Españoles contra Mexicas: Armas en la conquista de México

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La ausencia de filos cortantes fue una desventaja de las armas de los indios con respecto a los españoles, ya que sus armas de hierro hicieron mucho daño en los cuerpos mal protegidos de los nativos americanos.

Por último tenemos una forma de ataque, que más que un arma era una estrategia utilizada por los indios de México para acabar con las tropas españolas. Esta estrategia se conocía como "las galgas" y consistía en hacer rodar piedras por una colina o peñasco para aplastar con esta a los españoles que venían ascendiendo. Bernal Díaz del Castillo cuenta sobre esto lo siguiente :

[...] y como comenzamos a subir el peñol arriba, echan los indios guerreros que en él estaban tantas piedras muy grandes y peñascos, que fue cosa espantosa como se venían despeñando y saltando [...]

No todas las tribus americanas enfrentaron desnudas a los españoles. Los cueros curtidos, las armaduras de oro, metal muy débil para ser efectivo como defensa, y los sayos de algodón o escaupil son algunos ejemplos de los tipos de protección que usaban los indios en América.

El escaupil mexicano consistía en un sayo acolchado de algodón que podía tener diferentes tamaños. Algunos solo cubrían el pecho, otros bajaban hasta las rodillas y por último estaban los que cubrían todo el cuerpo. Para completar la protección , utilizaban cascos de madera que imitaban cabezas de animales. También había otros más sencillos del mismo material de escaupil. [pic 3]

La defensa que proporcionaba el escaupil era tal , que muchos españoles lo adoptaron en lugar de las corazas, porque - según ellos - era más liviano y no olía mal[3].

Los mexicas también poseían escudos llamados "chimalli", los cuales eran de madera y redondos, de un diámetro máximo de 80 cm y estaban recubiertos por cueros o telas pintados con un mosaico que siempre tenía un sentido determinado como la jerarquía militar, la orden y las hazañas del guerrero. En la parte baja del escudo colgaban plumas de colores que ondeaban al viento cuando el guerrero se movía.

Las anteriores eran las armas utilizadas por los indígenas mexicanos que enfrentaron a los españoles en la conquista de la nueva España. Ahora analizaremos las armas españolas para ver cuán real era su ventaja con respecto a los pobladores del territorio americano.

Para comenzar con las armas españolas hablaremos de los animales. Caballos y perros crearon un gran terror entre los indios, quienes jamás en su vida habían visto criaturas como estas y desarrollaron un gran temor hacia ellos en los primeros momentos del contacto.

Hablemos inicialmente del caballo. Hernán Cortés escribió: “No teníamos, después de Dios, otra seguridad sino la del caballo”.

La frase de Cortés demuestra la importancia del caballo en la conquista de México. El caballo era un animal enorme, muy fuerte que podía aplastar a los indios en la batalla y estos jamás en su vida habían visto uno. Primero lo asociaron con un dios y pensaban que eran los caballos, los que gobernaban a los hombres que los montaban. En más de una ocasión Cortés aprovechó ese pensamiento para obtener favores de los aterrados indios. Cuando más adelante descubrieron que no eran dioses y les perdieron el miedo, los guerreros de Moctezuma preferían matar a los caballos antes que a los hombres, ya que un caballo hacía más daño que un español a pie.

Fue tal la importancia del caballo que muy rápidamente alcanzó precios elevadísimos. Mientras una espada, una daga o una lanza no costaba más de diez pesos de oro, un caballo podía alcanzar fácilmente los 1000 pesos.

Otro animal muy importante en la conquista fue el perro. Los perros infundían terror en los indios, debido a los destrozos que causaban y a la violencia de sus ataques. En América no había perros como los europeos. El perro americano era pequeño y mudo, así que el ladrido del los lebreles traídos de Europa aterraba a los nativos.

Los perros eran una parte importante de la hueste. Iban adelante y eran los primeros en entrar en batalla. Donde no se podía ir con caballos por el terreno, se utilizaban los canes. Estos no pelearon en la conquista de México, posiblemente por las ventajas que el terreno ofrecía a los caballos. En la hueste de Cortés había 16 hombres montados.

Las armas que - posiblemente - decidieron la conquista fueron las espadas. La espada del conquistador español era liviana y de hoja estrecha, tenía un metro de largo y era de doble filo con punta aguda. Esta espada se utilizaba tanto para cortar cono para atravesar al enemigo. Se le conoce como "espada ropera" y es la evolución de la espada ancha de la Edad Media. Más delante las espadas de doble filo se convirtieron en estoques, considerados más nobles, pero en América no fueron funcionales y los soldados no los utilizaban.[pic 4]

La espada era obligatoria para todos los hombres de armas. Era tan importante que los indios y negros tenían prohibido su porte. Las pocas veces que lograron robar alguna, no sabían esgrimirla y les era de poca utilidad.

Parte del gran valor que poseía la espada radicaba en que era precisa y los indios no tenían ninguna defensa contra ella, puesto que el escaupil no los protegía de su corte y realmente contribuía con masacres como la que describe una crónica azteca en la que cuenta como un grupo de españoles mata brutalmente a unos indios cortándolos en un recinto cerrado.[4]

Las dagas y los puñales fueron también muy útiles a los españoles, cuando la pelea llegaba a las manos y estaban muy cerca como para usar la espada.

Otras armas de acero muy útiles a los españoles fueron las lanzas, las cuales eran propias de los hombres a caballo. Había dos tipos de lanzas: la jineta y la de ristre.

La lanza de ristre fue casi inútil e innecesaria, así que la lanza que más utilizaron los caballeros fue la lanza jineta.

Se utilizaba como la lanza de un picador en el toreo y su función mas que matar era separar la filas de indios para que la infantería pudiera atacar a espadazos. En algunas ocasiones la lanza jineta se utilizó con la misma técnica de la lanza de ristre, más con la intención de herir que de matar, ya que los indios la cogían pero no eran capaces de quitársela al español de las manos y este los arrastraba hasta que la soltaban. Cuando el objetivo estaba muy lejos lanzaban la lanza como una jabalina.

La mayor desventaja de las armas con pintas y filos metálicos era que el clima de las selvas americanas las dañaba rápidamente y no tenían