Mi barrio como espacio de interacción

...

“Cuando examinamos hasta el fondo, en la medida de lo posible, el contenido de nuestras acciones, puede ocurrírsenos la idea de que todo el hacer del hombre no es más que un jugar” (Huizinga,1954:7). Si lo pensamos de esta manera, la base de la cultura es el juego, tiene que haber participación y colaboración pues el aprendizaje solo se da en un proceso de colaboración. Son cosas imaginarias que nos ayudan a construir el pensamiento. Dependiendo lo que nos guste es como usamos las cosas y esto permite crear ciertos tipos de reglas.

Las reglas de un juego se van internalizando a través de un lenguaje socializado (palabras en común) que conllevan a un pensamiento interiorizado que permite exteriorizar después eso que se ha internalizado. Es la transformación de los procesos elementales en superiores, a lo que Vigotsky se refiere con la naturaleza cambiante del desarrollo (Wertsch, 1985:41). El lenguaje es uno de los elementos más importantes que nos permiten relacionarnos, es como una forma de creación, nos permite conocernos y reconocer a los demás y a través de él se le da sentido a las cosas, podemos identificar las cosas y esto a través también del juego que permite a su vez crear el lenguaje.

“Los fines a que sirve están también más allá del campo de los intereses directamente materiales o de la satisfacción individual de las necesidades vitales, el juego puede servir al bienestar del grupo” (Huizinga,1954:22), por ello, el lenguaje al ser significado propio de una cultura, produce cohesión social y esta también parte importante de la convivencia en un barrio.

Vigotsky identifica la relación entre el pensamiento y la palabra y señala que la gente siempre realiza acciones con un significado. Voloshinov por su parte nos dice que la función primaria del lenguaje es la comunicación, la cual se basa en un intercambio de significados para reflejar una realidad contextualizada, pero para dar cuenta de estos significados son necesarios los signos, pues son los signos los que permiten controlar el ambiente. El pensamiento a traves de la palabra es un reflejo generalizado de la realidad.

En el barrio, se comparten mismos significados y por medio de esta comunicación es que es posible la interacción social. Todos saben lo que significa ir al mercado a otro establecimiento, comparten el mismo lenguaje e incluso con las personas que son más serias y antisociales se podrían comunicar sin problema.

Por último, hay algo muy interesante que podemos observar en estas relaciones sociales que emergen a partir de la interacción, son el objeto de todo esto. De acuerdo al método dialéctico de Marx la actividad surge también como un vínculo y la cooperación como creadora de conciencia. Si lo pensamos, todas estas personas logran encontrase e interactuar respecto a todo lo señalado debido a las necesidades. Es necesario satisfacer estas necesidades de alimento, de ropa, de movilidad, y entonces se puede decir que ese motivo es la causa de esta interacción.

Podemos decir que la interacción es un beneficio que se obtiene por la actividad. “…lo más importante que distingue una actividad de otra es el objeto de la actividad. Es el objeto de la actividad lo que le confiere a la misma una determinada dirección… Lo importante es que más allá del objeto de la actividad, siempre está la necesidad, que él siempre responde a una u otra necesidad… De este modo, el concepto de actividad está necesariamente relacionado con el concepto de motivo. La actividad no puede existir sin un motivo” (Leontiev,1981:83)

Para la psicología marxista, la importancia de la actividad reside en que da lugar a la cooperación, al contacto y relación con los otros, a la vida grupal y a la influencia interpersonal. (Blanco,1988:300). La cooperación humana tiene como objeto el intercambio social y esta se encuentra condicionada por los medios de producción. Toda actividad tiene una estructura circular, y el sujeto parte de sus necesidades hacia la satisfacción de ellas, proceso a través del cual es necesaria la interacción. Hay una apropiación simbólica de los espacios y esto tiene que ver con las contingencias de las interacciones.

De modo que los actos se ofrecen de manera racional, pues “el actor tiene una clara y nítida percepción de los fines, medios y resultados secundarios que entraña la consideración racional de medios alternativos para alcanzar el fin” (Schutz, 1953). Parte del proyecto de Marx era generar solidaridad entre las clases oprimidas y sería excelente continuar con este tema en pro de la misma expectativa.

REFERENCIAS

JIMENEZ DOMINGUEZ, BERNARDO (1194): “Cambios sociopolíticos y desarrollos históricos en psicología”, en M.Montero (coord..): Construcción y crítica de la psicología social. Barcelona. Anthropos. P.27-47.

Blanco, Amalio (1988): “La tradición histórico dialéctica”. Madris. Morata. P.278-321.

Wertsch, James (1985). “Vigotsky y la formación social de lamente. Barcelona. Paidos. Cap 2,3,4. 1988.

Siguán M. (coord.): Actualidad de Lev S. Vigotsky. Barcelona. Anthropos.

Voloshinov, Valentin (1929). “El marxisismo y la filosofúa del lenguaje”. Madrid, Editorial Alianza.

Huizinga, J. (1954) Homo Ludens. P7-42. Alianza. Buenos Aires.

Schutz, A. (1953) “El sentido común y la interprestación científica de la acción humana” En el problema de la realidad social. Amorrortu. P. 35-70.