Se internan a la historia de manera que al fin conozcan la verdadera cara de Colombia

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Se han tomado esto como un juego de suerte, como a un rompecabezas, o como una simple veintiuna así se han tomado nuestros líderes el gobierno de este país, al pueblo y a sus recursos como puntos estratégicos para ganar una partida narcisista en donde el único propósito es el de su beneficio; los ciudadanos son conscientes que Colombia tiene “dueños” pertenecientes a aquellas familias desde la época en la que se dio el cubrimiento de América, puesto que nunca permitió desarrollar aquel legado propio de los indígenas nativos de las tierras colombianas, “ los dueños del país partían del supuesto colonial de que esa comunidad era inferior y ello no les permitió entender que los procesos educativos, que el respeto por su creatividad cultural, que la construcción de una leyenda compartida, eran el camino para conformar una sociedad grande y respetable” (Ospina, 2013. Pg. 30).

Colombia desde sus adentros pie a gritos un respiro, desde años se ve inmersa en conflictos, sin sentido ni propósito “liberales y conservadores”, “la principal diferencia entre los partidos colombianos era que los conservadores iban a misa de cinco y los liberales iban a misa de ocho”. (Ospina.2013. Pg. 17). Esa es la desnuda verdad de los principios de un de los conflictos más polémicos en Colombia. No conformes con eso atravesaban por un arduo proceso de negociación para lograr alcanzar la paz que aun hoy en día se vive. Una paz que derrocha sangre por dinero y poder.

Algo queda claro. El fracaso del liberalismo y del partido conservador. Sin tener ideas para defender se dedicaron luchar por votos convirtiendo se es simples politiqueros. Permitieron todo para agradar a los posibles electores y dejaron al país infestado de sus luchas sin sentido. Si se habla de algunos personajes que intentaron marcar la historia se puede nombrar a López Pumarejo, A este personaje le quedó grande su Revolución en marcha para terminar sometido a los terratenientes, Eduardo Santos le puso pausa a la Revolución en marcha y la apagó, Gaviria le jugó a la apertura y Belisario dejó de gobernar cuando la toma del Palacio de Justicia. Pareciera que Colombia no tuviera salvación.

“Cada colombiano tiene que decir su verdad”. (Ospina. 2013. Pg. 236). Se debe reconocer que la democracia tiene una deuda abierta con el pueblo colombiano, en términos de educación, salud, empleo, un trato digno y con respeto, entre muchos otros que constituyen una gran lista. No hay cómo seguir negando que la guerrilla tuvo razones para rebelarse, y que ello no justifica ni la atrocidad de la guerra ni la degradación de los métodos de todas las partes. Si sólo las guerrillas se hubieran degradado, podríamos persistir en la invocación a la legitimidad y a la justicia, pero en las condiciones de la guerra colombiana se impone una nueva oportunidad para todos, y a partir de allí, una nueva severidad.

Se plantea un recorrido a los largo de la historia, planteando desde una postura crítica, sin sentimientos pero real; esto con el fin de mostrar la trascendencia que han tenido y aún tienen las grandes guerras que han vivido en carne propia el país, afectando a los ciudadanos y además culturizando a las personas para vivir en un estado de conflicto en el cual los gobernantes acogen de antemano la corrupción y el abuso de poder, los cuales terminan siendo fieles compañeros del diario vivir de los colombianos.

BIBLIOGRAFIA

- http://revistas.udistrital.edu.co/ojs/index.php/cpaz/article/view/5666/9333/pdf

- http://comunicaciones.utp.edu.co/noticias/24848/reflexiones-sobre-el-libro-de-william-ospina-pa-quese-acabe-la-vaina/pdf

- http://www.rebelion.org/noticias/2014/3/181879.pdf

- https://www.ruor.uottawa.ca/bitstream/10393/31529/1/Peralta-S%C3%A1nchez_Andr%C3%A9s-Felipe_2014_thesis.pdf