Introducción a la Ingeniería Industrial LA REVOLUCIÓN INDUSTRIAL

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Al mejorarse los medios de locomoción por mar y tierra las mercancías se difundieron por todo el mundo multiplicándose los mercados e incrementando su comercio internacional al tiempo que se acentuaba la brecha entre países pobres abastecedores de materia prima y países ricos abastecedores de productos elaborados. El carbón conocido desde la antigüedad se convirtió en el siglo 18 en la fuente energética más importante hasta el descubrimiento del petróleo. A fines del siglo 19 y comienzos del siglo 20 se da la denominada “segunda revolución industrial”, caracterizada esencialmente por la utilización de la energía eléctrica, el perfeccionamiento de la mecanización y la creación de una industria dedicada a la elaboración de maquinaria y herramientas estandarizadas. En países como Italia, Suiza y Suecia que no disponían de yacimientos de carbón obtenían la energía de los altos de agua, energía hidráulica, hasta que finalmente la sustituyeron por una nueva energía, la eléctrica. La electricidad permitió importantes invenciones en los medios de comunicación como la telegrafía, la telefonía con Alexander Graham Bell en 1876. El estudio de las descargas eléctricas en los gases hizo que se descubrieran los rayos catódicos la emisión de los rayos X en 1895 por Wilhelm Conrad Rontgen.

En 1900 los esposos Curie descubren el “polonio” y el “radio”, los dos primero elementos radioactivos. Samuel Finley Breese Morse y Cyrus West Field descubren el telégrafo submarino por cable, el italiano Guillermo Marconi inventa la telegrafía sin hilos de la que se derivó la radiofonía inventada por el norteamericano Lee De Forest a finales del siglo 19 y el alemán Paul Gottlieb Nipkov fue el primero en construir un aparato de televisión. Thomas Alva Edison invento el alumbrado eléctrico, la lámpara incandescente conocida como foco, y el fonógrafo. El cine fue inventando en 1895 por los hermanos Lumiere de nacionalidad francesa. Los estudios y experimentos realizados por Rudolf Clausius facilitaron la invención del motor de explosión o también llamado de combustión interna que utiliza la energía producida por la combustión de mezclas gaseosas, esto se aplicó a la tracción de carruajes y nació el automóvil, al perfeccionarse esos motores por el alemán Rudolf Disesel, durante el siglo 20 pudieron aplicarse a dirigibles desarrollados por Fernando Zeppelín, a los aeroplanos con los hermanos Wright y a los submarinos por el irlandés John Philip Holland. Así tenemos que en cuanto generación de energía al carbón le sucede la electricidad y a esta el petróleo, el que provoco una de las más grandes industrial del mundo contemporáneo de gran trascendencia económica y política.

Al final de la segunda guerra mundial aparece la energía atómica como un arma de destrucción, pero su aplicación a objetivos pacíficos abrió la posibilidad de dar grandes beneficios para la humanidad, pero esta innovación industrial tuvo que esperar para ser desarrollada ya que era más costosa que los otros sistemas conocidos incluidos los de variedad y frecuencia de honda, que aplican según sean diseñados en un punto seleccionado luz o calor, ejemplo de esto es bisturí laser y el horno de microondas, aunque se cree que las investigaciones científicas en un futuro resolverán este problema. Por lo que actualmente su aplicación más lógica es como combustible de las naves interplanetarias. Un breve señalamiento a los avances tecnológicos es a la electrónica y la informática, que en base a la energía eléctrica y hondas son hoy en día el soporte de la comunicación en el sentido más amplio de la palabra. Así pues el éxito de la Revolución Industrial estuvo sustentado desde diversos puntos de la economía y la cultura, pues si la sociedad supo adaptarse y recibir con expectación todos aquellos avances y desde el punto de vista económico se estaba en una época de bonanza. La apertura de nuevas rutas comerciales como el “Canal de Suez” en Egipto, en 1869, permitió un comercio más fluido entre Europa Y Asia.

También hubo un aumento muy notable en las vías ferroviarias, lo cual provoco una carrera para conectar las dos costas de Estados Unidos, y por otra parte, los principales puntos de comercio de Europa. Por último, la invención de las líneas telefónicas a larga distancia permitió conectar al instante a distintos puntos del mundo agilizando de este modo el comercio. El ritmo de aquellos años parecía por momentos frenético. Era una carrera contrarreloj por ser primero en Inglaterra, Estados Unidos y Francia habían adquirido ventaja. Pero aquel imperialismo aquella supremacía, no hizo sino crear más tensiones entre determinados países. Alemania e Italia se veían relegados y pronto surgieron los conflictos políticos. Por consecuencia se dio la primera guerra mundial lo cual trajo muchas tragedias, pero mientras esta duraba también fue un apogeo para la industria armamentista ya que debido a los conflictos, los gobiernos pagaban con creces a las personas que fabricaran armas que le ayudaran a ganar la guerra, en ese entonces inventores, artesanos e ingenieros que se dedicaban a la investigación y otros campos de la ciencia o economía vieron a esta como una fuente de ingresos para seguir con sus investigaciones o negocios, muchos visionarios amasaron fortuna por sus patentes en armas.

A finales del siglo 17 el campesino incapaz ya de ganarse la vida en el campo y privado de sus tradicionales por su trabajo como artesano busco trabajar en la industria, las fábricas y las minas les ofrecían un modo de vida precario pero seguro, además de que la paga la recibían en dinero y no en especies, con esa mira miles de campesinos emigraron a las ciudades sin darse cuenta que en realidad no hicieron más que cambiar una servidumbre por otra, las leyes disposiciones que los liberaban de la servidumbre también les dieron la libertad de morirse de hambre. Careciendo de propiedades y no teniendo valor sus conocimientos rurales en las ciudades dependían completamente para subsistir del capitalista que era el dueño de los medios de producción y este podía tomarlos o despedirlos a su antojo y respecto a su salario les pagaba según les convenía. Las nuevas fortunas amasadas por la nueva burguesía industrial contrastaron con los bajos niveles de vida de las grandes masas obreras lo que desestabilizo a la sociedad inglesa. La máquina desplazo al hombre al ser capaz de realizar el trabajo de varios obreros en un menor lapso de tiempo, creando así un ejército de desempleados, y los obreros que lograron conservar sus empleos se vieron agobiados con hasta 15 horas de jornada diarias con el salario reducido dado al exceso de demanda por un trabajo.

Además para pagar menos y en visto de los fácil que resultaba la