El impacto global del crecimiento en China Y Japón

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China y Japón importancia a Asia y el Mundo

dos gigantes económicos de Asia en conjunto representan dos tercios de la producción de la región y aproximadamente la mitad de su comercio, es decir, su rendimiento económico tiene un enorme impacto en toda la región. China es ahora uno de los principales socios comerciales para todas las grandes economías asiáticas. Mientras que una gran parte de las importaciones chinas desde la región son procesados ​​y re-exporta al resto del mundo, China juega cada vez un papel importante como consumidor final, especialmente en el caso de los productos básicos. desaceleración y alejarse de un modelo de crecimiento impulsado por la inversión de China ha golpeado posteriormente exportadores de materias primas particularmente difícil. En comparación con sus fuertes vínculos comerciales con el resto del mundo, China actualmente juega un papel menor en la inversión mundial transfronteriza, especialmente la inversión de cartera, aunque se espera que el rápido crecimiento de estos flujos a medida que China liberalice paulatinamente su cuenta de capital.

Mientras tanto, Japón sigue siendo una fuerza en los flujos de inversión y comercio mundial ya pesar de su entorno doméstico estancado. De hecho, la falta de crecimiento interno conduce posiblemente Japón para jugar un papel desmesurado en los flujos transfronterizos como oportunidades extranjeras son más atractivos para las empresas y los inversores japoneses. Japón es uno de los tres principales socios comerciales para la mayoría de las economías de Asia (y el primero para países como Indonesia y Filipinas). Por el lado de la inversión, a partir de 2011-2014 Japón tenía la salida anual de segundo más alto de la inversión extranjera directa en el mundo sólo por detrás de los Estados Unidos de acuerdo con el último Informe de Inversión Mundial de las Naciones Unidas (tal vez como era de esperar, fue recientemente superado por Hong Kong, una eje de salida de china continental). Además, a partir de 2013, los bancos japoneses volvieron a tomar la iniciativa en la banca internacional , un papel que no han jugado en dos décadas.

Los riesgos de deterioro, pero la reforma estructural en curso

Por el momento, existen considerables incertidumbres que enfrentan ambas economías. Los efectos secundarios de un crecimiento más profundo que la esperada desaceleración de China y más débil en Japón son dos de los principales riesgos que afectarán a las perspectivas de crecimiento de Asia y mundial en los próximos años. Los dos países enfrentan desafíos diferentes, pero tienen algo en común. Ambos han reconocido la necesidad de reformas estructurales para lograr un crecimiento económico estable y sostenible. En el caso de China, estas reformas implican una mayor dependencia de la demanda interna y el consumo como fuente de crecimiento, más empleo en el sector servicios, y la mejora de la productividad en toda la economía. Para Japón, la administración Abe ha dado prioridad a una serie de políticas para frenar la caída de la población en edad de trabajar (por ejemplo, mediante una mayor participación de las mujeres y los trabajadores extranjeros) y para obligar a las empresas japonesas a invertir más (o aumentar los salarios) en lugar de sentarse en grandes montones de dinero en efectivo. Ambos gobiernos se están moviendo en un territorio desconocido usando una variedad de herramientas-de la política monetaria y fiscal a los cambios legales y de presión para impulsar las reformas difíciles culturales para alterar la estructura de la economía. Si bien es demasiado pronto para juzgar su éxito, si tienen éxito, el resto de Asia es probable que obtener grandes beneficios.