Ensayo del libro "El hombre en busca de sentido"
Enviado por Antonio • 16 de Abril de 2018 • 1.740 Palabras (7 Páginas) • 946 Visitas
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El prisionero vivía en un entorno donde no tenía privacidad ni intimidad consigo mismo y hacía falta alejarse de las personas pero imposible hacerlo desde un lugar donde te vigilaban las 24 horas.
La cantidad de sufrimiento que debían soportar era inmensa y solamente tenían la opción de enfrentarse ante él y aunque fuese muy grande la carga y cayeran, lo más importante era levantarse y seguir luchando, sin avergonzarse de mostrar sus lágrimas ante todos porque en ésas lágrimas había testimonio de un verdadero hombre.
También hay un dato muy importante el cual narraba que en el campo de concentración existía la psicoterapia la cual consistía en evitar el mayor número posible de suicidios pero por el contrario en el campo de concentración estaba prohibido cortar la soga de un hombre que intentara ahorcarse.
Viktor Frankl durante el sexto invierno de la segunda guerra mundial y hasta entonces con muy pocos compañeros sobrevivientes, juntos comprendían que no todo estaba perdido, porque lo que los motivaba era su salud, su familia, su felicidad, los bienes materiales, los alimentos, el entorno social y entre muchas otras cosas más; por eso seguían en esa lucha constante para superar los sufrimientos y que quizá no todo estaba perdido y que después de lograrlo la victoria sería gloriosa.
Viktor Frankl les explicaba a sus compañeros que no se dejaran vencer por todo lo malo ni llegar a la desesperación e irse por el mal camino, porque les aseguraba que allá afuera tenían a un amigo, esposa, un vivo o un muerto que vivía esperanzado de que volvieran a sus hogares y que los recibirían con muchísimo orgullo.
Entonces Viktor Frankl explicaba que la vida dentro de un campo de concentración desgarraba el alma, se trazaba una línea que diferenciaba el bien y el mal y que con todos sus sentidos imaginaban cómo sería estar en los dos caminos y que la locura los penetraba hasta el grado de querer suicidarse pero sólo los verdaderos hombres comprendían que con la fuerza de su Dios lo iban a lograr.
La liberación
Todo esperábamos que la liberación fuera un suceso glorioso y de muchísima alegría por el hecho de volver a ser libres y regresar a sus hogares, pero las cosas de alguna manera eran un poco diferentes, porque mucho sí regresan pero ya con todo y problemas psicológicos, de ahí en más, no hubo ninguno que no saliera convertido de ahí, dejando atrás su vida de violencia y ahora apreciando la naturaleza y valorando todo pequeño detalle que la vida o un ser humano nos regalaba, porque el simple hecho de ver la sonrisa de un ser querido nos colma de alegría y sentimientos hermosos.
“Pues después de soportar aquellos increíbles sufrimientos, uno ya no tenía nada que temer, salvo a su Dios” (p.116).
¿Qué haría yo?
Bueno, no es muy fácil decidir qué haría yo en el caso de Viktor Frankl porque para empezar, en este momento podría decir que sí, yo hubiera hecho lo mismo que él y de más, pero a la hora de la hora uno ni las manos mete, sobretodo añadir que, el libro lo expresa muy bien, pero no hay mejor manera de entender lo que sufrieron esos prisioneros que haber estado ahí.
Esto sólo es un pequeño comentario, porque hoy en día vivimos en un ambiente diferente en el cual muchos ya la tienen “fácil” en muchos aspectos, ya se imaginarán a qué me refiero. Antes, nuestros antepasados tenían que trabajar y luchar día con día para obtener un logro y ahora la tecnología nos hizo flojos y no estamos acostumbrados a el sufrimiento como antes la batallaba.
¿A qué viene esto? Creo yo que las personas del siglo XXI nunca sabrán lo que sintieron aquellas que vivieron durante la segunda guerra mundial y sobre todo a aquellas personas que vivieron dentro de los campos de concentración y es muy fácil decir: “sí, yo le entro”.
Ahora hablando de mí, yo creo que jamás terminaré de imaginar todo eso que sintió el psicólogo Viktor Frankl, más sin embargo siempre he estado dispuesto a ayudar a los demás y a seguir adelante con las adversidades que la vida nos presenta, porque él también sentía miedo y desesperanza, pero aun así nunca bajó la guardia y no mostró ese lado sino siempre animó a sus compañeros y lo hizo como un buen líder, y un buen líder siempre debe de ser el primero en levantarse y seguir luchando para dar testimonio y guiar a sus compañeros y a veces aunque a nosotros nos falten piezas, sigamos quitando de nuestras propias piezas para regalársela a alguien que quizá está un poco más completo que nosotros pero no lo hacemos por esperar recibir algo a cambio, sino lo hacemos por amor y voluntad al prójimo y así es como Viktor Frankl, con humildad, voluntad, testimonio, carácter y fortaleza, salió adelante y sobrevivió para compartirlo con los demás y que de esas manera también nos sirva a nosotros para reflexionar y valorar todo lo bueno y lo malo que nos da la vida.
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