Colombia; su resistencia a la devaluación y al préstamo del FMI.

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Existen hoy en día organizaciones como El Fondo Monetario Internacional que puede proveer ayuda y asesoría para las economías de los países necesitados, tal como lo explica la subdirectora Gerente, Fondo Monetario Internacional (FMI), Nemat Shafik: La razón clave por la cual el FMI ha mantenido su relevancia es que su estructura de gobierno político se ha ido adaptando, si bien lentamente, a los cambios en la economía mundial. También cuenta con un personal independiente y con una constitución (su Convenio Constitutivo) que permite que el FMI adopte una perspectiva a más largo plazo.

El FMI ofrecía a Colombia entrar en un programa llamado Servicio de Crédito Stand-By, un servicio que “proporciona asistencia financiera a los países de bajo ingreso con necesidades de balanza de pagos a corto plazo. El SCS se creó en el marco del nuevo Fondo Fiduciario para el Crecimiento y la Lucha contra la Pobreza (FFCLP) como parte de un conjunto más amplio de reformas para lograr que la asistencia financiera que brinda el FMI sea más flexible y se adapte mejor a las diversas necesidades de los países de bajo ingreso, inclusive en épocas de shocks o crisis. El SCS brinda un acceso elevado, tiene una tasa de interés menor, puede utilizarse en modalidad precautoria y hace hincapié en los objetivos de reducción de la pobreza y crecimiento del país” (FMI, 2014).

PROPUESTA DE SOLUCIÓN DE CASO

En situaciones como en el caso colombiano que ya había intentado jugar con sus variables económicas sin éxito, la mejor opción era aceptar la ayuda de organismos mundiales, así el gobierno podría empezar a reactivar la economía y consumo interno, creando programas de generación de empleos, planes de créditos empresariales, sistemas de restructuración de deudas, así como incentivos para atraer nuevamente la inversión extranjera directa. La IED es aquella inversión que tiene como propósito crear un interés duradero y con fines económicos o empresariales a largo plazo por parte de un inversionista extranjero en el país receptor (De Gregorio, 2007).

Sería de gran ayuda establecer reformas que ayudaran a liberar su economía y su sistema financiero, así como someter al gobierno a una disciplina fiscal.

Debido a que Colombia tiene un perfil de exportador de alimentos, materias primas y minerales, sería necesario impulsar este mercado para la exportación, por ejemplo a países como China, es un país que debido al crecimiento poblacional se ha incrementado su demanda, convirtiéndose en un mercado potencial.

También sería necesario que el Gobierno trabaje en sus debilidades, tales como: Flexibilidad cambiara, reducir los déficit y nivel de deuda, cuenta corriente con capitales a largo plazo, niveles crecientes de inversión e incentivar la productividad.

Tendría que establecer nuevas políticas y ajustes fiscales para que más personas pagaran impuestos, reducir los derechos pensionales y aumentar la edad de la jubilación para poder obtener más ingresos, pero al mismo tiempo administrar mejor sus gastos públicos, para evitar desbordamientos y permitir una disciplina fiscal y monitoreo de la deuda pública.

Sería fundamental establecer instrumentos que ayuden a controlar las variables externas para evitar que el país este sujeto a los cambios del capital financiero internacional.

Además de ello, sería necesario corregir el sesgo en el cálculo del IPC, porque como lo analizo Caicedo, al sobredimensionar la inflación se puede distorsionar la información y tomar una mala decisión, alterar el verdadero crecimiento de las variables reales e incrementar la proporción de ajustes de ciertos precios, tarifas y contratos de la economía. Sus estudios muestran que el índice utilizado por el DANE (Laspeyres) sobrestimó sistemáticamente a la inflación al consumidor en 0.7 puntos porcentuales por año en el periodo 1989-1997.

Los resultados que se podrían esperar con los aspectos antes mencionados es un crecimiento del PIB, la inversión extranjera podrá consolidarse ya que el nuevo ambiente económico trasmitiría credibilidad y confianza; una inflación baja que permita minimizar la incertidumbre en las decisiones de consumo y ahorro de los habitantes y además mejora el posicionamiento internacional de la producción local.

Bibliografía.

- Caicedo, E. (2000). Problemas en la medición del IPC, el caso colombiano. Recuperado de:

http://www.banrep.gov.co/sites/default/files/publicaciones/pdfs/borra152.pdf

- BusinessCol. (2016). Economía. Diccionario Económico de BusinessCol. Recuperado de http://www.businesscol.com/economia/reservint.html

- FMI. (2009). Manual de Balanza de Pagos y Posición de Inversión Internacional (6ª ed.) (eBook). Washington. International Monetary Fund.

- FMI. (2014). El Servicio de Crédito Stand-By (SCS) del FMI. Recuperado de: http://www.imf.org/external/np/exr/facts/spa/scfs.htm.

- Giraldo, C. (2001) Acuerdo de Colombia con el Fondo Monetario Internacional de 1999. Gestiopolis. Colombia. Recuperado de: http://www.gestiopolis.com/acuerdo-colombia-fondo-monetario-internacional-1999/

- Ghish, A. & Ramakrishnan, U. (2006). FMI. Finanzas & Desarrollo. E.U: Vuelta a lo Esencial ¿Importa el déficit en la cuenta corriente? Recuperado de http://www.imf.org/external/pubs/ft/fandd/spa/2008/06/

- Parkin, M. (2013). Economía (11ª ed.). México: Pearson.

- Samuelson P. (2006). Economia (18ª ed.). España: Mcgraw-Hill.

- Samuelson, P. (2010). Economía con Aplicaciones a Latinoamérica (19ª ed.). México: McGraw-Hill.

RÚBRICA

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