EL ALCOHOL: EFECTOS FISICOS Y PSICOLOGICOS

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Consumidor excesivo de alcohol: hay quienes tienen la falsa idea de que si no padecen la enfermedad del alcoholismo pueden beber en exceso sin consecuencias negativas

Consumidor moderado de alcohol: el consumo moderado de bebidas alcohólicas durante una celebración o de manera esporádica, sin llegar a la intoxicación. La moderación permite, sin riesgo el consumo de alcohol solo a quienes no son alcohólicas y a los que no evaden sus problemas con la bebida.

Tipos de alcohólicos

Alcohólico Psicópata: mentalmente desequilibrado y que constantemente afirma que va a dejar de beber definitivamente, se comporta con gran cinismo y muchas veces realiza actos delictuosos bajo los efectos del alcohol.

Alcohólico iluso: no es capaz de admitir que no puede beber una sola copa, planea distintas formas de hacerlo, cambia de marca, tipo de bebida, lugar circunstancias con las esperanzas de adquirir control sobre su forma de beber.

Residentes: son quienes creen que después de un periodo de abstinencia podrán volver a consumirlo sin peligró.

Maniacodepresivos: atraviesan por periodos de euforia, en los que funcionan muy bien y aparentemente ya han dejado de beber, pero luego vuelven a hundirse en la depresión y en el alcoholismo

Todos estos y muchos otros tipos de alcohólicos tiene un síntoma en común: no pueden empezar a beber sin que se presenten en ellos el fenómeno de deseo imperioso.

LAS DROGAS

La palabra droga tiene un amplio significado, ya que este abarca cualquier sustancia que tenga algún efecto en el funcionamiento del organismo.

El uso común se requiere a las sustancias perjudiciales para la salud, que pueden causar adicción y que tiene efectos sobre el estado de ánimo, los pensamientos y los sentimientos.

La droga puede transformar la vida de una persona en forma rápida y drástica, haciéndola girar a su alrededor y destruyéndola.

Iniciación a las drogas

En el caso de las drogas no existe el consumo moderado debido a su elevado índice de actividad (tolerancia).

Probar la droga porque se piensa que solo se consumirá una vez para satisfacer la curiosidad es un grave riesgo. Muchos casos de farmacodependencia comienzan así.

Tipos de drogas

Opioides actúan sobre el sistema nervios produciendo alivio del dolor, somnolencia, modificaciones del estado de ánimo. Generalmente los adictos siguen utilizándolos para evitar los síntomas de abstinencia que son muy severos, más que el placer que puedan producirles.

Depresoras del sistema nervioso central (tranquilizante y sedante) se caracterizan para disminuir la ansiedad y facilitar el sueño. Sus efectos son semejantes a los del alcohol, aunque varían de acuerdo con la cantidad que se ingiera, a la situación, personalidad de quien los utilice.

Psicoestimulantes (cocaína y anfetaminas) Se utilizan para estimular, alegrar y animar a quienes la usan porque producen una mejoría en el estado de ánimo, la sensación de que aumenta la energía, mayor atención y desempeño favorable en el trabajo.

Cannabinoides (mariguana) los cambios de conducta varían dependiendo de la cantidad, la forma de consumo, el ambiente, la experiencia, las expectativas y la predisposición de los sujetos.

Si se consume en cantidades elevadas produce alucinaciones, ilusiones y sensaciones de persecución, confusión, desorganización, alteración del sentido del tiempo e incluso pánico y pérdida del sentido de la realidad.

Psicodélicos: LSD (dietilamida del ácido lisérgico) se conocen con el nombre genérico de viaje e incluyen alucinaciones, exageradas de las sensaciones y de la percepción de los sentidos, confusión, despersonalización, pánico y persecución.

Inhalantes son gases que al respirar producen anestesia (perdida de la sensibilidad) la toxicidad varía según la sustancia, pero la mayoría de estas implica trastornos del ritmo cardiaco y falta de oxigenación en el cerebro, con el consiguiente daño y deterioro cerebral.