La verdad cuestionada

Primer Parcial

Materia: Pensamiento Científico

Profesora: Teresita Karina Biglia

Alumna: Lucía Virginia Stero

Carrera: Martillero Público, Corredor y Administración de Consorcios

Comisión: 1 E

Nombre del Ensayo: “La Verdad Cuestionada”

Fecha de entrega: 23/05/2022

Introducción

Pensar la verdad como una única verdad, es un error. Siempre pienso que  la cantidad de seres humanos que somos es la misma cantidad de verdades que existen, en definitiva cada ser humano tiene su verdad de las cosas. Somos sujetos (subjetivo) con la capacidad de dar sentido a las cosas (objeto) por eso cada ser humano tiene diferentes pensamientos o concepciones. En esta alternancia de ideas, el ser humano se va desarrollando, empapándose de conocimiento y saber.

Claro está que cuando hablamos de la búsqueda de la verdad en el conocimiento científico, el objetivo es llegar a que dicha verdad sea la más verosímil posible. He aquí  la gran disyuntiva: ¿Es posible concebir que sola exista esa verdad que responda a todas las dudas de la ciencia?

En este ensayo trataremos de despejar este interrogante, acercándonos lo más posible a entender cuáles son las dificultades que la ciencia tiene para llegar a la verdad a través de los métodos científicos.

Cuando comencé a estudiar esta carrera, durante el curso de ingreso de comunicación oral y escrita, en una de las actividades nos presentaron un texto para analizar. El texto se llamaba “Cerebro rico, mente pobre” de Javier Bernácer María, Investigador del Grupo “Mente-Cerebro” del Instituto Cultura y Sociedad (Universidad de Navarra) de fecha 09/11/2015. Ya el nombre era atractivo y me parecía interesante el tema a abordar. En el texto se planteaba la idea sobre dos grandes proyectos que estudiarían al Cerebro humano. La propuesta Americana, se centraba en desarrollar nuevas técnicas para observar el funcionamiento del cerebro en acción. La visión Europea pretendía ser la visión neurocientífica del proyecto genoma humano, que tanto interés despertó en su momento. La gran meta era conseguir una simulación computacional del cerebro, para así alcanzar una mayor comprensión de este y saber cómo tratar mejor enfermedades mentales. Ambos proyectos reconocen la necesidad de sumar esfuerzos y presumen de su carácter interdisciplinar: no sería raro encontrar en la misma habitación  a genetistas, químicos, ingenieros, médicos, expertos en ciencias de la información etcétera discutiendo el mejor abordaje experimental y la interpretación de los resultados.

Hasta aquí todo marchaba bien, hasta que el autor, plantea un problema en el proyecto de investigación. Según Él el proyecto está incompleto. El autor plantea la idea de que si bien es sumamente necesario contar con un ambiente interdisciplinar para el estudio del cerebro, se olvidaron de una parte de él, la mente. No tomaron en cuenta el estudio de la mente para estudiar en profundidad el cerebro. Cerebro-Mente / Mente-Cerebro, no pueden separarse, deben estudiarse en su conjunto. De esta manera el autor dice: “creo que cualquier persona comprende hoy día que el cerebro y mente van de la mano, y que la psicología y amplios campos de la filosofía  - filosofía de la mente – de la acción, de la ciencia, teoría del conocimiento, ética etcétera, son disciplinas adecuadas para tratar de entender la mente humana.”