Ella. Un día, no recuerdo bien cuando, estaba tomando un café con un buen amigo

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usa los lentes, es de una manera tan tierna que solo quiero besarla y abrazarla, solamente quisiera mirarla por el resto de mi día, todos los días, eso es lo único que quisiera, sus lentes es el mejor accesorio que puede tener, sin collares ni ropa fina, ni joyería ni cosas caras, solamente necesita sus lentes para verse como la persona más hermosa que puedas ver en la vida, mejor que cualquier modelo, mejor que cualquier otra mujer, aunque ella no lo crea.

A este punto de la conversación, no me importaba si nuestro café se enfriaba, lo que me importaba era seguir hablando de ella. Para concluir esta pregunta (Y yo pensando que terminaría la conversación por desgracia) le conté sobre sus manos, ella tiene unas preciosas manos, como esas manos ningunas, suaves, como si estuvieras tocando algodón, y cálidas, muy cálidas, esas son las dos cosas que las caracterizan, y no necesitan nada mas, así son hermosas, son pequeñas pero me gustaba tomarlas mientras caminábamos, en serio lo adoraba mucho.

Pensé que la conversación terminaba, pero para fortuna de mi corazón, la conversación siguió, el a continuación continuo con la pregunta de, ¿Pero, que tiene ella que no tengan otras chicas?, y yo le respondí, pues ella es especial, ella no es de las personas que te mentiría, porque en primer lugar ella no sabe mentir, y en segundo lugar, le han roto tanto el corazón (o eso es lo que creo no se) que no le desearía algo similar a alguien, por eso coincidimos bien, yo la protejo, la acojo en mis brazos cada vez que ella lo necesita, y ella lo sabe, además ella tiene esa chispa de ternura y honestidad que no encuentras estos días, sé muy bien que ella no es la más preciosa a la vista del público, pero ella es arte, y el arte no necesita ser hermoso, tiene que hacerte sentir algo, además ella es hermosa para mi, y a mí solo me importa mi opinión, además de que a ella no deberían importarle las criticas, porque ella es hermosa justo en la manera en debe serlo, la más sincera.

La noche caía y la cafetería cerraba, entonces mi amigo y yo nos despedimos, y fui caminando a casa, en el trayecto me puse a pensar en ella, como era de costumbre, pero esta vez no pude pensar en nada mas, solo pensaba en ella, pensé en los buenos y lindos momentos, pensé en las noches en las que hablábamos por notas de voz, y como la regañaron porque no se dormía jeje, recordé cuando me preocupe tanto por ella, que la llame más de 30 veces, y recordé el gran alivio que sentí al saber algo de ella, también recordé las veces en las que me preguntaba cómo me iba o como había sido mi día, esos son detalles de verdad, fuera de cosas materiales, el tiempo que alguien gasta pensando y preocupándose por ti es el mejor detalle, ella era la única que se preocupaba por mí, y por eso la quiero, a veces pienso que ella es mi más hermosa casualidad, pero me pongo a pensar más a fondo y recuerdo que las casualidades no existen, que todo está destinado a pasar, como tenga que pasar y el tiempo que tenga que durar, siempre estaré profundamente enamorado de ella, bueno,