El autor divide a la globalización en tres partes: la globalización como fábula, como perversidad y como otra globalización (una posibilidad).

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Gracias a la aglomeración exponencial y diversificación de las masas se gana una verdadera sociodiversidad.

Se trata de una nueva globalización sostenida por la universalidad en la vida cotidiana de cada hombre. Ésta deja de ser una idea abstracta de filósofos y pasa a ser realidad.

- En pocas palabras, el autor ve a la globalización como una fábula para los oídos de las personas que sólo causa enfermedades para la humanidad.

Pero, las mismas bases de la globalización actual podrían servir para otros objetivos si fueran puestas al servicio de otros fundamentos sociales y políticos.

Yo estoy de acuerdo con él, ya que no tenemos idea de lo que en verdad ocurre tras las decisiones y proyectos políticos. Nos muestran una parte de lo que en realidad está pasando y lo llaman justicia, sin darnos a nosotros la posibilidad de juzgar sus decisiones.

Además, concuerdo con que el deterioro de esta humanidad, con su corrupción es gracias a la globalización.

Pero, no tengo las esperanzas como él de la posibilidad de otra globalización. Para mi esta sociedad está demasiado corrupta como para cambiar y retomar una nueva historia.

- Para el autor, el comercio injusto se originó en la época del colonialismo (pasado colonial), donde los europeos conquistaron América y los indujeron a producir mercancías básicas, con el fin de procesarlas y consumirlas en Europa. A cambio, les traían de Europa productos manufacturados. Los estadounidenses siguieron el mismo modelo con las que, en su día habían sido colonias españolas en América Central y del Sur.

En Uganda, por ejemplo, azotaban a los campesinos que no cultivaban su cuota de cafetales. Les obligaban a pagar impuestos que debían abonar en efectivo en cantidades que sólo podían ganar vendiendo sus cultivos al contado o trabajando en las plantaciones y las minas. Se presenta el maltrato y la sobreexplotación de la mano de obra. Abuso y estafa.

Esto también se puede ver en el documental visto en clase (“Oro Negro”) donde no se establece un precio justo, y quienes establecen el precio son los compradores.

Además, se le puede llamar comercio injusto cuando hay varios intermediarios en un negocio. En el documental, se muestra como los hombres que estaban ayudando a los africanos intentan eliminarlos.