The Human Age: The World Shaped by Us.

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la de humanos. En el caso del rinoceronte blanco se puede tomar el DNA de la piel de un animal muerto reciente, convertirlos en IPS y añadir una dosis de ciertos genes humanos; luego con la esperanza de fertilizar huevos de un rinoceronte fémina, producir más y rescatar la especie.

En la cuarta parte del libro, Ackerman dice que el uso de herramientas y tecnología se ha convertido en una parte innata de nuestro ser, en como nos extendemos más y más en nuestro entorno. Dice que hoy día sabemos y podemos verificar la existencia de criaturas que no podemos ver con facilidad en libros, en películas, etc. Nuestro antiguo entendimiento de la naturaleza tiene un nuevo nivel, casi todos los días un nuevo cambio. Tambien dice que el mundo de la nanotecnología es una de las maravillas de la superficie inimaginablemente pequeñas, llenas de propiedades extrañas e invisibles a simple vista. Por primera vez en la historia humana estamos principalmente experimentando la naturaleza a través de la tecnología de intermediario que proporciona más detalles al mismo tiempo que el aplanamiento de la experiencia sensorial. Se dice que nuestros ancestros tenían mejor vista para observar y prestar atención que la que tenemos. Porque hoy en día prestar atención como si tu vida dependiera de eso, podría ser una pesadilla y requeriría esfuerzo. Otra cosa es que según algunos estudios Google esta afectando nuestra memoria de forma escalofriante. Porque es más fácil olvidar algo que sabemos que podemos encontrar en la internet, y tendemos a recordar donde esta la información localizada, que de lo que significa la información. Por otro lado, se habla de que las plantas tal vez no poseen un cerebro, pero podrían ser diabólicamente inteligentes, manipulativas y viciosas. Las plantas han comenzado a enviar mensajes de textos en busca de ayuda. Esto de las plantas enviando mensajes a los humanos tal vez parezca nuevo, pero las plantas descontentas han estado charlando entre sí. En este capitulo también se habla sobre los robots, y como sería si actuarán como nosotros los humanos. Por ejemplo, ponen a dos robots a tener una conversación como la que tenemos nosotros. Según la lectura no hay duda de que el robot de la sociología y el robot de la psicología saldrá como disciplinas importantes, porque es una cosa interesante que sucede cuando los robots son conscientes de si mismo. Al igual que las personas, que a veces tienen mal impresión de sí mismo, bastante sesgada para crear robot delincuentes, y podríamos empezar a ver los rasgos paralelos a los problemas psicológicos en los seres humanos.

En la quinta parte, la última, del libro, nos habla sobre el principio de la medicina regenerativa es mágicamente simple: si un corazón o la mandíbula están dañados, ya sea cualquiera le enseña al cuerpo que vuelva crecer otra o imprimir uno nuevo sano el cual el cuerpo aceptará.

Habla de como nuestros antepasados se han ​​adaptado a la naturaleza de acuerdo con los límites de sus sentidos. Pero sobre los eones, que hemos ido ampliando nuestros sentidos a través de visionarios e invenciones con estilo y hemos redefinido la forma en que nos involucramos al mundo, también la forma en que pensamos de nosotros mismos. También habla de los cyborgs y las quimeras. Como ejemplo de cyborg nos menciona a Oscar Pistorius el primer doble amputado en competir contra corredores sin discapacidad en los Juegos Olímpicos. Las quimeras humanas son conocidas como gemelos y dan una idea de lo confuso que un mundo lleno de clones podría ser, pero los gemelos son demasiado numerosos para considerar como algo raro. Otra cosa que nos dice la autora es que el noble objetivo de los proyectos del genoma humano es para el uso de esos conocimientos para encontrar maneras nuevas de entender, tratar y curar la enfermedad. La única cosa más improbable que el propio ADN, el diseño de la naturaleza para la construcción de un ser humano, es nuestra capacidad de decodificarlo. También nos habla que de acuerdo con la teoría de la selección natural de Darwin, los niños nacen con un mapa genético que ha evolucionado a lo largo de milenios. La evolución darwiniana que nos enseña que los cambios genéticos en el ADN se desarrollan con lentitud granular durante milenios y que ningún individuo puede borrar o reescribir en su vida.

Por último, lo extraordinario es que no sólo estamos cambiando el nombre de nuestra edad, estamos en el umbral de la redefinición de nosotros mismos como un tipo de animal completamente diferente a los que nos hemos imaginamos. Durante años hemos pensado que el ADN dice toda la historia. En cambio nos encontramos con que cada persona es un espectáculo biológico de tres trillones de microbios y un billón de células humanas. La autora dice que es increíble que no anden ni se desintegren mientras caminamos.

Para concluir, la autora dice que forjemos una nueva era geológica, nosotros somos un conjunto de diferentes tipos de animales de cualquier planeta conocido, uno es capaz de reinventarse así mismo y a su mundo, y mantenerse para sobrevivir, a pesar de todos los giros que se nos presentan en la vida diaria que cualquier criatura que ha tenido que hacer malabares. Dice que nos entendemos en niveles mucho más escalofriantes. Esta no es solo la era humana, esta es la era cuando empezamos a ver por primera vez, el interlazo del planeta, y desemascarar nuestros propios

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