En la casa Torres-Posse lo orgánico liga e identifica a la obra con su sitio y sus usuarios y tiene a su vez todo lo que la casa del hombre debe tener: calidez, identidad, lógica funcional y constructiva.

...

La modernidad criolla

Eduardo Sacriste uno de los grandes maestros de la arquitectura argentina. Se destaco con su larga labor de enseñanza en casi todas las universidades del país y en muchas del extranjero, formando a varias camadas de arquitectos. Fue uno de los introductores ocales del Movimiento Moderno, y lo que es más importante es que fue uno de los pocos en “traducirlo”.

En sus casas tal como en la Torres-Posse es evidente el respeto por la realidad geográfica y por las tradiciones espaciales y constructivas de Noroeste, sumado a la valoración de la historia, de la arquitectura popular, su obra es el ejemplo de una importancia sobresaliente de la modernidad de su propuesta, hablamos de una Modernidad propia, ya no ajena

Contexto histórico

Sacriste rendido admirador de Le Corbusier y con la influencia de Wright, de quien absorberá con naturalidad su inspiración organicista, ocupaba un rol fundamental en la enseñanza en la Escuela de Arquitectura de Tucumán, por esos tiempos luego del cierre de la Bauhaus por el nazismo, dos casas de altos estudios americanas tomaron a su cargo la difusión del ideario arquitectónico modero: Harvard y Tucumán. A ese punto la importancia de la influencia de Sacriste junto con otras prominencias de la arquitectura nacional.

Fue encargada por un comitente quien no tenía demasiada alternativa. Sacriste dijo: “para nosotros no es tarea sencilla asesorar a los clientes sobre cuál es el proyecto apropiado para Tafí” mostrando claramente su intransigencia profesional por la forma de diseñar que tenia.

La vivienda es unifamiliar es adaptable a cualquier tipo de familia, con buena accesibilidad tal como se reconocen sus obras muy funcionales y cálidas.