Importancia de la epistemología en las ciencias de la Bibliotecología

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objeto la ciencia; y dicha reflexión se realiza con ayuda de un instrumental filosófico hecho de conceptos, métodos y categorías.

Esto es, las preguntas generales que se plantea toda reflexión filosófica se le plantean a la ciencia, por lo tanto, lo que se investiga es ¿qué es la ciencia?

¿En qué se distingue este tipo de conocimiento de otros?

¿Cómo se obtiene y se justifica tal conocimiento?

¿Cuáles son las condiciones necesarias y suficientes para que se dé el conocimiento científico?

¿Cuál es su función y su finalidad?

Y ¿cuáles son sus límites? (Rendón, 2005, pág. 6)

Por ello podemos decir que una intervención epistemológica de la bibliotecología supondría el examinarla como ciencia, esto significa que se daría un acercamiento muy atento a toda la teoría y vertientes que la componen, analizándolas no de manera separada sino como parte de un solo elemento.

Y de esta manera, tras formular las preguntas propicias se alcanzaría una percepción más acertada de la ciencia investigada.

Ahora que se ha comprendido qué es epistemología, es importante definir la razón por la cual una investigación de este tipo es de suma importancia dentro de la bibliotecología.

En este sentido Rendón (2008) divide en tres las principales razones por las cuales una investigación epistemológica es importante para la bibliotecología.

Primeramente, para construir autoconocimiento de esta disciplina de manera que ella genere una identidad propia desde la cual pueda proyectarse y sea la que defina sus aspectos metodológicos trascendentales.

Ello implica el delimitar los alcances de la ciencia, propiciando así un estado de orden dentro del cual ella actúa.

Esto querría decir que se establecerían parámetros muy claros y específicos que serían los elementos abarcados por ella, evitando que se genere un caos en cuanto a los objetivos planteados al entrometerse en campos que le son ajenos o que pertenecen a disciplinas distintas.

Luego tenemos un aspecto determinante como lo es la manera en que un análisis epistemológico interviene a la hora que la bibliotecología –como cualquier otra ciencia- concreta su cuerpo teórico.

Ello facilita que la bibliotecología adquiera una teoría clara y consolidada que venga a ser canoníca, un cuerpo teórico con sus propias leyes, principios, alcances bien delimitados

Al lograr crear una teoría sólida se fortalecerá la ciencia en sí y se asegurara que su actuar no se entorpezca por la presencia de influencias externas, las cuales pueden llegar a complicar las cosas o a generar confusiones en cuanto a los temas prioritarios para la disciplina en cuestión.

Finalmente una investigación epistemológica se involucra en lograr la interdisciplinariedad de una ciencia, esto querría decir que se convierte en el medio desde el cual la bibliotecología se pondrá en contacto con otras disciplinas.

Este acercamiento entre distintas especializados se realizará dentro de un ambiente ordenado, donde si bien se dará un intercambio entre disciplinas, este no afectará el funcionamiento de ninguna, pues cada una se limitará a su campo especifico y será más que nada un proceso de retroalimentación.

Esto supone que la bibliotecología puede realizar este proceso colaborativa con plena confianza, logrando así conseguir sus objetivos pero manteniendo en todo momento una conciencia de sí misma como disciplina.

Es decir no se adentrará a actuar en campos que le son ajenos ni verá puesto en riesgo su conocimiento por la presencia de otras disciplinas.

Como podemos concluir el análisis epistemológico de la bibliotecología conforma un momento trascendental dentro de esta disciplina comprendiéndola a ella como ciencia.

Es decir, se le otorga un reconocimiento epistemológico que justifica de manera muy intima a la ciencia brindando un panorama más amplio y detallado de todo lo que ella significa.

Sobre este tema nos comenta Gómez Hernández (2002), que en un reconocimiento epistemológico, se da que:

Ocurre que por encima de lo que es una mera transmisión de conocimientos y de experiencias de carácter práctico, existe una investigación científica realizada con métodos científicos, y los resultados de esa investigación se van reuniendo dentro de ese corpus científico, con el desarrollo de una serie de principios y un lenguaje técnico específico de carácter científico. (Gómez Hernández, 2002)

Es partir de esta reflexión que el verdadero sentido de la bibliotecología queda expuesto.

Ya no la contemplamos desde un ángulo inexacto desde el cual no apreciamos todo su esplendor sino que somos capaces de adentrarnos en ella, logrando de este modo concretar una comprensión más profunda no solo de sus fundamentos, sino de las mismas motivaciones desde la cual ella se impulsa para actuar.

De esta manera apreciamos su enfoque filosófico, consiguiendo descifrar epistemológicamente la teoría desde la cual opera la bibliotecología.

Solo así este cuerpo teórico deja de ser solo un cúmulo fragmentos dispersos sin ningún orden, adquiriendo sentido como parte de un todo, como los segmentos claros y específicos que determinan la razón de la bibliotecología, ya no como un concepto difuso, sino como una ciencia en todo el sentido de la expresión.

Esto le confiere una identidad propia lo cual determinará su relación con otras disciplinas y la manera en que se desenvolverá con otros tópicos científicos que le pueden ser afines.

Del mismo modo es solamente así que nos hallamos con toda claridad ante el objeto de estudio que mueve los esfuerzos esta disciplina.

Será de esta manera que pueden entenderse los parámetros dentro de los que ha de trabajar, dirigiendo atinadamente el desarrollo que ha de influenciar la percepción que tenemos e ella y la evolución que la bibliotecología tendrá en el amplio contexto donde opera.

En pocas palabras ha de significar un fortalecimiento de esta ciencia, una fuerza que habrá de impulsarla hacia su propio mejoramiento y consolidación en el marco social al que ella se debe.