Las peñas folclóricas como espacio de sociabilidad de jóvenes opositores políticos durante el régimen militar

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Bajo esta premisa, es que comienzan a emerger nuevamente las peñas folclóricas (las cuales tuvieron su momento de apogeo en la década de los ’60 y fueron clausuradas en 1973 tras el golpe de Estado) para revitalizar el tan afamado punto de encuentro de cientos de personas que estaba en desacuerdo con el actual régimen.

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El pensamiento de juventud opositora

Los primeros años del régimen militar fueron los más difíciles para la sociedad en conjunto, ya que se vieron envuelto en un nuevo sistema de administración para el país.

En respuesta a este cambio muchos grupos sociales, entre ellos los jóvenes opositores buscaron la manera de movilizarse y resistirse al sistema neoliberal que implementaba el gobierno de Augusto Pinochet por lo cual intentaron encubrir un proyecto país. A partir del Régimen y la nueva organización de la sociedad se fueron creando nuevas identidad y comunidades.

La Historiadora Argentina Sandra Molina en su tesis sobre “Las peñas folclóricas en Chile (1973-1986). El refugio cultural y político para la disidencia” se refiere a como la juventud disidente al régimen se organizaron con una mayor intencionalidad cultural en sus acciones. Donde sus diferentes formas de manifestaciones y de agitación social fueron dando énfasis a una mayor intencionalidad política en contra de este sistema autoritario.

Las Peñas como Refugio

Con la dura situación y la destrucción de alguna organización política, social o cultural por parte del régimen hicieron que actores sociales como los jóvenes y adultos opositores se refugiaran en espacios privados que ayudaran a volver a ordenar los grupos y su lucha.[pic 5]

Cuando las peñas folclóricas comenzaron a resurgir estas sirvieron como nuevas formas de expresión y juntamente un lugar de refugio contra la resistencia.

Tras la campaña del terror impuesta en la sociedad por el gobierno, acérrimos opositores del mismo en su mayoría los mismos músicos que participaban en las peñas folclóricas, se dieron a la tarea de subsistir. [pic 6]

Por esto surge la idea de iniciar un punto de reencuentro entre quienes fueron cantores y quienes se sentían reprimidos por el régimen. Es aquí donde vuelven a aparecer las peñas folclóricas.

“La decisión de armar una peña, concurrir e incluso ser parte del elenco estable de artística obedece no a una, sino a múltiples razones que se concadenan. En dicha determinación, influye directamente la posición social o la situación particular que aqueja a cada involucrado, producto de vivir en un país donde gobierna un régimen que restringe las libertades.” (Bravo G. , 2009)