Escasez de agua en México

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La creciente necesidad del recurso del agua se ha dado, entre otras cosas, por el crecimiento poblacional, lo que hace que deba haber un reparto más amplio de agua entre más personas, creando así una gran demanda en donde a medida de que la problemática ambiental y la contaminación van agravándose, se complican las condiciones de abastecimiento y suministro del recurso.

Morales menciona que en México se presentan algunas situaciones que son parte de las causas de la problemática de la asignación de precio al agua, tales como que los datos de la producción y distribución so estimados (no se conocen los valores reales) ya que se carece de mecanismos para hacer una macromedición del recurso, no se tiene registro de la totalidad de los pozos perforados ni de su gasto, los flujos de ríos y canales para riego también son estimados. Por otra parte, Morales también comenta que la mayoría de la inversión en el sector ha sido subsidiada y que la tendencia de la inversión en México en los sectores federal, fondos estatales y municipales, créditos y utilidad de organismos operadores va a la baja. Menciona que el costo total de producción de agua no se paga, que los derechos aunque están establecidos en la ley no se han podido cobrar, en particular para agua doméstica y comercial, lo anterior muestra que la tarifa de venta a usuarios no se relaciona con su costo real y que son permanentemente afectados por injerencias políticas y sociales (Morales, 2001).

Como consecuente, es necesario destacar la importancia de la transparencia en el suministro y gestión del recurso. Si bien la anterior información fue vertida hace catorce años, es evidente que los problemas siguen siendo recurrentes y que todavía hace falta una aclaración acerca del problema de la escasez. Así mismo, a lo largo de los últimos años se ha suspendido temporalmente el suministro de agua en varias zonas, principalmente en días festivos, dejando sin agua a personas que incluso cuentan con pagos activos de este bien.

Creencias ambientales

La escasez de agua en México tiene sus antecedentes en el comportamiento ecológico que se ha tenido a lo largo de los años, en base a las creencias ambientales que son aceptadas en la sociedad. Según Víctor Corral, (2001), en años anteriores a 1970, el sistema de creencias aceptado por las sociedades occidentales, contemplaba al hombre como un ser independiente de la naturaleza, un ser superior a ella que podía por tanto, dominarla y usarla para su propio beneficio, creando así un sistema de creencias llamado Paradigma Social Dominante.

Este término, acuñado por Catton y Dunlap (1978), se refiere al marco ideológico según el cual no existen límites ecológicos al crecimiento económico y se basa en un optimismo tecnológico como solución a los problemas ambientales; es así que los humanos parecen estar al margen de las leyes de la naturaleza porque a partir de la evolución tecnológica se les permite la manipulación de recursos, convirtiéndose así en destructores directos e indirectos de la naturaleza.

Según Mercado (2001), hay procesos de deterioro del ambiente causados por el hombre. Menciona, asimismo, que la extinción de especies y la escasez de recursos renovables y no renovables son de la autoría de la especie humana, siendo así un potente factor para la constante escasez de agua en el mundo en general.

Sin embargo, existe una creencia ambiental completamente contraria al PSD, llamada Conducta Pro Ambiental (CPA), que se refiere al rol de la psicología ambiental que busca contrarrestar dichos problemas ambientales, con la búsqueda de comportamientos que resulten en el cuidado y preservación del medio ambiente para así buscar soluciones sustentables.

Actualmente algunos temas ecológicos sobre la promoción de la conservación de los recursos ambientales se han centrado en áreas como el manejo de los residuos reciclables y desechos, el uso eficiente de los energéticos, la contaminación del aire

En menor cantidad existen, en nuestro país estudios relacionados con la preservación de los ecosistemas, pues de los pocos estudios que de por sí existen en nuestro país con respecto al tema, casi toda la investigación del CPA se ha centrado en problemas ambientales del contexto inmediato y directo de los sujetos (Hogar, escuela, barrio). Existen muy pocos estudios que aborden el involucramiento de las personas en problemas locales como la degradación de ecosistemas (Corral, 2002).