Primeros auxilios psicologicos. Cambia tu atención y cambiaras tus emociones

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Para llevar a cabo unos primeros auxilios psicológicos efectivos se debe llevar a cabo unas fases que ayudan a su desarrollo, de las cuales se destaca el contacto y presentación. Un buen acercamiento es la clave para la correcta y efectiva aplicación de los primeros auxilios. También se debe brindar alivio y protección. Los afectados deben saber que la ayuda se da para cubrir las necesidades básicas de las víctimas, que se está ahí para que no se preocupen por más cosas. La contención emocional también es importante ya que los afectados pueden estar en estado de shock, desorientados y desubicados. La labor como psicólogos de emergencias será orientar en el espacio y en el tiempo de una manera no agresiva, adaptándose a la realidad del paciente, también se debe dar una recogida de información, la forma en la que se interactúa con el afectado es muy importante para poder acceder a la mayor información posible y así brindar la ayuda más eficaz. La asistencia práctica con la anticipación de informaciones prácticas útiles de las que quizás las víctimas no son conscientes, ante las preguntas de los afectados y su respuesta se conseguirá rebajar la ansiedad y cumplir con el objetivo de satisfacer sus necesidades básicas. También es importante generar una conexión con la red social de apoyo, se recomienda que hasta que no haya nadie acompañando a la víctima el auxiliador no se separe de esta.

Es importante involucrar pautas de afrontamiento para normalizar síntomas, muchos afectados creen que además de lo que les ha pasado se están volviendo “locos”, se debe alejar esa idea informando de las reacciones básicas de estrés esperables en las próximas horas y días, es pertinente entrenar a la víctima en técnicas de relajación básicas, siendo la respiración diafragmática la técnica de elección, para conseguir reducir el nivel de actividad fisiológica y dar una herramienta de afrontamiento ante posibles futuros síntomas.

Por el contrario, no se debe decir que ahora tiene que ser fuerte o valiente; lo único que hacemos con esa afirmación es no dejar al afectado experimentar sus propios recursos de afrontamiento. Al final de esto se debe dar conexión con servicios externos, se debe explicar que el auxilio no es solo externo por un auxiliador, sino que la víctima también pude contribuir en esto.

Cuando una persona se ve enfrentada a una situación externa también puede actuar como auxiliador propio, es de gran ayuda porque cada persona conoce sus falencias y sentimientos momentáneos, el auxiliador debe explicar que es normal sentirse mal por la situación y que la víctima debe darse permiso para sentirse así, también puede realizar ejercicios físicos combinando la respiración para calmarse, además de buscar actividades que estén en el rango de su monotonía para sentirse ocupado tanto física como mentalmente, ayuda mucho el descanso y ser conscientes que una situación negativa requiere tiempo de afrontamiento para ser superada.

En conclusión frente a una situación límite no solo se puede ayudar con primeros auxilios ante traumatismos físicos sino también psicológicos que ayudaran al control de la situación, teniendo en cuenta que para ayudar a un afectado se debe analizar todo el ambiente en el que este se desenvuelve y poder llegar así a cumplir con la meta de los primeros auxilios psicológicos que es ayudar a recuperar la efectividad de la persona lo más pronto posible, esto nos hace descubrir la capacidad de acción no solo con conocimientos de ayuda practica ante las victimas sino también con la ayuda de acompañamiento y apoyo frente a situaciones estresantes.

LORENA ALEJANDRA RUIZ ARDILA

MEDICINA I SEMESTRE

Universidad de Antioquia