9 VECES EL ASOMBRO

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V:

De la historia y cómo se escribe

“Que la Historia, o más bien las historias, luego se guardan en telas bordadas, difíciles de leer para los no iniciados en sus secretos geométricos. Son “las telas de la memoria” y quienes las leen nunca cuentan la misma historia dos veces. Por lo que se ha llegado a pensar que están vivas. Y que la memoria, como las nubes, como la Historia, no deja de moverse y toman formas extrañas, sorprendentes.”

“Que con esas telas cosen muchas veces bellísimos Kaftanes y dyelabas que se usan sólo en aquellas ocasiones rituales muy especiales que ameritan “vestirse de nube” y merecen su Historia al viento.”

“… Que la Historia tiene “sazón”: ese toque muy personal, corporal, de quien la prepara contándola, y que con su sazón toca el paladar de quien la escucha.”

“Y en todos los rincones de Mogador, de la gente que escucha historias con atención desmesurada, con fijación hipnótica, se dice que está comiendo nube.”

Asombro VI:

De la piel, sus dictados y sus mutaciones.

“Dicen que cuando alguien enloquece es que algunas líneas de esa escritura se enciman, se desarreglan, se meten donde no debían.”

“Algunos sostienen que el amor es una forma de locura producida también por escrituras accidentadas en la piel que crean en el cuerpo enamorado la ilusión de que el desarreglo de por lo menos dos personas se anuda obteniendo el mismo punto de fuga.”

“Dicen que su escritura, su signo, es todo el cuerpo en su extensión y en movimiento. Cada cuerpo es como una palabra sonámbula que camina y se vuelve otra a cada paso, a cada instante.”

Un destino escrito en la piel, una vivencia tatuada más adentro, dentro de la piel, que se distingue como lunares. Con este tatuaje describe la vida del portador, su futuro. Y con éste también hay quienes obran más allá de lo “supuesto” debido y cambian a la persona, la vuelven loca y posiblemente enamoran. Hay que evitar hacer cambios, pues podríamos dictar o mutar la piel.

© Annie Leibovitz 

Asombro VII:

El séptimo asombro te narra la experiencia mística y maravillosa que existe y se crea al abrir un libro en Mogador, de hecho al abrir un libro en cualquier sitio, mundo y vida… es más que palabras, uno puede sentir cada descripción, puede sentir exacta y precisamente cada sensación que sucede al abrir un libro, como te recorre el alma, como se mete en ti, en tu vida y se vuelve parte de tu mundo, te seduce, te envuelve y a veces hasta te vuelve loco, esa sensación irreal y fantástica, ese viaje interno a otros mundos, esa experiencia que no puede describirse y si debiera sólo puede decirse que es algo etéreo.

Éste asombro nos resultó absolutamente maravilloso, es la perfecta descripción de la experiencia divina de leer y adentrarse a nuevos mundos.

Citas:

• “Cada libro abierto siempre está listo para danzarnos por dentro.”

• “…que a los libros de poesía les brotan manos invisibles que se meten muy a fondo en tu cuerpo mientras los lees”.

• “…los libros se extienden más allá de sus páginas y siguen escribiéndose como sonámbulos en la piel y en la carne de quienes los leen.”

© David Agenjo

Asombro VIII:

El octavo asombro habla sobre la música de Mogador, sobre sus habitantes, sobre la música que habita en cada uno, en cada movimiento y sonido que realizan, sobre la música que existe en cada esquina de esa mística ciudad, sobre la música visual… las danzas presentes en cada contacto, suspiro, mirada, relación; la música que se crea dentro de Mogador y dentro de cada ser, música multicolor, música viva, vibrante.

Citas:

• “…nadie toca su propio corazón sino el de otros…”

• “Un puerto tan lleno de música por todas sus esquinas…es música para la mirada.”

• “Hacer música con el cuerpo nos limpia por dentro y por fuera.”

• “Hay personas que se mueven y suenan como interpretación del agua. Son seres cambiantes, inapresables, deseables. Dejan en los demás un sentido de sed profunda. Otros son coléricos y voraces como la música del fuego. Al estar cerca de ellos se escucha que el propio cuerpo crepita, se consume, arde.”

© Lilián Arzate 

Asombro IX:

En Mogador el acto sexual va más allá de lo físico, de lo obvio, en Mogador el sexo es visto casi como magia, es comprendido, es disfrutado… no es un acto más, se convierte en algo que va más allá de lo que se encuentra entre piernas que es nada comparado con lo que realmente es, vida, pura vida y razón, el acto sexual sólo es un viaje al ser interno de cada amante, un viaje explosivo, alucinante, paraísos creados por cuerpos apasionados, pura vida, momentos catárticos.

Citas:

• “Dicen que el placer inmenso que pueden dar esas partes diminutas comparadas con el inmenso delirio interno que las sustenta es como un espejismo, un signo de otra cosa, una señal de que lo importante está más adentro y hay que lanzarse a buscarlo en el cuerpo del amante.”

• “…las vaginas se convierten en flores hermanadas con el sol…”

• “Tarde o temprano todas las palabras en la boca toman o evocan la forma sustancial del sexo.”

© David Agenjo

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