LA INVESTIGACIÓN EN EDUCAClON Y PEDAGOGÍA EN COLOMBIA

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Así, educación y pedagogía han desempeñado un papel protagónico en el aporte a la formación de los individuos y en la construcción de sociedades,dotando, de las herramientas y conocimientos, a los privilegiados del proceso educativo, que les posibilite, si es su compromiso, poner los avances de la ciencia al servicio de la mayor parte de miembros de la sociedad y que las decisiones tomadas generen equidad en oportunidades para la sociedad en su conjunto. Respondiendo de ésta manera a las necesidades de cada momento histórico e interpretando el contexto.

En tal situación, se define un nuevo rol dinámico y activo que debe caracterizar a docente y alumno/a, estableciendo la investigación como parte fundamental de la formación e incorporando las operaciones mentales tanto a la práctica de la enseñanza y como del aprendizaje.

No obstante, se manifiesta preocupación por lo que puede ser denominada práctica educativa repetitiva, que desconoce los avances en la metodología educativa, careciendo de motivación y dejando de lado la introducción de la didáctica como dinamizador del aprendizaje; frustrando el deseo de niños y jóvenes de explorar nuevos conocimientos y negándole a la sociedad la posibilidad de tener individuos con mayor formación para abordar las tareas y retos que le impone.

Se observa falencia en la formación docente, en lo referente al dominio de los saberes teóricos, la aplicación de la metodología de la investigación científica, la disposición, entusiasmo y capacidad pedagógica para incentivar a los alumnos. Más aún si tenemos en cuenta que la tarea esencial de la educación es enseñar a pensar con sentido creativo e innovador, desarrollando el intelecto y las facultades superiores del ser humano para enfrentar los retos de la sociedad. La validez del saber pedagógico se constituye en un modo de racionalización de la experiencia vivida por los actores del aula y la escuela.

La problemática pedagógica del conocimiento científico debe entenderse como parte del sistema educativo y del sistema social global al cual está articulado. Por lo tanto, es necesario que el sistema educativo, acompañado de mayor autonomía didáctica, esté al nivel de los demás sistemas, es decir, del económico, socio político, cultural e informativo. Lo anterior, además de posibilitar el equilibrio de los diferentes sistemas, abrirá el espacio a la educación para que oriente el devenir de la sociedad; especialmente si estamos haciendo referencia a una educación crítica y liberadora. Como sentenció Simón Rodríguez “enseñen a los niños a ser preguntones, para que, pidiendo el porqué de lo que se les mande hacer; se acostumbren a obedecer a la razón, no a la autoridad como los limitados, no a la costumbre como los estúpidos”.

Debemos tener claro que el conocimiento y la investigación científica difieren de acuerdo al contexto, al momento histórico, al interés de quienes toman las decisiones para invertir en educación e investigación, y especialmente, para propiciar una educación liberadora.

En tal sentido, se requiere una pedagogía que enseñe a pensar, a analizar, a adquirir capacidad de crítica y cuestionamiento, a problematizar en búsqueda de soluciones; que incorpore la práctica de la investigación científica, orientando el proceso de enseñanza aprendizaje hacia la transformación de la naturaleza, de la sociedad, del pensamiento, los principios del conocimiento humano y los métodos pedagógicos. Al respecto sentenció Paulo Freire “Enseñar no es transferir conocimiento, sino crear la posibilidad para su producción o su construcción. Quién enseña aprende al enseñar y quien aprende enseña al aprender”.

Colombia ha cambiado un poco en la atención científica, dándole oportunidades a los jóvenes para que se vinculen a trabajar con la ciencia y para la ciencia, dándole estímulos de reconocimiento personal y salarial; se están dando algunos avances en el apoyo científico, ya que anteriormente se dejaban escapar grandes talentos científicos produciéndose lo que lamamos fuga de cerebros, aunque, “A mediados de 1993, la Junta Directiva de Colciencias aprobó la creación del Sistema Nacional de Estímulos a los Investigadores basado en las propuestas anteriormente mencionadas. Con el fin de dar mayor solidez jurídica al Sistema, la Ley General de Educación aprobada a mediados de 1994, incluyó un artículo específico relativo a la creación de ese programa. Posteriormente, mediante el decreto 1742 de 1994, el Gobierno estableció formalmente el Sistema de Estímulos, y Colciencias abrió la primera convocatoria a finales de 1994”. (http://www.interciencia.org/v21_02/ciencia_tecnologia.html tomado el 19 de Mayo del 2017)

Todo lo que atente contra nuestra integridad física y moral, no debe ser creado y si por error se descubre que ese adelanto científico y técnico en realidad se puede utilizar con fines perversos, debiera ser destruido o no darlo a conocer para dañar a la humanidad. Muchos científicos y técnicos con el fin de conseguir un beneficio lucrativo o de poder, dejan a un lado los principios éticos y con ese descubrimiento o adelanto destruyen a los demás.

Muchos en su ignorancia saben que podían verse afectados negativamente por que no solamente están comprometiendo los valores y principios éticos si no su integridad física y mental; sin embargo es muy pertinente el postulado del ICFES que afirma El desarrollo social y económico cada vez más intensivo en conocimiento, requiere recursos humanos altamente calificados y exige del sistema educativo, en particular del nivel superior, una mayor capacidad para absorber e incorporar los cambios continuos de la ciencia y la tecnología.( Carta LCFES Nº 26 , pág. 1, 1995).