Comparación de corrientes éticas filosóficas
Enviado por tomas • 12 de Febrero de 2018 • 1.425 Palabras (6 Páginas) • 386 Visitas
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También podemos mencionar el hedonismo en una fase moderada; si involucra el placer por placer pero ahora también involucrará la moral y en teoría no habrá una totalidad de libertad.
Estas dos corrientes éticas tienen matices de distintos colores en cada una; y el hecho radica desde el “yo” ya que en la filosofía levinasiana nos propone un despojo absoluto del “yo” para reconocer al otro y luego poder saber quiénes somos, esto en la filosofía hedonista radical no importa en realidad, porque es una corriente egoísta en la cual solo se le da importancia a lo individual y al placer del mismo, por otro lado desde el hedonismo moderado en el cual ya se involucra la moral, se piensa un poco en el otro sin embargo poniendo en primer lugar a mi “yo” y el placer de mi acto hacia mí (egocentrismo).
Si tuviera que combinar estas dos corrientes, lo haría con un equilibrio de ambas dándole la importancia a las otras personas que me reconocen, porque sí comparto que los otros son necesarios para que mi “yo” exista, al yo reconocerme a través de los otros ya puedo ir aprendiendo quien soy y que cada vez que me involucro con personas esto puede cambiar. Pero al saber quién soy también debo darle un sentido a este “yo” que estoy descubriendo y enfocarme como en el hedonismo en lo individual y único de mí ser.
Porque será una posición recíproca, es decir, tal vez al yo descubrirme a mí y porque no satisfacer ciertos placeres individuales, cuando me relacione con otros “yo” puedo con mis actos (o aprendizajes) que esos “yo” cambien o se reflejen a través de mi “yo”. Todo esto aplicando los valores morales y la ética desde un punto de vista de la libertad de actuar. Porque la libertad si puede ser absoluta si tenemos claros nuestros valores morales y el reconocimiento de la esencia y presencia de las otras personas.
“…el principio de todo esto, y a la vez el mayor bien, es la sabiduría. Debemos considerarla superior a la misma filosofía, porque es la fuente de todas las virtudes y nos enseña que no puede llegarse a la vida feliz sin la sabiduría, la honestidad y la justicia, y que la sabiduría, la honestidad y la justicia no pueden obtenerse sin el placer. En efecto, las virtudes están unidas a la vida feliz, que a su vez es inseparable de lasvirtudes.”(Epicuro: carta a mèneco )
La mente humana piensa en torno a estos temas desde la incerteza de no saber qué pasará después de la vida y es por esto que se desprenden tantas corrientes éticas; dependiendo de nuestras creencias las cuales radican también en la cultura y la sociedad en la que vivamos; si todos supiéramos con certeza lo que pasará después de la muerte probablemente todos actuaríamos igual (e interesadamente para alcanzar tal fin). Por esto la religión propone en tener la certeza de algo que no podemos ver y así tendremos una recompensa; lo cual en teoría tiene cierta lógica ya que aún en la vida si actuamos bien tendremos consecuencias buenas y si actuamos mal viceversa. Nuestra percepción es que un acto bueno produce felicidad, satisfacción, bienestar y un acto malo en muchos casos culpa y desesperación; pero ¿porque hay personas que siguen optando por hacer lo malo?; y es ahí en donde cuestionamos nuestra percepción, pensando en que se nos ha impuesto de cierta forma.
¿Existe alguien al que puedas poner por encima del sabio? El sabio tiene opiniones piadosas sobre los dioses, no teme nunca la muerte, comprende cuál es el fin de la naturaleza, sabe que es fácil alcanzar y poseer el supremo bien, y que el mal extremo tiene una duración o una gravedad limitadas.
Creo que a partir del análisis de esta dos corrientes y sabiendo que existen muchas más; debemos encontrar un equilibrio con nosotros mismos y con los demás, no llegar a un extremo de filosofía en donde se empiece a contradecir con nuestras condiciones de vida. No basta con proponer que algo es ideal o no ideal; hay que primero preguntarnos si nosotros mismos somos dueños en lo absoluto de lo propuesto, si realmente estoy viviéndola como mi propia realidad y a partir de esto si es posible que más gente lo realice o lo acepte como tal.
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