Autobiografia.

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Siempre hay algo que le da magia a tu vida, que le da un toque diferente a tu existir no sabes de qué manera llega ni en qué momento pero hace que seas especial, la música vino a mi no solo para sacarme de la monotonía si no para que viera la vida de una forma distinta, es la felicidad disfrazada de un piano. Esa musa estuvo y estará conmigo hasta el último día de mi vida si Dios me lo permite, llenando vacios y permitiéndome expresar por medio de ella, envuelto en notas y melodías que me acompañan día a día.

Todo esto lo entendí un día de febrero de 2014 sentado frente al piano, de esos días en que todo te ha salido mal y simplemente buscas olvidarte de todo o al menos buscar una salida. Ya era de noche y decidí poner mis dedos en el piano aun sabiendo que los sonidos que iba a expresar por medio de él serian de tristeza y confusión, no era necesario que lo tocara para entender la melodía que iba a salir de allí, entre teclas negras y blancas me empecé a mover, comprendiendo el sentimiento natural de sentir la música sin siquiera oírla, sonidos que mueven, ondas que repercuten, sensaciones táctiles que te envuelven. En ese momento supe que dependía de mi lo que quisiera sentir, ya que la música me brinda tantos estados y tantas melodías que no alcanzo a dimensionar todo lo que puedo a hacer con ella, es ese alimento del alma, ese primer suspiro de amor.

Ahora estoy aquí, escribiendo una autobiografía, feliz de estar vivo y poderla redactar, también triste de recordar tantas cosas que hacen lo que soy ahora; me encuentro estudiando medicina veterinaria y zootecnia, lo que me hace feliz y me conecta mas a la vida, me llena de expectativas y me da satisfacción el imaginar mi camino enfocado en esta carrera.

Se fueron muchas personas, la guerra, los años, las enfermedades se llevaron poco a poco a quienes más apreciaba, sus rostros e historias quedaran plasmadas en mi corazón para siempre.

Antes me preocupaba de que carrito escoger, o que historia inventarme, hasta del coco en las noches, del grito de mi mama para que me entrara, ahora son diferentes los afanes de la vida, me preocupo día a día por ser un profesional, por tener con que defenderme en este mundo y poder tener una familia a la cual pueda brindarle lo necesario para ser felices, seguiré paso a paso escribiendo mas paginas a este libro, aunque duela regresar a los primeros capítulos y querer retroceder el tiempo, la tinta con que escribo mi vida no se acaba hasta que mi corazón no deje de palpitar, gracias Dios por ser mi guía y mi protección con las fuerzas de mi alma anhelo con un día poder verte.