Reseña. El mundo de sofia. Primeros capitulos

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La primera hoja iniciaba con la pregunta ¿Qué es la filosofía? Esta explica de que a pesar todos tenemos gustos diferentes y debemos tolerar las diferentes opiniones de la gente, hay cuestiones que a todo el mundo deben interesar y esas son las que trata el curso. La pregunta ¿Qué es lo más importante en la vida? tiene diferentes respuestas según las circunstancias de la personas y sus varias formas de resolver lo que los aqueja, pero a pesar de tener varias necesidades cubiertas existe esta parte que evoca a las respuestas. “No se puede consultar una enciclopedia para ver si existe Dios o si hay otra vida después de la muerte.” La búsqueda de la verdad en el ser humano, permite que existan todas estas preguntas que atañen a la filosofía. Las siguiente hojas siguieron con comparaciones que permiten entender mejor la filosofía.

Tiempo después Sofía encontró otro sobre amarillo con varias nuevas hojas escritas a máquina. Estas se dirigían nuevamente a ella y venían con el título “Un ser extraño”. Estas le explicaban que para ser un buen filósofo hay que tener capacidad de asombro y por eso los niños pequeños tienen esa capacidad aunque con el pasar del tiempo esta se pierde. ¿A qué se debe? ¿Conoce Sofía Amundsen la respuesta a esta pregunta?, le indicaba la nota. El texto continuaba con el ejemplo de un recién nacido y como este maravillado por todo lo nuevo que ahora percibe, podría decir algo al respecto e intentar tocar objetos a su alrededor. Pero antes de que el niño haya aprendido a hablar bien, y mucho antes de que aprenda a pensar filosóficamente, el mundo se ha convertido para él en algo habitual. La carta después le propone a Sofía realizar un ejercicio mental que da a entender que la costumbre ocasionada por la constancia del tiempo nos hace perder la habilidad de asombro. Pero aunque las anteriores cuestiones son de suma importancia para el mundo, eso no convierte a todos en filósofos.

Un filósofo jamás ha sabido habituarse del todo al mundo. Un filósofo jamás ha sabido habituarse del todo al mundo. La carta le pedía a Sofía no acostumbrarse al mundo, a salirse de lo habitual para no ser indiferente ante lo que la rodea y por ello mismo decía que el curso sería totalmente gratis. Solo los filósofos emprenden ese peligroso viaje hacia los límites extremos del idioma y de la existencia.

Al terminar de leer las hojas, Sofía se percato que había muchas cosas que ignoraba, cosas en las que nunca había pensado antes. Sentía que ya no era una niña pero tampoco una adulta y finalmente comprendió que él desconocido o la desconocida la habían salvado de lo cotidiano para abrirse paso a ver el mundo como por primera vez

Cuando llego su madre al hogar, Sofía comenzó a cuestionarle con varias preguntas, que al parecer a su madre le preocuparon tanto para sospechar que su hija consumía drogas. Con las respuestas de su madre pudo corroborar que el filósofo tenía razón; cuando te haces adulto el mundo se convierte en algo asentado.

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