Una Reseña Bibliográfica Dimensiones Basicas de un Desarrollo Humano Integral

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buen rendimiento. En unos apartes del párrafo sobre Desarrollo Cognitivo, Inteligencia y Creatividad reseña que el desarrollo humano es como “una libertad mental, una atmósfera general, integral y global” que da paso a la formación desde las dimensiones del desarrollo humano. Según Miguel Martínez “El hombre es un ser en relación, por lo tanto la educación debe estar encaminada hacia la capacidad de tomar conciencia de su propia responsabilidad. Estos aportes y los de otros autores como Edgar Morín y Ludwig Von Bertalanffy “Vivimos en un mundo de sistemas” Martínez Miguelez los usa para afirmar su teoría de un “desarrollo humano integral que no se vea desde algunos ángulos solamente, sino que se enriquezca con el diálogo, con otros enfoques que los complementen”.

La dimensión del desarrollo Cognitivo, inteligencia y creatividad van ligados entre sí, no se aíslan y tienen que ver con un clima de libertad mental, un ambiente integral y global que estimula, promueve y valora el pensamiento original, autonomía, capacidad de raciocinio y la crítica fundamentada. Resalta vocablos como son: clima permanente, valorar, la palabra, hecho, status, opinión divergente, las cuales le han servido de soporte argumentativo para apoyar su teoría. Según Martínez, hoy en día se considera al sistema cognitivo y afectivo como uno solo y lo llaman estructura cognitiva-emotiva, citando a Pascal (Pensamiento73). Según él, en “la cultura occidental solo se cultiva el hemisferio izquierdo y sus funciones racionales, descuidando las intuición y demás funciones del hemisferio derecho, además de marginarse la parte emotiva y afectiva y su importancia en el contexto general”. Esto conlleva a una dicotomía entre lo racional y lo emocional, competitividad y miedo. Por lo tanto recomienda tener en cuentan la armonía entre las partes del cerebro, su equilibrio y sana distribución y que sea esto objetivo fundamental en la educación moderna. Muestra una diferencia marcada entre inteligencia y sabiduría. Según Miguel Martínez los docentes trabajan con la racionalidad apoyada en hábitos y rutinas mentales, cosa que no es así, pues el estado propende por la educación basada en la formación para el trabajo y el saber hacer en contexto.

El desarrollo psicológico, afectivo y social lo enmarca entre las áreas no comprometidas del cerebro, hablando de dos núcleos centrales: de la variedad de oportunidades de interacción y el nivel de logros alcanzados y el otro núcleo es la atmósfera afectiva, la cual le inspirará confianza y por lo tanto un desarrollo óptimo y sano. Cita a Pestalozzi quien también trató ese tema, a Carl Rogers quien está de acuerdo con la teoría de alimento y cariño (1972) Einstein con “La alegría de conocer y crear” Haciendo énfasis en la enseñanza con alegría, sin tensiones, ansiedades o amenazas para lograr el desarrollo humano integral.

En cuanto a lo moral, lo ético y de valores enclaustra a la educación humanista hacia el fomento de la autonomía, autodeterminación, resaltando los valores que le darán originalidad y creatividad, para ser un modelo a seguir. Tomando de Charlotte Buhler, Solschenitzin, la frase “la problemática de la democracia es la falta de ética en los partidos políticos, pues siempre buscan sus propios intereses”. Para Martínez vivimos en una sociedad de consumo y eso hace que existan antivalores; cosa que es cierto, pues día a día percibimos como la sociedad se deteriora por la falta de ética y valor social. Exhorta a que la educación debe centrarse en la formación humana, cívica y espiritual tanto en lo profesional como en la investigación.

Finalmente el desarrollo vocacional y profesional lo enfoca en la autogestión “hacer las cosas por cuenta propia, pero buscando siempre la relación de la información con el otro, recomienda no seguir modelos, sino crear nuevos programas y currículos, actualizarse permanentemente. Enfocar la educación hacia el entrenamiento, el logro de metas y adquisición de técnicas, aprender a hacer buen uso de la información y no solo guardar conocimiento, resalta de la educación moderna la colectividad, dinámicas de grupo basadas en la tolerancia y el respeto por las ideas del otro, para él la orientación vocacional debe ir enfocada a la visualización, la realización personal, los valores y el significado que tiene el área de trabajo para su vida.

Teniendo en cuenta todo lo anterior se puede afirmar que es un artículo con una estructura enmarcada en las bases teóricas de los referentes tomados por el autor, para llevar al lector hacia el desarrollo del tema, donde adquiere conocimiento y buscar la aplicabilidad de esta teoría de Martínez Miguelez, para un Desarrollo Humano Integral, en cuanto a las dimensiones básicas del

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