[pic 2][pic 3][pic 1][pic 4] ASIGNATURA: Realidad Nacional TEMA: Cultura y Globalización DOCENTE: Dra. Doris Castañeda Abanto ALUMNO: Estrella Díaz, Ramón Francisco CICLO: II AÑO: 2016 INTRODUCCIÓN La cultura siempre ha sido universal. Las distintas

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En nuestro mundo actual, de alguna forma gracias a las nuevas tecnologías desarrolladas y proceso de globalización imperante, podemos conocer la diversidad cultural de los diferentes países y regiones a nivel mundial sin necesidad si quiera de ir a ellos, podemos hacernos una idea de cómo es su forma de vida, su forma de pensar, que religión pregonan y cuáles son sus intereses como sociedad entre otras muchas cosas, y gracias a ello hablamos de una cultura globalizada o mundializada.

La diversidad cultural es inevitable y deseable. Las culturas que permanecen encerradas en sí mismas están muertas. La expresión de la creatividad del espíritu humano es algo muy rico que trae consigo novedad y diversidad. Se debe preservar la diversidad de la cultura porque los seres humanos son diferentes. No todos piensan, sienten o actúan igual.3

Cada uno es libre de realizar sus actos humanos. Defender la diversidad de la cultura tiene que ver con la equidad, los derechos humanos, la autonomía, el derecho al placer. La humanidad avanza de manera prodigiosa hacia nuevos estadios de convivencia. Las nuevas tecnologías y el desarrollo de las comunicaciones vuelven cada vez más dinámicas las relaciones entre los ciudadanos del mundo. La era de la cibercultura ha llegado y nos plantea grandes retos que nos invitan a repensar nuestra historia cultural y nuestras actitudes contemporáneas frente a fenómenos culturales, además nos invita a conocer y disfrutar nuevas expresiones culturales.3

Es muy relevante la diversidad cultural de los pueblos, ya que como se menciona no todos tenemos la misma manera de actuar, de pensar o de desarrollarse en una sociedad, creo que esto es uno de los pilares fundamentales para que una sociedad pueda desarrollarse como tal ya que dicha diversidad es la que la hace rica y compleja la vez, ya que cada quien tiene mil maneras de expresarse y pensar y de allí es que radica la riqueza de una cultura, basándose en la tolerancia hacia sus miembros de su sociedad y respeto por las otras.

DE LA ECONOMÍA A LA CULTURA

La globalización o mundialización expresa una fase del capitalismo que se caracteriza por la libre circulación de flujos financieros y bienes económicos; expresa también una situación nueva en que la lógica de mercado se ha extendido a casi todo el planeta. Se trata de un proceso al que concurre un desarrollo incesante de nuevas tecnologías de comunicación e información, tecnologías que han quebrado la mano al tiempo, al espacio y a la geografía, generando lo que algunos llaman mercado-mundo y otros, aldea global. La globalización implica grados crecientes de comunicación e interdependencia en todos los niveles de la vida y entre las sociedades del planeta, lo que produce una transnacionalización inédita de los procesos históricos. En lo económico los estados nacionales han perdido soberanía; la liberalización de los mercados expone a cada país a una creciente interrelación y a efectos en cadena; en este contexto los resguardos se ejercen a través de la de la fortaleza de la propia economía o por la vía de bloques, pactos, mercados regionales o subregionales.4

Para algunos estudiosos este nuevo escenario seria la continuación histórica de procesos anteriores en el curso de la modernización de Occidente; de la internacionalización que se inicia con las navegaciones transoceánicas en el siglo XV, y de la transnacionalización y expansión de capitales de fines del siglo XIX y primera mitad del veinte. Para otros analistas se trata básicamente de un proceso autogenerado al interior del desarrollo capitalista, un proceso que sería comparable a una formación coralífera, en que no hay ningún poder ni afán hegemónico detrás: el coral crece porque tiene de por sí una conformación inherentemente expansiva; ese es un modo de vida. Para otros, en cambio, la globalización es un fenómeno fundamentalmente asimétrico, en que hay globalizadores, globalizados y también excluidos. Algunos incluso utilizan como sinónimo de globalización, “norteamericanización”4

ENTRE LO GLOBAL Y LO LOCAL

No pienso que la opción central sea hoy defender la identidad o globalizarnos. Los estudios más esclarecedores del proceso de globalizador no son lo que conducen a revisar cuestiones identitarias aisladas, sino a entender las oportunidades de saber qué podemos hacer y ser con los otro, cómo encarar la heterogeneidad, la diferencia y la desigualdad. (Néstor García Canclini)5

Punto muy importante el que resalta Néstor García, ya que como dice él, lo importante es saber cómo afrontar los problemas de desigualdad y diferencia que existe entre una cultura y otra, como lo explique anteriormente si no conocemos bien una cultura y no entendemos su forma de interpretar y ver el mundo, nunca llegaremos a desarrollar una identidad y establecer una globalización cultural ya que existen muchas dificultades de comprensión desde una cultura hacia otra, de una sociedad a otra, de un pueblo a otro pueblo.

Esto es muy importante, ya que, si los gobiernos tomaran en cuenta estas recomendaciones, pondrían más interés en consultar a sus ciudadanos los intereses que ellos presentan como pueblo o región y no tomarse las facultades de creer que es lo que ellos necesitan sin previo aviso o consulta.

Hay excepciones notables en cultura popular, y hay empresas de valor muy significativo. Pero fuera de la industria del espectáculo, se trata siempre de proyectos nacionales, y el impulso cultural no se toma en cuenta en los esfuerzos de integración regional, y menos ahora cuando el árbol totémico de la globalización reitera con métodos subliminales o con obviedades y avalanchas publicitarias, como lo nacional es en sí mimo, anacrónico, en la medida en que no navega por la Red. Y con todo, el panorama no lleva a conclusiones forzosamente pesimistas. Se sigue, y con profusión, pintando, escribiendo, haciendo teatro. Y se sigue leyendo y mucho más ahora desde la implantación del internet. (Carlos Monsiváis)6

Hoy en día el concepto de cultura como tal se está perdiendo ya que vivimos en un mundo altamente monetizado y que solo le importa generar dinero a toda costa; se está perdiendo los valores, se aprecia muy poco al arte, la tecnología nos vuelve muy dependiente a ella y hasta nos limita en muchas veces en nuestra forma de pensar y actuar ya que todo está tecnificado y solo aceptamos lo que las grandes empresas nos brindan, ya que ellas nos crean necesidades que ellas mismas satisfacen, también se ha perdido mucho el habido de escribir y esto en cierta parte podría ser devastador para la humanidad porque dicho habito nos ayuda a expresar y relatar