Cultura precolombina: símbolo de nuestra identidad costarricense.

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Otro punto a retomar, es que el pueblo costarricense se ha conocido por ser un pueblo trabajador, una nación que se esfuerza por mantener relaciones de intercambio con otros países y a la vez dando a conocer el prestigio de ser costarricense. “En la lucha tenaz, de fecunda labor, que enrojece del hombre la faz; conquistaron tus hijos - labriegos sencillos - eterno prestigio, estima y honor.” Dicha estima y prestigio, se ven marcadas desde la vida de trabajo de nuestros aborígenes, la cual desde su sencilla forma de vivir viene rodeada de identidad.

Por ejemplo, para resolver sus necesidades diarias, los grupos precolombinos fueron conociendo su entorno habitable, pasaron de ser nómadas a sedentarios. Encontraron dónde podían abastecerse de recursos y existiera agua. La organización social de la comunidad, tanto en la familia como en toda la población, permitía que existiera ese trabajo en equipo y solidaridad. Participaban de la siembra, recolección de frutos, cacería, procesamiento de alimentos, la cría de animales, elaboración de utensilios y herramientas de trabajo; eran parte de su vida cotidiana laboral. Esto fue dando que tanto hombres como mujeres, se especializaran en una de las funciones, dando origen a los jefes, lideres espirituales, enterradores, agricultores, comerciantes, guerreros y artesanos especializados.

“¡Salve, oh tierra gentil! ¡Salve, oh madre de amor! Cuando alguno pretenda tu gloria manchar, verás a tu pueblo, valiente y viril, la tosca herramienta en arma trocar.” La lucha por defender el territorio que hoy nos pertenece, no viene tan solo con la época colonial o con la quema del mesón por nuestro gran héroe nacional. En épocas precolombinas también existieron héroes como Pablo Presbere o el Rey huetar Garabito que lucharon contra lideres españoles por defender sus tierras. Formándose así un pueblo valiente y viril que desde sus inicios ha luchado por la nación.

“¡Salve, oh patria!, tu pródigo suelo dulce abrigo y sustento nos da; bajo el límpido azul de tu cielo, ¡vivan siempre el trabajo y la paz!” La identidad de la cultura precolombina también se ve representada por medio de su modo de habitar y vestir. La Patria dulce abrigo y sustento les dio. Los medios naturales les proporcionaron materiales para construir sus viviendas dando un auge en sus principios arquitectónicos. Como por ejemplo la técnica del bahareque, que levantaron paredes con barro y caña, también los pisos de arcilla quemada y las paredes de caña con techos de palma.

También para su vestimenta la naturaleza les proporcionaba ese abrigo. Los vestidos y mantas eran de algodón o cortezas de árboles y el algodón se teñía con tintes naturales. Aún en los vestidos, los indígenas dejaron puesto su simbolismo artesanal. Tanto hombres como mujeres, participaban en la elaboración de los mismos.

Para concluir, como lo menciona la letra del Himno Nacional: ¡Vivan siempre el trabajo y la paz!” Adentrándonos en conocer más sobre la cultura precolombina y la forma de vida de nuestros aborígenes, nos damos cuenta de nuestra verdadera identidad. De un pueblo que concebido en principios de igualdad, logró mantener un legado. Que desde épocas memorables, existieron mujeres y hombres que con duro esfuerzo y sencillez fueron formando la Costa Rica del presente. Tal vez con el tiempo, los cambios en la sociedad y demás, muchas veces se ha desequilibrado esos valores que nos definen el ser costarricenses. Pero si tan solo volvemos la vista y recordamos toda esa cultura de antaño y los principios que nuestros aborígenes crearon, recordaríamos de dónde surgimos y cómo a través de los nos mantiene con esa identidad propia.