STANISLAVSKI, Ética y disciplina

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“Así de importante fue para esos escritores practicar todos los días sin falta. Al hacerlo su objetivo fue mejorara su capacidad para registrarse fugaces pensamientos e ideas así como sentimientos que habían experimentado y las emociones que habían sido capaces de recoger” [5]

Recuerdo que al principio del semestre siempre comenzábamos haciendo ejercicio, pues es una parte esencial para el actor estar en forma, aunque me costaba demasiado trabajo, poco a poco conseguía resistir más, pero lamentablemente tenemos muy pocas horas de actuación en nuestro horario, tan solo cuatro, entonces el profesor Ronaldo nos dijo que él ya nos había enseñado como mantenernos en forma y que es nuestra responsabilidad hacerlo, claro nuestra elección si queremos este camino, tal y como dice la cita de arriba que si hacemos diario las cosas que queremos lograr cada vez nos costara menos trabajo, pero eso solo se logra con constancia y fuerza de voluntad.

“Puesto que el actor “no tiene tiempo” que darle a su actuación, su arte en el mejor de los casos se queda estancado, y no puede esperar hacer nada más que pasar el tiempo o rodar cuesta abajo en el peor de los casos.” [6]

De esto me percate cuando me paso en la improvisación que teníamos que llevar de nuestro animal humanizado, porque por no tener tiempo de ensayar lo deje pasar solo llegaba a los ensayos con mis compañeras, pero no me tomaba el tiempo a solas, para ver cuales movimientos podrían ayudarme para mi animal humanizado, y lo que sucedió es que en el primer ensayo no pudimos avanzar mucho porque yo no sabía cómo moverme hasta que vi la necesidad de hacerlo por mi parte de esta forma al tener ya la historia y los movimientos que mi personaje me permitía hacer todo fue mucho más sencillo y yo ya me sentía más cómoda de lo que iba a hacer en escena. Pero si hubiera dejado pasar el ensayo y que yo no hubiera visto por mi parte lo de mi rana humanizada, el ensayo no me hubiera servido de mucho y nos hubiéramos presentado en las mismas dificultades.

“Resumo lo anterior: un ensayo arruinado echa a perder la presentación y un papel débil impide la exposición de las ideas básicas del dramaturgo; y es la idea del dramaturgo la que da al teatro su razón de existencia.” [7]

Relaciono mucho este fragmento del libro, con la experiencia que tuve en el ensayo general porque si nos hubiéramos ido directamente a dar la función sin una previa revisión las cosas no hubiera salido nada bien, cada una de las equivocaciones que tuvimos en el ensayo no las hubiéramos podido corregir en la función y hubieran ocurrido muchas accidentes, son detalles que importan mucho para que el público se mantenga atento a lo que sucede en la escena, porque con cualquier pequeña equivocación podemos distraer al público y que ya no vuelva a involucrase con la historia.

Por esto mismo creo que es de suma importancia que los ensayos se hagan tal y como se quiere dar en función, porque si solo se hacen al aventón no se pueden notar las dificultades a las que se van a enfrentar y poder corregir. Entonces ese ensayo sería como no haber tenido nada y que la función no sea algo de lo cual estar orgulloso.

“Si en el edificio teatral falta un mínimo de disciplina, el actor sobre la escena corre el peligro, incluso de no encontrar el accesorio indispensable, del cual puede depender muchas veces la escena.”[8]

En el curso la mayoría de las improvisaciones fueron en equipo, y ese trabajo era un conjunto que si todos cooperaban era genial, el gran problema se presentaba cuando alguno de ellos no se incluía en escena, se notaba bastante, pues se ve que no todos están al mismo nivel. Es lo que yo pude notar cuando mis compañeros nos mostraban su trabajo y se veía algo raro, es que me di cuenta que con uno que no trabaje, el esfuerzo que todos hicieron se ve afectado, no solo a la persona que no puso de su parte, sino a todos por lo mismo de que son un equipo. Entonces se necesita de una disciplina para que la escena quede y todos estén en sintonía, porque de alguna u otra forma el público lo percibe.

Y así como esa energía necesitan los actores en escena, también todo su equipo de trabajo, los que se encuentren en el teatro, a fin de cuentas todos los que formen parte del proyecto porque si uno no cumple en forma y tiempo lo que se necesita puede afectar a los demás.

Por ejemplo cuando fue el ensayo general para nuestro examen de actuación, la música no entraba cuando lo necesitábamos, afortunadamente era un ensayo en el que es para equivocarnos y corregir, pero si hubiera sucedido en función eso nos hubiera afectado a nosotras, las que estamos dando la cara de todo el equipo, hubiera sido bien fácil desconcentrarnos, aunque no lo debemos permitir debemos de seguir, tratar de corregir a pesar de las dificultades que se presenten. Pero más bien lo que quiero decir es que se nos hubiera complicado, y no saldría como lo que queremos o lo más cercano a ello.

“Naturalmente el teatro es un producto de la energía humana y refleja energías humanas, la genialidad no es un milagro que aparezca de repente como un hongo, sino es saber desarrollar con éxito la propia energía y compararla con las energías que despiertan alrededor, en el mundo de los hombres.” [9]

La verdad en esta parte del libro me recordó muchísimo al ejercicio de los números. Sobre todo cuando me tocó observar a mis compañeros noté un gran cambio en ellos, muchos de mis compañeros que nunca me imaginé verlos en cierto estado se estaban expresando y la energía que sentía hasta a mí me afectaba, me movía en algo. Es esta la energía que debo de ocupar en escena pues el propósito que yo busco al estar en el teatro es mover estados y precisamente como lo pude experimentar al ver a mis compañeros, se puede lograr de una forma muy efectiva por medio de las energías como las que mis compañeros sacaban en este ejercicio.

“Si al actor le falta el conocimiento elemental de sí mismo y de todas sus fuerzas para ponerlas al servicio de su arte, no lo necesitamos. Nunca se volverá componente creativo.”[10]

Durante todo el curso estuve constantemente en un autoconocimiento, siempre encontraba algo nuevo en mí, en cada una de las clases, cosa que realmente aprecio porque de este modo puedo mejorar como actriz.

Pues realmente no hay recetas para hacer un cierto personaje, simplemente tengo que conocer mis capacidades, de este modo tomar esas ventajas que tengo para que me ayuden a crear un personaje creíble. También a llegar a conocer cuáles son mis límites y saber que puedo lograr, que me podría afectar, y así conocer a lo que me puedo enfrentar o que cosas no.

“El