.REINTEGRATION, BANKRUPTCY, CREDITOR, DAMAGE, DEBTOR.
Enviado por Ensa05 • 9 de Enero de 2018 • 10.146 Palabras (41 Páginas) • 379 Visitas
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En cuanto a los hechos que no pueden ser objeto de rescisión, quedan recogidos los siguientes: supuestos de necesidad para que la empresa funcione según lo previsto. Los actos ordinarios de la actividad profesional o empresarial del deudor que se realicen de acuerdo a unas condiciones dentro de lo normal. Por otro lado, actos que se encuentren dentro de las leyes especiales reguladoras de sistemas de pagos y compensación y liquidación de instrumentos y valores derivados. Para terminar, las garantías hechas a favor del FOGASA y de los créditos de derecho público.
A estos hay que añadir el introducido en la Ley 14/2013, de 27 de Septiembre de apoyo a emprendedores, que excluye también de la acción rescisoria los acuerdos de refinanciación con acreedores en los dos años anteriores. Lo que se pretende con esto es establecer un plan de viabilidad que logre la continuidad de la empresa.
En el trabajo analizo de cerca, y entrando en detalle, cómo se encuentra regulada la acción de reintegración en la Ley Concursal actual. Concretamente los artículos 71, 72 y 73 ya que la acción de reintegración o de rescisión de los actos perjudiciales para la masa activa viene regulada en los artículos mencionados.
Para determinar con claridad en que consiste la acción de reintegración, acudimos a Laura Carballo Piñeiro quien establece que: “son las acciones de impugnación de los actos perjudiciales para la masa activa del concurso, realizados por el deudor, dentro de un determinado período de tiempo, pudiendo exigirse la intención fraudulenta en su realización, aunque no es un elemento imprescindible.[2]”
De acuerdo con el artículo 76 de la Ley Concursal, “constituyen la masa activa del concurso los bienes y derechos integrados en el patrimonio del deudor a la fecha de la declaración de concurso y los que se reintegren al mismo o adquiera hasta la conclusión del procedimiento.[3]”
La masa activa, establecido también en la Ley Concursal, la constituyen los créditos contra el deudor común que conforme a esta ley no tengan la consideración de créditos contra la masa.[4]
Posteriormente he tratado la presunción de los actos dispositivos a título oneroso a favor de algunas personas relacionadas con el concursado.
JUSTIFICACIÓN DE LA ELECCIÓN DEL TEMA
Desde el principio me decanté por el Derecho Concursal haciendo hincapié en los concursos de acreedores para el desarrollo del Trabajo fin de Grado. Posteriormente, siendo este tema muy amplio decidí centrarme en las acciones de reintegración. El motivo es la situación que muchas empresas atraviesan a día de hoy. Me interesaba saber que ocurría cuando una empresa dejaba de tener ingresos y conocer de cerca cómo acababa entrando en un concurso y su posterior desarrollo. Además los concursos de acreedores considero que están a la orden del día.
1. EL CONCURSO DE ACREEDORES.
A pesar de que el tema de mi trabajo se va a centrar en la acción de reintegración, he considerado comenzar con este capítulo titulado: El concurso de acreedores, ya que para entender la acción de reintegración y poder analizarla desde dentro, es necesario tener claro en qué consiste el concurso de acreedores, así como los motivos o causas por los que se llega a tal procedimiento. La actual normativa civil otorga a los acreedores el derecho a exigir a sus deudores el cumplimiento de manera forzosa de las obligaciones que tuvieran con el mismo. Es el patrimonio del deudor la garantía de este cumplimiento de acuerdo con el artículo 1911 del Código Civil.
El concurso de acreedores es un procedimiento cuya finalidad es organizar las finanzas para que se pueda llevar a cabo el máximo cobro posible de acreedores. Puede ser voluntariamente solicitado por los deudores, o bien, necesariamente iniciado por algún acreedor.
Las causas son la insolvencia actual del deudor común, la insolvencia inminente del deudor común, el incumplimiento regular de algunas de sus obligaciones o el incumplimiento generalizado de pagos de obligaciones tributarias, cuotas de la seguridad social durante tres meses anteriores a la
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solicitud del concurso o bien el pago de salarios, indemnizaciones y demás retribuciones derivadas de las relaciones de trabajo.5
No tiene mucha relación con el desbalance, sin embargo, si la tiene con la solvencia. Entendiendo solvencia, de este modo, como la situación en la que se ve sumergido el empresario cuando puede pagar sus respectivas deudas. Por otro lado, cuando esta deuda no pueda ser pagada, se conoce como situación concursal.
El Concurso de Acreedores pretende negociar un Convenio que facilite el pago a los acreedores y, del mismo modo, se consiga que la empresa continúe sus funciones. Para ello, el deudor podrá presentar a sus respectivos acreedores una propuesta de pago que contemplará el 50% del importe de sus créditos. La deuda deberá pagarse de acuerdo con lo pactado en el Convenio, tiempo y forma, mientras que los nuevos recursos que se hubieren obtenido se destinarán a la continuidad de la actividad.
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- Disponible on line: www.legorburoconsultores.es.
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Sin embargo, los datos muestran que alrededor de un 90% de los Concursos de Acreedores terminan con una liquidación, puesto que en la práctica no se consigue, normalmente, dar una solución al Concurso a través del Convenio. Esto ocurre porque no basta con el simple Convenio entre empresa deudora y acreedores para la continuidad, sino que es necesario lo que se conoce como fresh money. ya que al fin y al cabo es este el que permite una posterior financiación de actividades y a esto hay que añadir, que obtener un crédito bancario o una aportación por parte de socios no siempre se consigue. Por otro lado, hay muchos casos en los que se abre la Fase de Liquidación porque la empresa no baraja la posibilidad de una continuidad. Las razones de esto pueden ser que la cartera de ventas vea una disminución considerable, por la no obtención de financiación o por otras causas.
La administración concursal deberá determinar la masa activa y la masa pasiva de una determinada empresa. Con esto se aclara cuáles son las deudas contra las que tiene que hacer frente la empresa y cuáles son los bienes de los que dispone para satisfacerlas.
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