Obsolescencia programada. Todo comienza cuando algún producto falla, en este caso daré el ejemplo de una impresora.

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La tragedia afecto seriamente a FORD para poner su modelo FORD T al alcance del consumidor FORD lo produjo en masa , a partir de un diseño básico que daba garantías de durabilidad, la estrategia fue todo un éxito y a principios del siglo XX la mitad de los autos en el mudo eran “FORD T”.

Para superar a Ford, los competidores General Motors apostaron por un modelo diferente, en lugar de hacer auto con las mismas similitudes al FORD T apostaron por el “Modelo Anual” con una variación de formas, tamaños y colores. Su objetivo era que los consumidores cambiaran de auto cada 3 años, la estrategia funciono he hizo que la productividad de FORD callera y que los consumidores vieran el modelo T anticuado y obsoleto, en 1927 FORD retiro el modelo del mercado. A partir de entonces adopto la misma estrategia General Motos con nuevos modelos cada año y la industria del automóvil creció demasiado tanto que acelero la economía.

En 1933 en Nueva York, Bernard London sugirió hacer obligatoria la obsolescencia programada, se plantaba que todos los productos tuvieran una fecha de caducidad después de la cual se considerarían legalmente muertos.

20 años más tarde en los años 50´s la obsolescencia programada regreso pero ya no se trataba de obligar al consumidor si no de seducirle, la gente se ya no se fijaba en la calidad del producto, estaban más enfocados en el aspecto de las cosas, de lo nuevo, bonito y moderno. El diseño y el Marketing seducían al consumidor para que deseara siempre lo más moderno

“La obsolescencia programada depende del consumidor, nadie obliga a ir a una tienda y comprar un producto, van por su propia voluntad es su elección”.

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