LA DIMENSIÓN MORAL DE LA VIDA HUMANA.

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Si te gustas a ti mismo anticipas que te sucedan cosas buenas. Gustarte no significa que sea perfecto o tampoco que te gusten tus defectos y sin embargo saber que puedes cambiar y mejorar si quieres. Pero para gustarte empiza por aceptarte a ti mismo.

Al mismo tiempo que ocurre el proceso de individuación los adolescentes aplian su circulo de convivencia donde los amigos adquieren gran importancia, ya que ofrecen la oportunidad de compartir las experiencias que viven , los adolescente se sienten comprendidos, aceptados y pueden platicar abiertamente sus preocupaciones.

REGLAS Y NORMAS EN LA VIDA COTIDIANA

La convivencia en la vida cotidiana significa que las personas compartan espacios y tiempo en los que cada una se desenvuelva de acuerdo con sus ideas y necesidades.

Los padres, los tutores, los maestros y, en general, los adultos transmiten las normas básicas de comportamiento que sustentan la organización familiar y enseñan a los niños a convivir con los demás. Cuando las normas son establecidas solo por quienes ejercen la autoridad para quien no las cumpla, se dice que hay una organización autoritaria porque las normas son impuestas, no hubo dialogo o acuerdo que favoreciera el convencimiento de todos para cumplirlas.

Cuando el establecimiento de reglas y normas se basa en la comunicación y el dialogo, es posible decidir de manera democrática la forma de organización. Educar implica que los alumnos se desarrollen como personas autónomas y responsables, que adquieran valores y actitudes que les permitan convivir con los demás con base en los principios democráticos de tolerancia y dialogo.

De acuerdo con la disciplina establecida para la enseñanza tradicional, al alumno solo le correspondía obedecer al profesor y a las autoridades escolares; sin embargo esa idea ha cambiado por el concepto de convivencia de la comunidad escolar. Elaborar normas escolares sin autoritarismo ni imposiciones y sin perder de vista el propósito de la escuela y del profesor es educar, favorece la convivenvia y la participación armonica.

Para el establecimiento de normas propicien una vida común pacifica y constructiva es necesario asumir compromisos que implican a su vez tres actitudes fundamentales: tolerancia, solidaridad y respeto

Todas las normas sociales se establecen con la finalidad de favorecer la organización de la sociedad, per hay personas que no las cumplen aunque por eso pueda aplicárseles con una sanción. Las normas sociales regulan distintos tipos de conducta que puedes ser observables o no. Las normas morales regulan la conducta interna de las personas y se espera que su cumplimiento se haga por convicción, por que en realidad es algo que se siente y se desea hacer. Las normas jurídicas o leyes también regulan la conducta externa de los individuos.

Las normas jurídicas son obligatorias para todas las personas aun cuando no estén de acuerdo con ellas.

La importancia de las normas surge de la necesidad de regular las relaciones entre las personas, respetando su libertad para propiciar un ambiente armónico

LOS ADOLESCENTES Y SUS CONTEXTOS DE CONVIVENCIA

EL SIGNIFICADO DE SER ADOLESCENTE EN LA ACTUALIDAD

La adolescencia es la etapa de la vida en la que las personas se enfrentan a constantes cambios, entre ellos a la necesidad de definirse a si mismas. La construcción de una identidad propia y de un proyecto de vida es una tarea que cada uno enfrenta de manera personal. El patrón de comportamiento en la adolescencia tiene una estrecha relación con la forma de vida de la comunidad a la que pertenecemos y a las condiciones que prevalecen en nuestro país y en el mundo.

La edad adolescente tiene diferentes interpretaciones en las sociedades de acuerdo con las expectativas que se tienen de las personas una vez que dejan la infancia. Esta definición de lo que se espera de los adolescentes les da seguridad sobre sus acciones porque implica el establecimiento de nuevos derechos y responsabilidades.

Cada persona tiene una identidad propia y nuestro deber es respetar el derecho de todos a ser diferente y solidarizarnos. El reconocimiento del valor de cada persona por si misma nos permite a estar dispues tos a aprender de esa diversidad de ideas, formas de pensar y de expresarse. Una de las riquezas de la vida democrática es precisamente reconocer el derecho a ser diferente y a manifestar libremente esas diferencias, las cuales no deben ser motivo de conflicto, sino de respeto, comprensión y aprendizaje.

Cada generación se distingue por crear formas especiales para relacionarse y comunicarse. La música puede proporcionar ideantidad a generaciones enteras.