El Francesco Una Vida Entre el Cielo y la Tierra.

...

sus principales sueños realizados y después de su enfermedad soñó con curarse y ése fue el último deseo sin cumplir.

El guía espiritual le explica que cuando las personas están llenas de miedos, frustraciones, obsesiones, resentimientos, dudas, culpas, están cargadas de sentimientos negativos y lo que pida no llega porque vibra mal; y si está cargado de energía positiva alimentada de pensamientos positivos, de risa, de amor, de generosidad, de buenas acciones y de solidaridad, esta energía da una frecuencia más alta y puede ser escuchado por todos los seres de luz incluso el Universo está puesto a tu disposición y nunca jugará en contra tuya.

El enemigo más grande que tiene el ser humano y que no permite disfrutar la vida es El miedo. Francesco cada vez se sentía más liviano y su luz brillaba con más intensidad, su cuerpo flotaba, parecía que estaba a punto de aprender a volar.

Francesco le pide a Ariel que lo lleve al Parque de los Recuerdos, era un bosque con árboles de cristal, con todo el esplendor del verde, y todo el perfume de los veranos a la hora de la siesta, habitado por pájaros menos temerosos y más libres. Ahí en la copa de un árbol de cristal pudo verse como en película a la edad de 6 años camino a la escuela acompañado de su abuelo, recuerda que él lo cuidaba porque sus padres siempre estaban ocupados.

Otra escena la recuerda con tristeza la muerte de su abuelo, a quien extrañó por mucho tiempo. Ariel le explica que su abuelo tuvo que partir al cielo y volver a buscar un destino en la tierra.

Ariel le muestra una escena donde Francesco se encuentra en su trabajo y discute con su esposa porque no les dedica tiempo a ella y a sus hijos, se da cuenta y reflexiona que terminó pareciéndose y actuando como sus padres.

Ariel le explica que nosotros elegimos a nuestros padres antes de nacer por algún motivo en especial o por algún desafió o misión ya que Dios da un espíritu para que crezca, para llevar una experiencia de vida enriquecedora y que el amor de un padre hacia un hijo es incondicional.

Francesco regresa a su habitación y se queda dormido pensando en su familia.

Francesco se encuentra a un coro de ángeles todos ellos con una luz muy especial con alas grises de textura muy suave, y entre ellos conoce a su ángel de la guarda un ser simpático y cálido quien le dice a Francesco que a pesar de haber sido una buna persona de buenos sentimientos, respetuoso, honesto y generoso, sus actitudes hacia consigo mismo le frenaron para vivir mejor. En ese momento eligió su nombre y le llamó Pancho.

Un día Francesco se levantó con el sol más brillante y los aromas eran mucho más duces que los días anteriores.se percató que le había empezado a crecer alas en su espalda y se rió de sí mismo pensando “sí, con mis miedos, tuve algo de gallina, entonces las alas están muy de acuerdo conmigo, o con las acciones de