PREFACIO.

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La docencia es mucho más que un método, mucho más que un quehacer sin sentido; es una tarea que implica un oficio intelectual, un arte sensible para comunicar y una ciencia para argumentar de manera crítica y consiente lo que se hace cuando se enseña.

En este trabajo no se revisan modelos de enseñanza, de ellos los maestros están lo suficientemente informados. Se analiza la docencia como oficio, la que instruye y adiestra; como arte, la que libera y propicia el desarrollo de la sensibilidad del alumno y como ciencia que explica el porqué de las acciones para lograr la enseñanza como un producto útil para la vida cotidiana y la convivencia social del educando.

Para ser docente no es suficiente tener un vasto conocimiento y dominio sobre un tema o habilidad en particular, es mucho más que eso, es una actividad compleja que demanda de la interacción interdisciplinaria para poder llevar a cabo de forma exitosa y pertinente la tarea de enseñar.

Estoy de acuerdo con la idea de que el quehacer docente es complejo. El profesor tiene que tener herramientas que lo ayuden a enriquecer, actualizar su conocimiento pedagógico y disciplinario, saber interactuar y comunicar un conjunto de conocimientos y aprendizajes a través de métodos, estrategias apropiadas y contextuadas; además facilitar la comprensión, el desarrollo de habilidades, destrezas y actitudes favorables ante diversas circunstancias que le permitan a los alumnos reflexionar sobre su aprendizaje y aplicarlo para resolver situaciones problemáticas.

La docencia en términos generales es un arte, un oficio, y/o una ciencia; una responsabilidad que se asume con profesionalismo, con convicción y con la satisfacción de dar por el placer de ser.

UNO

LA DOCENCIA

La docencia es uno de los trabajos más antiguos de la humanidad, desde que el ser humano tiene uso de razón ha sido el medio por excelencia para transmitir la herencia cultural, primero al interior de la familia en la época primitiva y posteriormente a través de academias y escuelas que aparecen en las culturas tanto orientales como occidentales muchos años antes de cristo.

La docencia como trabajo formal tiene su origen con el surgimiento de la escuela en el siglo XVII en Alemania, prácticamente ellos inventan esta institución como se conoce, además de ser la instancia del estado para educar a las futuras generaciones y garantizar el status quo del gobierno y sociedad

A pesar del desarrollo de la técnica, la ciencia y la vida social, en el devenir histórico de la humanidad, la docencia parece haberse detenido en el tiempo; la relación entre docente, contenido y discente parece haber permanecido inmutable. Se han cambiado formas de enseñar, se han modificado contenidos, actualizado saberes, introducido tecnología, pero en esencia la relación maestro - alumno sigue siendo la misma y el éxito de la docencia no depende de los medios y la teoría pedagógica aplicada en la tarea, sino de la actitud que asuma el docente al enseñar.

La práctica de la docencia requiere de un sujeto que sea un hábil comunicador, que impacte, persuada y convenza a sus alumnos, para que comprendan con claridad meridiana que lo que se les enseña es lo que ellos necesitan para tener éxito en la vida.

La docencia un trabajo muy antiguo.

Educar y enseñar van de la mano siempre una implica la presencia de la otra. Educación en su sentido amplio significa “el arte del bien criar” y la docencia es la acción para lograr esa buena crianza.

A un niño cuando se le educa se “le enseña bien”, por ello es común escuchar que un infante mal educado es un malcriado. Por esta razón la preocupación de las sociedades en todas las épocas, es la buena educación y para ello está la docencia.

Los grupos sociales por más atrasados y/o primitivos que sean se apoyan en la enseñanza para conservar y perpetuar su cultura. Se puede afirmar sin temor a equivocarse que la educación tiene su origen en las comunidades primitivas y la referencia se hace evidente, en el momento, en que el sujeto transita de un estilo de vida nómada a una forma de vida sedentaria, cuando palpa el beneficio de sus primeras labores, como la caza y la pesca, la agricultura y la recolección de sus alimentos y sobre todo de su supervivencia.

La actividad docente aparece en el momento en que el ser humano, requiere de transmitir y conservar técnicas y métodos, con el propósito de preservar y aprovechar mejor los saberes y el conocimiento. Es así como surge la docencia como una herramienta para enseñar, aprehender y reflexionar sobre los hechos, necesidades y formas de resolver problemas personales y de la comunidad.

Las formas más antiguas de enseñanza, se sitúan en el oriente antiguo: China, India, Egipto, Persia, así como en la antigua Grecia. En estas culturas y naciones la enseñanza se basa en las tradiciones y la religión.

En los países europeos y del occidente en general, la educación y la docencia se sustentan en la tradición religiosa de los judíos y cristianos. Aunque es innegable, la enorme influencia de la antigua Grecia, de Sócrates, Platón y Aristóteles, máximos exponentes de la docencia helénica, que legó al mundo la mayéutica socrática, método de enseñanza a través de preguntas y respuestas entre maestro y alumno, todavía vigente.

Los griegos fueron los pensadores de mayor influencia en el mundo occidental. El propósito helénico era la formación de los jóvenes intelectualmente para ocupar los liderazgos y asumir las tareas del estado. Posteriormente la docencia griega propicio el desarrollo de las artes, de la filosofía, lógica y matemáticas.

Los romanos se nutren de la cultura griega y destacan en su docencia la enseñanza de la retórica y la oratoria como saberes fundamentales. Los exponentes más relevantes de la escuela y la docencia romana, son: Quintiliano, educador del siglo I y Cicerón quién propone un ideal “humanitas”, inspirada en la paidea griega, además impulsa la oratoria.

La educación romana y la docencia latina es la de mayor influencia en occidente, porque Roma fue el imperio que dominó al mundo, y transmitió a occidente la literatura clásica, el derecho, la administración, la organización del gobierno y la ingeniería.

La presencia cristiana en los primeros siglos de esta era, se manifiesta mediante la fundación de muchas escuelas monásticas. La docencia se desarrollaba con base en las siete artes liberales: el "Trivium", formado por la gramática, la retórica y la