Ensayo El esclavo.

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Sin embargo también hay que recordar que como decía el libro siempre tenemos la oportunidad de cambiar nuestros pensamientos, y nuestra actitud ante la vida y como queremos verla.

CAPITULO 4.

A esta altura de la historia, el libro toco un tema que me parece bastante atractivo, el tema de la compasión. Cabe resaltar que también como lo menciona el libro comparto que la compasión no es lastima, la compasión es ponerse en los zapatos del otro y a veces muchas personas sufrimos de una insensibilidad diaria hacia nuestros semejantes porque no tenemos compasión, somos egoístas como personas y solo nos preocupamos por nosotros, e algunas ocasiones podemos llegar tener algo de compasión cuando vemos a un enfermo o alguien que no puede ser feliz porque su salud no se lo permite, niños con enfermedades terminales como el cáncer, o personas que no tiene las facultades físicas para controlar su cuerpo, etc. Pero somos tan egoísta con nuestras actitudes ante los demás que no podamos dar ese amor que tanto necesitan esas personas ya sean familiares nuestros o personas que no conocemos.

La verdadera y autentica compasión radica en ponerse en el lugar del otro, entender su sufrimiento, sus penas y hacer algo para ayudarlo a superar eso, ese sentimiento, esa necesidad de ayudar a los demás solo nace cuando aprendernos a amarnos a nosotros mismos y entonces empezamos a aprenderá a amar a los demás, mientras sigamos cegados por nuestros traumas, miedos, inseguridades, nunca podremos tener la visión ni la capacidad emocional para poder ayudar a los demás ya nosotros mismos cuando lo necesitemos.

El confort también nubla esa parte de nosotros y no es hasta que tenemos una experiencia propia que cambia nuestra manera de ver las cosas y nuestros sentimientos hacia los demás.

CAPITULO 5.

De lo que más destaca de este capítulo es el hecho de cómo se profundiza en el tema de las creencias.

Las creencias son algo bien importancia en la vida de una persona y la manera en como esta decide vivirla. Muchas de las creencias que tenemos nos son inculcadas desde chicos, ya sea en la mayoría de los casos por nuestros padres o por otras personas en el caso de aquellas personas que no tuvieron padres, sin embargo ya a partir de cierta edad, nosotros decidimos nuestras creencias como parte de nosotros, a final de cunetas somos libres de creer y pensar lo que queramos, por eso hay distintos tipos de religiones en todo el mundo, esa libertad de pensamiento también es un regalo maravilloso que nos ha sido dado, sin embargo hay que tener mucho cuidado con la creencias que tenemos ya que esas serán bases fundamentales como guía de nuestra vida, y si son creencias débiles y que no respetan la vida de los demás, ni se basan en el amor, podemos llegar a convertirnos en personas muy vacías en nuestros sentimientos, con pensamientos mundanos, y sentimientos que solos e enfocan al beneficio propio, e incluso podemos llegar a perder el respeto por la vida de nuestros semejantes, sin remordimiento ni conciencia en nuestras acciones y estar dispuestos a pisotear y causar sufrimiento a los demás con tal de conseguir lo que queremos. Si se analiza esto, se puede ver que es un concepto muy delicado, nos podemos dar cuenta de la gran importancia de nuestras creencias. Ellas son las que nos pone límites cuando estamos yendo demasiado lejos por un camino erróneo, las creencias son nuestro guía para mantenernos en un camino de amor, y si nos alejamos ellas son las que nos traen de regreso.

Es por eso que si nuestras creencias no tienen una base sólida en el amor hacia la vida y hacia nuestro entorno no podremos nunca sentirnos plenos. Además de que nuestras acciones tendrán consecuencias en este mundo y en el que sigue después de la muerte.

También me gusto el libro resalta el concepto de que la felicidad es una actitud, una forma de ver a vida, que aunque en los momentos difíciles parece que la olvidamos o se nos dificulta ver la vida de esa manera pero para eso tenemos esa fortaleza interior que se nos dio a cada uno de nosotros cuando fuimos creados, es parte de nosotros, de nuestra esencia, solamente hay que encontrarla porque n los momentos difíciles parece que se pierde pero solo tenemos que escucharla y buscarla y eso es lo que nos ayuda a salir adelante por más dura o triste que puede ser la situación, es otro de esos regalos que se nos fue dado, la fortaleza interior, que combinado con nuestras creencias siempre van a estar ahí para resurgir cuando nos sintamos perdidos, enfurecidos y deprimidos.

El ser humano ha perdido el camino a lo largo de los años, el poder económico y la posición ante los demás, el control sobre los bienes del mundo y las cosas sin importancia es lo que para el hombre se ha convertido en lo más importante hasta ahora, cuando lo que debemos perseguir y considerarlo más importante es nuestra capacidad en dar lo mejor de nosotros a los demás, no nuestra capacidad de manejar a los demás a nuestra voluntad porque tenemos los medios para hacerlo, como son los políticos y algunos empresarios de alto nivel.

“Las cosas no te pasan a ti, solo pasan”

Esto en particular fue una frase que me encanto del libro, porque es una verdad que muchas veces el ser humano se engaña, y le echa la culpa a los demás por las tragedias que le suceden, muchas veces son por cosas que no hicimos bien y cuando vienen las consecuencias nos hacemos las victimas como si alguien nos lo estuviera haciendo a propósito y en ocasiones nos volteamos en contra de nuestras creencias porque pensamos que ellas son las responsables de nuestras desgracias cuando somos nosotros mismos, sin embargo en otras ocasiones es más complicado como por ejemplo el hecho de perder a un hijo a una edad joven por algún accidente o por alguna enfermedad te lleva a sumergirte en un dolor tan grande que te vuelve en contra de tus creencias por ser injustas con tu hijo y contigo al arrebatártelo de tal manera, esa persona que le diste la vida y que lo amabas con todo tu ser. Sin embargo aún en esas situaciones hay que entender la importancia de la frase que radica en aceptar que las cosas malas que pasan en tu vida y en la de los demás no fueron hechas con la intención de lastimarte, solamente pasan como consecuencia de la vida, nos enfermamos porque nuestro cuerpo es vulnerable y puede morir pero nuestro espíritu nunca morirá, así que la enorme reflexión que me dejo el libro es que no hay que echarle la culpa a un ser supremo por nuestros desgracias, simplemente aceptarlas como son y entender que esta vida funciona de esa manera, que la felicidad eterna sin