Resurrecion TICA CONTEMPORÁNEA

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de ¡a angustia (1844); Tratado de /a desesperación (1844); Estadios en el camino de

la vida (1845); Migajas filoso ficus (1845); Poslescritos no científicos (1846).

Según James Collins. uno de sus biógrafos, hay una serie de hechos decisivos en

la vida de Kierkegaard: su formación en manos de su padre, su desgraciado amor por

Regina Oísen, su choque con el público y la prensa, su abierta lucha contra la Iglesia

danesa...

En su primera etapa (1834), cuando empieza a escribir sus Diarios, Kierkegaard

sufre una influencia de los poetas, novelistas y filósofos románticos, como Novalis,

Hoffman y los Scnlegel; percibe en ellos una gran fuerza que podría servir para con-

trarrestar la influencia racionalista de Hegel e impedir que su época sucumbiera com-

pletamente a estas teorías, fin efecto, la Filosofía de Kierkegaard presenta una reacción

contra el racionalismo absoluto de Hegel, el cual no logra dar cuenta de la existencia

concreta e individual. Incluso, para marcar su oposición a Hegel, Kierkegaard se nom-

bra a sí mismo "el antihegeliano".

Kierkegaard explica la existencia, en lo que se refiere a su autenticidad, a partir

de tres estadios fundamentales que son:

a) Estadio estético. Las características de lo que Kierkegaard llama el estadio estético,

se encuentran en personajes típicos, cuya vida gira a través de estados anímicos como:

la sensualidad inmediata, la duda y la desesperación.

Así, Don Juan, Fausto y el Judío errante, son ejemplos vivientes de la esfera esté-

tica. El Don Juan de Mozart encarna la sensualidad, el reino de la carne que se enfren-

ta al reino del espíritu; representa el modo de existencia que resulta cuando los principios

éticos y religiosos del orden se alejan de un individuo y éste se vuelve eventualmente

contra ellos; Fausto vende su alma al diablo para agotar todas las experiencias posi-

bles. "En realidad —sostiene Collins— Kierkegaard considera a Fausto como el sím-

bolo del hombre occidental, que queda sin dirección buscando el plan de su propia

vida, después de haberse rebelado contra la Iglesia Católica";41 Ahsaverus, el Judío

errante, debe concebirse errando por el mundo por toda la eternidad insensible, indi-

ferente por la ausencia completa de la esperanza en Dios y en el hombre.

El estadio estético se caracteriza porque aquí el individuo se convierte en prisione-

ro de la búsqueda del momento placentero, un momento que nunca puede realizarse

a satisfacción plena. Esto explica el tedio, la inquietud, la inestabilidad y otros aspec-

tos secundarios de la vida estética, que revela el análisis fenomenológico. Kierkegaard

describe estas fases de la vida estética detalladamente y con gran habilidad psicológi-

ca y literaria.

h) Estadio ético. Lo que caracteriza el estadio ético es el orden; se trata de una vida

racionalizada, planeada, que se ciñe a reglas universales y necesarias.

Kierkegaard ejemplifica el estadio ético en el matrimonio, donde el hombre ad-

quiere responsabilidades.

Sin embargo, el estadio ético es limitado, precisamente por su racionalidad v por

su dependencia de formas universales; para el hombre ¿tico es más valioso el deber

que el amor, la ley moral que la religión, la existencia social que la divinidad.

El símbolo de la vida ética es Sócrates; "Sócrates, en el fondo racionalista, no

podía tener ninguna 'noción del pecado', ni que la salvación del hombre requiere a

un Dios crucificado. El modelo de Sócrates, el modelo del hombre ético en general,

es insuficiente porque no es el verdadero modelo o no es el modelo paradójico de la

revelación en Cristo".42

Oponiéndose al acento romántico en el lado escondido de la vida, en sus fuerzas

misteriosas, en los lagos oscuros y en la opacidad del alma, el espíritu ético insiste

en la lucidez del propio conocimiento. Está seguro de haber seguido con éxito la má-

xima socrática y de que tanto la compresión de sí mismo como su dominio son la re-

compensa por modelar su conducta según el bien moral."'1

Recuérdese que Kierkegaard es un pensador religioso (existencialista cristiano);

por ello la autenticidad de la existencia la encuentra en el estadio religioso. »•-'

c) Estadio religioso. Es el estadio superior a todos, ya que se establece por medio de

la fe, que es una relación personal y subjetiva con Dios.

El símbolo de la vida religiosa es Abraham, caballero de la fe. En Abraham se