Silvina Ocampo Poesía completa I

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y es mérito de la autora mostrar como la realidad cotidiana esconde una naturaleza desconocida, naturaleza que se va relevando en las narraciones a través de las contradicciones y las ambigüedades que se producen entre la mirada del narrador y los hechos representados.

En estos cuatro poemas Silvina le habla a la luna, al sol, la primavera, al rio y las rosas. Les habla con cierta fascinación y mucho amor, demostrando admiración por la naturaleza. Aunque en su biografía la poeta confiesa tener “pasión por la naturaleza” no fue difícil darse cuenta de ello ya que en sus poemas se ve la exaltación en la belleza de elementos naturales.

Además utiliza una disciplina del ritmo acompañada por regresos a los mismos temas en tonos distintos, habla sobre la naturaleza en cada uno de los poemas y también utiliza una lengua afinada y original con un aparente formalismo. Dicha característica es notable en los poemas que seleccione ya que la autora repite palabras, presentes en muchos otros poemas inclusive, pero con distintas connotaciones según el contexto.

En resumen, los principales temas de estas obras poéticas de Silvina Ocampo son el amor, las plantas, los animales y la vida cotidiana. En ellos tiene su lugar la pasión, la dicotomía de la pasión en dos sentimientos tan contradictorios como son el amor y el odio. Cabe destacar también que Silvina supo combinar los temas más sencillos con una riqueza expresiva que pocos logran, y consigue de una manera única la descripción exacta de los paisajes combinándola con esa especie de esbozo narrativo que aparece en varios poemas suyos.

En su labor poética Ocampo desnuda su alma y eso está explicito para quienes la leen. Por ello, su legado no puede dejar de ser reconocido ni mucho menos quedar a las sombras de una repisa, sino animarse y animar a su disfrute.

PEQUEÑO GRAN ENCUENTRO CON LA POESÍA

Para poder acercar la poesía a los niños se me ocurre la siguiente propuesta.

“Mes de poesía”

Se propone a los docentes de todas las áreas leerles poesía a los alumnos todos los días.

La idea es que durante un mes, se realice la lectura de uno, dos o tres poemas (dependiendo de la extensión de los mismos, la disposición del docente, tiempo, etc.) al día. El docente cortara la clase 15 minutos antes de finalizar y procederá a leer un poema que habrá seleccionado previamente. El proyecto podría plantearse de la siguiente manera: la primera semana la actividad se realizara durante la primera hora, la segunda semana durante la segunda hora, la tercera en la tercera hora y la cuarta semana en la cuarta y última hora del día. De esta forma nos aseguramos de que esta rotación sea favorable para que todos los docentes participen de la propuesta y la poesía abarque e inunde de arte todas las horas sin importar la asignatura que se imparta.

Al presentar el proyecto se sugiere a los docentes el poemario Poesía Completa I de Silvina Ocampo para que puedan extraer de ahí los textos que compartirán con el alumnado. De todos modos, para no limitar a los docentes en su labor, se los invitara a buscar otros autores y libros que crean adecuados para sus alumnos. Los criterios de selección dependerán del grupo al que el docente se dirija, es decir, edad, grado, capacidad de comprensión, etc. También pueden proponer a sus alumnos que busquen y sugieran títulos para compartir con sus compañeros.

Para poder lograr este propósito será necesario el compromiso del cuerpo docente y buena predisposición de los alumnos, quienes podrán exponer sus opiniones, ideas y sentimientos que les surjan a partir de este pequeño gran encuentro con la poesía.

Incluso si este proyecto llega a buen fin, podría realizarse todos los meses cambiando el género literario y así tendríamos un julio de terror, un agosto de fantasía, un septiembre de poesía…