o la muerte” (Medline Plus, 2013).

El síndrome en la mayoría de veces se lo comete sin tener conocimiento alguno del mismo y sin intensiones de maltratar al niño, sino que los padres como medio para silenciar a su niño o para reprenderlo porque ha hecho una travesura, sacude al niño ingenuamente. Refiriéndonos a los bebés recién nacidos se han escuchado casos de que los padres con la sensación de no desear a su hijo, tratan al mismo como si fuera un costal de harina, lo lanzan sobre el colchón de la cama, sin saber que está lesionando el cerebro del bebé y que a la larga esto producirá también una discapacidad cerebral en el niño.

Los síntomas que provoca un niño con principios una discapacidad cerebral son crisis epilépticas, cambios de humor muy frecuentes, pérdida de la memoria y de la visión, entre otras. En muchas ocasiones cuando el niño ha sido maltratado y llega al extremo de ir al hospital, el agresor menciona que lo que le ocurrió fue una caída o un golpe muy fuerte, quitándose toda la culpa acerca del atroz acto que cometió con su hijo. El maltrato también ocasiona estrés, lo que puede llegar a alterar el sistema nervioso e inmunitario de la pequeña víctima. El estrés postraumático es una de las secuelas que deja el maltrato infantil, ya que es causado por algún acto traumático que ha tenido la víctima en su vida infantil.

Con el trastorno de estrés postraumático, cambia la respuesta del cuerpo a un evento estresante. Normalmente, después del evento el cuerpo se recupera. Las hormonas y los químicos del estrés que el cuerpo secreta debido a dicho estrés regresa a los niveles normales. Por alguna razón, en una persona con trastorno de estrés postraumático, el cuerpo sigue secretando las hormonas y los químicos del estrés. (Medline Plus, 2014)

En el Ecuador, los casos de maltrato infantil son recurrentes, ya que gran parte de la población son personas que no han recibido educación acerca del tema, y se han quedado con la mentalidad violenta